16 Personas que solo ven el lado bueno de todo

Gente
hace 3 años

Si tu mamá o tu papá eran optimistas, es muy posible que heredes este rasgo de ellos. Los estudios demuestran que esta característica se transmite en el 25 % de los casos. Pero incluso si la capacidad de ver las cosas de manera optimista no se te otorga desde el nacimiento, puedes desarrollarla fácilmente tratando de concentrarte en los aspectos más positivos de la vida y, de ser posible, evitando las malas noticias y a las personas que derraman negatividad sobre todo lo que ven.

Genial.guru no sabe si las personas de nuestra selección fueron optimistas desde su nacimiento o se volvieron así con el paso de los años. Pero sus historias son, sin duda, dignas de ser contadas.

  • Cuando mi esposo y yo recién estábamos comenzando a salir, un día fuimos a una feria. Allí compramos dos enormes perritos calientes y decidimos agregarles mostaza. Me acerqué al expendedor de mostaza y lo presioné, pero no pasó nada. Lo presioné de nuevo. La mostaza salpicó con todas sus fuerzas y me inundó de la cabeza a los pies. Incluso llegó hasta mi cabello, lo único que no estaba cubierto con ella era el perrito caliente. Completamente aplastada, me volví hacia mi novio, y él me miró, sonrió y mojó su perrito caliente en mostaza. Y luego se lo pasó por la camisa y dijo: “Listo, ahora somos el uno para el otro”. © Onlyifwe / Reddit
  • Hace treinta años, mi vecino se puso su primer marcapasos. Y con él en el hospital, había un anciano de 90 años bastante vigoroso, que iba a ser sometido a la misma operación. Durante la preparación, los médicos le explicaron al anciano que en 10 años la operación tendría que repetirse: la batería y el dispositivo en sí no duraban para siempre. A lo que el abuelo respondió indignado y con cara seria:
    —¿O sea que tendré que venir aquí cada 10 años? © Simplygreat / Pikab
  • Hace aproximadamente un año, tenía que hacer un despacho urgente en el trabajo y fui a la oficina de correos. Había una fila de 20 personas. Imagínate: calor; cochecitos y niños gritando, con madres esperando un paquete de AliExpress; ancianas con facturas de servicio; secretarias enviando 20 cartas a la vez. Después de 1 hora y media, finalmente hice el envío, y la mujer que estaba detrás de mí en la fila le dijo al operador:
    —Un billete de lotería, por favor.
    Hacer una fila de una hora y media por un billete de lotería, eso sí es un optimismo increíble. Yo no puedo hacer eso. © klashka007 / Pikabu

  • Cuando éramos jóvenes, un grupo de mis amigos fueron en masa a la casa de campo de los padres de uno de los chicos para celebrar algo. Y lo hicieron tan activamente que en medio de la diversión, prendieron fuego a uno de los cobertizos. A la mañana siguiente, este chico recibió una llamada de sus padres. Apenas lograron despertarlo a empujones, al fin abrió los ojos y, a la pregunta de su padre: “¿Qué tal el festejo?”, solo pudo decir una palabra: “Candente”. © IamLie / PIkabu

  • Mi abuelo trabajaba en una fábrica de procesamiento de carne, por lo que a menudo había grandes trozos de carne o despojos en el refrigerador. Y como en Irlanda es costumbre cocinar carne para la Navidad, se guardó un enorme jamón para las fiestas. Pero resultó que no cabía en ninguna cacerola. Tampoco queríamos pedirle una a los vecinos: todo el mundo estaba preparando la cena festiva. Pero era imposible detener a mi abuela con una tontería así. Cocinó el jamón en una lavadora de carga superior. © Roibaird O Rian / Quora

  • Dio la casualidad de que mi generación fue la última en nuestro edificio. Los pequeños ya no corren por el patio de juegos, todos se han ido a las grandes ciudades. Pero ahora toda la cereza del jardín es solo para mí. Soy un chico de 26 años. © Oídoporahí / Vk

  • Estaba regresando de un largo viaje a la casa de un amigo y vi a un chico que caminaba por la carretera con una mochila. Me detuve para darle un aventón. En el camino, comenzó una historia sobre su viaje desde el otro extremo del país a pie y sin dinero. Escuché a medias hasta que mencionó en la conversación un pequeño pueblo de donde yo provengo. Pero no lograba recordar a este chico. Y luego me di cuenta:
    —¿Andrés?
    Me miró sorprendido.
    —Eras mi compañero de clase en la primaria.
    Así encontré a mi primer amigo. Debido a que tenía unos padres problemáticos, fue trasladado del segundo grado a un internado. La vida lo golpeó bastante, pero no pidió ayuda a nadie y se mantuvo positivo. En la estación de tren, le di un poco de dinero amistosamente para que pudiera llegar a su casa. Me demostró que nunca debes bajar los brazos. © BardyEdwards / Pikabu

  • Nos obsequiaron un juego de té para la boda. Yo estaba embarazada y decidí no abrir la caja, esperar y hacerlo más adelante, total, teníamos platos más que suficientes. Pensé que daría a luz al bebé y luego lo abriríamos. Y después no hubo tiempo: pañales, kínder, etc. ¡Pero por fin llegó! Recordé el juego y celebré con él el aniversario del divorcio. Qué puedo decir, las tazas son preciosas. © laborotioriya135 / Pikabu

