20 Historias de parto muestran que el humor puede convertir el momento más tenso en una comedia

Historias
hace 2 años

Seguramente no habrá madre que pueda negarlo: dar a luz es una experiencia inolvidable en la que ocurre de todo. Es que no hay mujer que no tenga una anécdota sobre su parto donde pujos, epidural y obstetras son sin duda palabras clave. Y hay veces en que también las risas se apoderan del momento y el comentario o la situación que las provocó pasa a ser para siempre el principal recuerdo.

En Genial.guru recopilamos anécdotas de partos de mujeres muy inteligentes que no han perdido el sentido del humor ni en el momento más crucial y tenso de sus vidas.

  • Mi marido presenció mi segundo parto. No bien mi hija nació, se la alcanzaron a él. Pues resulta que los dos somos de pelo oscuro y la niña tiene el pelo claro, así que cuando la enfermera se la estaba pasando, nos miró con cara de susto. Yo creo que él leyó un poco el temor de la mujer y le dijo: “Mientras me diga papá...” 😀😅. © Isabel Margarita / Facebook
  • Mi hija menor nació 12 horas después de que comenzara mi trabajo de parto, con una cesárea de emergencia y con anestesia total. Cuando desperté y pregunté por el sexo del bebé, la enfermera me dijo que era niña. Yo dije: “¡Otra vez!”. Y cuando le avisaron lo mismo a mi marido, él respondió: “¡Nos volvió a engañar!”. Pues todo el embarazo supusimos que iba a ser un varón. © Erendira Galarza Villalobos / Facebook
  • En el trabajo de parto, tuve que preguntar cómo pujar y la enfermera dijo: “Actúa como si estuvieras haciendo caca”. Entonces, cuando llegó el momento de hacerlo, mi esposo tenía la intención de decir: “¡Puja! ¡Puja!”. Pero en cambio, gritó: “¡Caca! ¡Caca!”. Me eché a reír y tuve que esperar a la siguiente contracción antes de poder pujar de nuevo. © FluffiMuffin / Reddit
  • Cuando empecé con los dolores de parto de mi primer hijo, le dije a mi marido: “Creo que ya vas a ser papá”. Se levantó como resorte y se fue a guglear: “Cómo saber cuándo se rompe la fuente”. Yo me levante atrás de él, me paré en la puerta y de repente ¡zas! Parecía una cascada. Le dije: “Bueno, creo que esa duda ya quedó despejada”. © Cris EQ / Facebook
  • Cuando llegué a casa a bañarme y cambiarme después de tener a mi bebé (el niño había quedado en neonatología por unos días más), mi tío me vio y me preguntó: “¿Cómo es tu bebé?, ¿se parece a Roque?” (Roque es mi marido). “No”, le dije, “se parece al papá” (me refería al papá de mi marido). Muy preocupado, me preguntó: “¿Y quién es el papá?” 😂. © Sonia Alarcon / Facebook
  • Cuando estaba por tener a mi primera hija, me mandaron a caminar y cada vez que tenía contracciones mi esposo decía: “Respira, tranquila” y me sobaba la espalda. Después de varias veces, le dije: “Cállate, no me digas qué hacer y no me toques, que por tu culpa estoy así” 😅.
    Después le pedí perdón, ¡pero él ya ni se acordaba! © Xchell Rivera Razo / Facebook
  • Cuando tuve a mi primera hija, estaba viendo el maratón de Smallville y faltaban 5 minutos para el final. De repente rompí fuente y mi esposo me tuvo que insistir con que me tenía que ir a bañar para llevarme al hospital. ¡Yo solo pedía 5 minutos más! © Dórian Andrea Lola Ramos Marín / Facebook
  • En mi segundo parto natural, ya estaba ubicada en la camilla y le dije al médico que el bebé estaba por salir. Recuerdo que él estaba poniéndose los guantes y me dijo: “Puja tranquila, la enfermera está cerca”. Lo hice y el niño nació sin ayuda. Él, riendo, me dijo: “¡Madre mía! ¡Casi se cae al piso!”. ¡Yo me reí a carcajadas! Fue un parto precioso 💕. © Patricia Bazan / Facebook
