A menudo, el matrimonio está lleno de discordias y problemas domésticos, por lo que a veces parece que no hay nada bueno que recordar y contar a los descendientes. Pero si miras esa unión desde otra perspectiva, verás que en cualquier familia hay muchas historias divertidas capaces de animar cualquier cena.
- Mi madre estaba de mal humor y pasó toda la tarde riñendo sin parar con mi papá. Cuando hirvió huevos para la ensalada y los puso en agua fría, él los reemplazó por unos crudos y se encerró en su habitación. Papá asegura que los gritos se escucharon un par de pisos más abajo. Ambos ya están jubilados, pero no dejan de ser divertidos... @generalfox
- Voy por la calle y adelante de mí va una pareja, de 40 años aproximadamente. El hombre no para de abrazar a su mujer y le da de comer dulces. Después de unos 20 metros se dan otro abrazo y la esposa suelta la frase: "Eres tan tierno cuando tienes hambre".
- Llevamos casi un mes sin limpiar el apartamento... Entonces, mi marido, sin ganas de ofender, dice: "Cariño, al menos limpiemos los pisos... para no ensuciar las escaleras".
- No me imagino cómo va a ser mi marido de anciano... Ahora escondió una botella de vino casero, anotó "el lugar secreto" en su diario, ¡y escondió el maldito libro!
- Se escuchan voces en la cocina. Mamá: "Echa un vaso de azúcar". Papá: "¿No es demasiado?". Mamá: "No, lo tengo controlado". Se oye el ruido de la batidora. De repente, él apaga el aparato y con la voz llena de ofensa dice: "Me estás engañando, no estamos haciendo ningunas empanadas de pescado, ¡pero te creí hasta el último momento!". @rusvod17
- Regresando de una barbacoa donde nos atoramos de carne asada, rollitos de queso, cerveza, whisky etc., nos tropezamos con un chico corriendo (un joven vestido con pantalones cortos y sudadera). Dejándole el paso, mi mujer dice: "Nosotros bebiendo y la gente haciendo deporte...". El chico escuchó lo que dijo ella, volvió la cabeza y respondió: "Nada de ejercicios, voy por unas cervezas". De hecho, unos cuantos metros después encontramos una licorería donde el muchacho estaba comprando alcohol. @TrommVain
- Estábamos viendo televisión con mi esposo, y nuestro hijo rellenito de medio año corría, gritaba, y saltaba. Lo miré con una sonrisa feliz y le pregunté a mi marido (un hombre delgado de dos metros de altura): "¿Alguna vez pensaste que tendrías un niño gordo?". A lo que él respondió: "¡Nunca pensé que iba a tener una esposa obesa!".
- Mis padres están divorciados, y ambos volvieron a casarse con otras personas. Los cuatro están felices de cuidar a mi única hija. Mi esposo y yo nos separamos de manera amistosa, así que mi pequeña se comunica con él y con sus padres, los cuales también se divorciaron y formaron nuevas familias. En total, mi niña tiene cuatro abuelas y cuatro abuelos. Y ahora me voy a casar por segunda vez. Los padres de mi segundo marido también están divorciados y tienen dos familias. ¡Mi hija es la primera y única nieta de 12 abuelos!
- Trabajé en un centro comercial como asesor de ventas en una zapatería. Un día, atendí a una pareja con un niño de 4-5 años. La esposa y su hijo fueron al departamento de mujeres, mientras que el esposo se dirigió al departamento de hombres. Mientras estaba atendiendo al hombre, su niño apareció gritando: "¡Papá, mamá te ama!". El padre frunció el ceño y dijo: "Lo sé, dile que compre lo que quiera". Una familia maravillosa. @sanchezzzco
- Cuando era pequeña, mis padres compraron un auto "Ford Fiesta" de color rojo para ir a la playa. Entonces, llegó el día. Ya estábamos muy lejos de casa y, de repente, el coche se rompió. Papá bajó del mismo para buscar el fallo. Pasaban las horas, ya estaba oscureciendo, y él estaba fuera de sí por la rabia. Amenazó al "Ford" con que lo quemaría y compraría un "Chevrolet". Mamá, que también tenía la licencia y más experiencia de conducción que mi padre, decidió ver qué sucedía. Resultó que nos habíamos quedado sin gasolina. Todo el camino hasta el mar, él estuvo callado.
- Nos sobró una tarta de una fiesta que hicimos la noche anterior. Y al día siguiente, mi hermano y yo la comimos entera. Por la noche, cuando nuestros padres llegaron a casa del trabajo, papá sacó un pedazo de la tarta del estante superior de la nevera y le dijo a mi madre: "Sabía que los niños se la comerían toda, así que te escondí un trozo".
- Mis padres compraron un auto azul. Bueno, para mí es de ese color, ya que mi madre dice que es verde claro, y según mi hermana es gris azulado con un tinte verde. Nuestro papá se ríe misteriosamente y esconde los papeles del carro. ¡No sabe ni Dios que es lo que pone allí!
- Cada hombre tiene sus aficiones: pesca, gimnasio, juegos de computadora, etc. Mi esposo aprendió a imitar el maullido de los gatos. Al principio, les gastaba bromas a sus amigos y colegas: maullaba y observaba mientras buscaban al animal en la oficina o en el auto. Su "logro" principal es que muchos felinos y perros le creyeron. Precisamente hoy me ha contado que había estado media hora "hablando" con un gato en el trastero. Es gracioso, pero ya empieza a preocuparme.
- Tengo 5 meses de embarazo. Mi marido y yo somos aficionados a las películas de gánsteres. Hace unos días, cuando estábamos viendo una saga nueva, me emocionó la trama y dije: "¡Al menos debería cortarle la mano!". Mi marido se dio vuelta y comentó: "¿A quién tenemos aquí? ¿No serás el barrigón de Al Capone?!". Después nos reímos un buen rato.
- Desde que tuvimos a nuestro segundo hijo, mi esposo y yo constantemente nos demostramos el uno al otro quién está más cansado para averiguar quién va a retirar a los niños de la guardería, o quién los llevará a hacer deportes, etc. El que actúa mejor, se queda en casa.
- Somos padres jóvenes de un hijo de 4 años y de una niña de 2. Ambos trabajamos y tratamos de vivir una vida plena; debido a eso, tenemos muy poco tiempo para dormir. Un día, mi esposo se levantó, puso a calentar la tetera (con un silbato) y accidentalmente se quedó dormido en la cocina. Cuando llegó el momento de levantarme, lo vi durmiendo. En ese momento, la tetera emitió el silbido y él, aún dormido, se puso a consolarla: "¡Tsh, tsh, tsh, no llores!". Apenas pude aguantar la risa.
- Tengo vecinos muy extraños. Es una pareja de 20 años. El marido es un hombre delgado y bajito. La mujer es corpulenta y muy alta. Se pelean constantemente: gritan en las escaleras por no poder compartir algo y arrojan cosas en su apartamento. Pero al ocaso, se sienten en un banco... y se abrazan. Sin embargo, después de ver un día que el hombre estaba colgado de su balcón sosteniéndose de una barra de hierro, pidiendo ayuda a su mujer, pensé que nunca volverían a estar juntos. Pero, al asomarme por la ventana en la noche, los vi sentados en el banco, entonces me di cuenta: ¡eso es amor verdadero!
¿Y tú, tienes algo que contarles a tus descendientes? ¡Nos gustaría escuchar tus historias para reírnos contigo!