  • Vi una escena divertida el otro día. Conducía a casa desde el trabajo y pasé junto a una casa donde viven dos ancianos. Y esos ancianos tenían frente a su hogar toda una montaña de leña. La señora ponía la leña en un carrito y el señor se la llevaba y ponía los leños en una pila. Al parecer, un poco cansados, decidieron divertirse un rato. El anciano metió a la abuela en el carrito y comenzó a llevarlo de aquí para allá. Ella lo regañaba en broma, le agitaba la mano, pero se reía a carcajadas. Bajé la velocidad y me puse a mirarlos. Y hasta sentí un poco de envidia y mucha calidez por lo que vi: qué ancianos tan alegres y traviesos, jóvenes de corazón hasta el día de hoy. © mamakerova / Pikabu

  • Tengo un amigo cuyo optimismo y amor por la vida siempre admiro. Resultó que a la edad de 12 años tuvieron que amputarle una mano. Pero siempre se toma su condición con humor. Una mañana, luego de una alegre fiesta, el dueño del departamento comenzó a regañar a los invitados porque habían dejado un gran desorden. Entonces mi amigo dijo: “Hermano, no te preocupes, lo limpiaremos todo en un santiamén a 3 manos entre los dos”. © Bulbul82 / Pikabu

“Trabajo como instructor de paracaidismo. Hoy vi el tatuaje de uno de los paracaidistas: ’No tienes idea de lo alto que puedo volar’”.

  • Trabajo en una farmacia. Tengo una clienta habitual: vive en una casa vecina y, como tiene muchos niños, viene a menudo. Siempre sonríe, y su esposo es de oro: puede venir a comprar tampones o medicamentos para los niños en medio de la noche. Un día ella vino y dijo: “Dame una prueba de embarazo y tampones”. Le pregunté si no se había equivocado. Respondió: “No. Pensaré positivamente y atraeré el resultado deseado”. Y se rio. Una hora después volvió. Mientras estaba en la fila, hablaba cariñosamente por teléfono con su esposo, le prometía cocinar su pastel favorito. Cuando llegó hasta la cajera, soltó: “¡Todo eso de la materialización de deseos es pura basura! ¡Dame ácido fólico y vitaminas para embarazadas!”. © Oídoporahí / Ideer

  • Hace poco contraté a un nuevo trabajador para mi taller mecánico. Un gran chico, hábil, aprende todo al instante. Pero la cereza del pastel fue el momento en que lo vi durante un descanso removiendo azúcar en el té con el destornillador con el que un minuto antes estaba trabajando. Entonces me di cuenta: definitivamente trabajaremos bien juntos. © Arafel / Pikabu

  • Cuando trabajaba en una gasolinera, tenía un gerente que era profesor en su tierra natal, Egipto, pero no había podido encontrar trabajo en una universidad de mi país. Y consiguió ese trabajo. Una vez me dijo: “La gente me menosprecia porque soy un inmigrante y trabajo en una gasolinera. Pero me convertí en gerente aquí después de seis meses y gano 40 000 USD al año. ¿Sabes cómo?”. Negué con la cabeza. “Trato cada trabajo como mi carrera hasta que encuentro una nueva carrera”. Aquello me impactó. Yo también había aceptado ese trabajo poco valorado porque, como él, no había podido encontrar un puesto en mi especialidad. Pero lo que él dijo cambió la forma en que lo percibía. Puede que no esté aquí para siempre, pero mientras esté aquí, debo aprovecharlo al máximo. © charlottedhouse / Reddit

  • Mi vecina tiene más de 70 años, sus piernas ya no la sostienen, pero tiene mucha energía. Cuando necesitaba instalar un nuevo gancho en la pared, sus amigas tuvieron que insistirle durante mucho tiempo para que me llamara a mí con un perforador. Hice todo rápidamente, y ya a punto de irme, noté que había un punzón de hormigón antiguo en la mesita de noche; esta herramienta se usaba para romper manualmente las paredes cuando no había perforadores. El trabajo era infernal y tedioso.
    —¿Para qué necesita esta herramienta?
    —Bueno, quería hacer todo yo misma para no llamarte a ti...
    A mi comentario de que el trabajo estaba más allá de sus fuerzas, la anciana respondió (¡ofendida!):
    —¡Pues comí bien primero! © EdwardKim / Pikabu

  • Fueron dos semanas maravillosas. Sin estrés, insomnio ni nervios. Mi piel descansó del maquillaje y mis ojos de los lentes de contacto. Todos los días hay muchos placeres, como masajes, y mucho tiempo libre. Alguien pensará que estoy hablando de un centro turístico en el extranjero. Pero no, simplemente me internaron en un hospital. La gente a mi alrededor, por supuesto, siente pena y se preocupa por mí, ¡pero yo estoy feliz! © Oídoporahí / Vk

  • Cuando mi hermano comenzó a trabajar como oficial de policía, descubrió que tenía que pasar mucho tiempo solo en una patrulla, y horas de aburrimiento se intercalaban con momentos de verdadero horror. Y entonces, un día, mientras pensaba en ello, vio a un sucio vagabundo tirado en el suelo cerca de su coche. Mi hermano fue a ver si estaba vivo. El hombre apenas abrió sus ojos apagados. Mi hermano le preguntó si todo estaba bien. El hombre resopló. Mi hermano empezó a alejarse, pero luego se detuvo: “¿Por qué vives?”, preguntó. “¿Qué te hace levantarte por la mañana?”. El hombre trató de incorporarse, moviendo la mandíbula mientras pensaba una respuesta. Finalmente dijo: “Mañana será otro día. Puede pasar algo maravilloso”. © Jay Bazzinotti / Quora

"¡Es una pequeña selva tropical!".

¿Has conocido a personas verdaderamente positivas? ¿O quizás tú mismo eres una persona alegre? En tu opinión, ¿qué cambios deben ocurrir en la vida para que un pesimista se convierta en un optimista?

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