  • Con mi esposo acordamos en cada embarazo que si tenía un varón, el nombre se lo ponía yo, y si era una nena, lo elegía él. Cuando estaba por dar a luz a mi tercer hijo, camino al hospital, todavía no había decidido qué nombre ponerle si era nena. Luego me hicieron entrar a la sala de preparto y él bajó al hall del hospital a esperar a que le avisaran que ya había nacido el bebé. En todos los años en que habíamos estado juntos, siempre había insistido en que jamás presenciaría un parto porque esas cosas le daban impresión. Pero cuando le pregunté a la doctora si mi marido podía estar presente en el momento del nacimiento, ella me dijo que sí. Entonces, cuando llegó el momento de entrar por fin a la sala de partos, la enfermera lo llamó por altavoz. El pobre ni siquiera tuvo el valor de protestar cuando le indicaron que se pusiera la gorra y el camisolín. Tuvo que presenciar el parto en contra de su voluntad. Pero en vez de ponerse a mi lado y darme la mano, se paró al lado de la doctora. Así que presenció el nacimiento de nuestro hijo de primera mano. Me escuchó quejarme, escuchó el grito que di en el momento en que salía la cabecita del bebé sin que se le moviera una pestaña, estaba petrificado. Tanto que en ningún momento se acordó de que llevaba colgando del hombro la videograbadora con la que podría haber aprovechado para inmortalizar tamaño acontecimiento. Estaba blanco como un papel, pensé que iba a desmayarse, pero resistió y pudo sostener al bebé y llevarlo a la sala de recuperación para vestirlo. Media hora más tarde, cuando por fin me sentaron en la silla de ruedas para llevarme a la habitación, me estaba esperando afuera de la sala de partos con el bebé en brazos. Me di cuenta de que él mismo se estaba aguantando las lágrimas. Fue un momento muy conmovedor y emotivo. Y lo único que se me ocurrió decirle fue que podía quedarse tranquilo, ya no era necesario que siguiera pensando en nombres de nena. © Cecilia Diaz de Vega / Facebook
  • Cuando tuve a mi segundo hijo, me hicieron cesárea porque pesó 5 kilos. No lo podían sacar, ¡se me iba más arriba y no bajaba! Así que el cardiólogo (un hombre muy buen mozo) puso sus nalgas literalmente en mi pecho para hacer que el bebé bajara. Recuerdo que mientras estaba así, encima de mí, lo miré y le dije: “¡Qué lindas nalgas que tiene, doctor!”. Todos se rieron 😂😂😂. © Analía Lopez / Facebook
  • Mientras tenía mi cesárea, dije: “Seguramente esto es lo que se siente ser abducido por extraterrestres, las luces, la gente, lo que llevan puesto...”. Después, apenas nació mi bebé, muy feliz agregué: “¡¡¡Tiene ojos!!!”. Había soñado que nacía sin ojos. Los doctores habrán pensado que yo era una mujer muy extraña. © tdixon5 / Reddit
  • Soy obstetra y ginecóloga, así que estuve hablando de trabajo durante todo mi parto. Mi esposo se reía, porque yo chismeaba con la doctora sobre otra doctora de la ciudad. Ella me dio una información tan jugosa que literalmente me detuve a mitad de un pujo, no podía creer lo que me estaba diciendo. © S_Wow_****y_Bang / Reddit
  • Me volví hacia mi esposo poco después de que mi bebé naciera y mientras me estaban cosiendo y le dije: “Estoy tan contenta de que no tenga dientes. Tuve una pesadilla en la que ella nacía con un set completo”. El estudiante de medicina empezó a reírse a carcajadas. © Parforparkour / Reddit
  • No recuerdo haberlo hecho, pero tan pronto como sentí que estaba naciendo mi bebé, aparentemente miré a mi mamá y dije: “Oye, ya no estoy embarazada”. Ella me contó esto más tarde y realmente me hizo reír. © Eucalipdis / Reddit
  • Trabajo en sanidad. Hace años, tuve una rotación y me tocó la unidad de partos, nunca olvidaré a esta paciente. Había declarado orgullosamente que quería un parto totalmente natural, como su madre y su abuela. El anestesiólogo le advirtió que solo tendría otra hora para cambiar de opinión sobre la epidural. “¡No hay problema, no la necesitaré!”, insistió con orgullo. Bueno, las cosas progresaron y se dio cuenta de que había cometido un gran error. A los 8 cm de dilatación, la escuché gritar: “¡Consígueme a ese maldito anestesiólogo AHORA!”. Fue en vano, ya que estaba en el quirófano 😂. Poco después dio a luz a una hermosa niña. Lo gracioso del cuerpo humano es que libera hormonas para ayudarte a olvidar. Al día siguiente, le dijimos tímidamente: “Noche dura ayer, ¿eh?”, a lo que ella respondió muy feliz: “Oh, estuvo muy bien, no tan malo como pensé que sería 😊”. Se había olvidado de todo por completo 😂. © labolarueda / Reddit

¿Tuviste un parto natural o por cesárea? ¿Cómo naciste tú?

Imagen de portada Analía Lopez / Facebook

Comentarios

Recibir notificaciones

Lecturas relacionadas