20+ Situaciones de vida que parecen haber sucedido gracias a un teléfono existencial descompuesto

Gente
hace 3 años

Cada uno es un universo entero que guarda tantos secretos en sí mismo que a veces ni siquiera nosotros podemos entendernos. Entonces, ¿qué pasa si dos de estos mundos chocan? Sucede que un diálogo entre las personas incluso más cercanas puede asemejarse a una comunicación entre habitantes de planetas ubicados en galaxias diferentes.

En Genial.guru nos encanta espiar a los usuarios de la red. El tema de la selección de hoy es la complejidad de la comunicación interhumana.

  • Hoy pasé por trabajo por uno de los centros comerciales de la ciudad. Cuando me iba, escuché una conversación entre el guardia (G) y una joven (J):
    J: ¿Puedes decirme dónde está X tienda? Me dijeron que debería estar en este edificio.
    G: ¿Qué clase de tienda? ¿Qué venden ahí?
    J: Bueno, es una beauty shop, venden barber accesorios.
    G: No, aquí no venden muñecas. Tienes la dirección incorrecta.
    J: ¿Qué tienen que ver las muñecas? Necesito una beauty shop, con barber accesorios.
    El guardia, agitando las manos: No, te digo que aquí no se venden ni muñecas ni Barbies. Tienes la dirección incorrecta.
    La joven parecía de 20 años, el guardia se veía de unos 70. © ktoTOneJA / Pikabu

  • Fue en el primer año de la universidad. Mi compañera de clase tenía problemas con Informática y decidí ayudarla a mejorar en esta difícil asignatura. Le pregunté si tenía una computadora en casa. Ella respondió que hacía poco se había roto. Bueno, sin pensarlo dos veces, le ofrecí ir a mi casa, ya que mi computadora funcionaba bien, y ayudarla allí. Ella accedió, aunque se veía avergonzada (en ese momento no entendí por qué). Bueno, fuimos, empecé a explicarle todo, ella no entendía, yo me enojaba. Al final, se lo expliqué hasta que pareció haber entendido. Luego la acompañé a su casa (parecía decepcionada, pero lo atribuí a la fatiga), y me fui a la cama con la consciencia tranquila. Y recién estaba acostado y pensaba en lo lento que yo era en ese entonces. © Gagil / Pikabu

  • Una amiga dejó en la lista de mejores amigos en Instagram a un solo chico que le gustaba y publicó en su historia: “Estoy enferma, si tan solo alguien viniera a verme”. Y al día siguiente, olvidó cambiar la lista y publicó para sus amigas la historia: “No entiendo de nuevo”. El chico no lo entendió ni siquiera después de eso. © treschenko24 / Twitter

  • Es la historia de un conocido: “Era el cumpleaños de un amigo. Estábamos sentados, conversando. Y él se había casado hacía poco. La esposa era joven, la diferencia de edad era muy grande. Estaba contándole cómo en el primer grado iba a la escuela con una maleta de cuero en lugar de una mochila y cómo todos me envidiaban. La nueva esposa se metió en la conversación:
    -Yo también tuve una tableta genial en la escuela, el primer iPad. ¿De qué modelo era la tuya?
    -Ya no las hacen -respondí. Y pensé para mis adentros: “Qué raro cuando él tiene todas las fotos de la escuela en blanco y negro, y las de ella son digitales”. © certero / Pikabu

  • Una noche estaba preparándome para un examen en la casa de una amiga. Internet fallaba constantemente y su contraseña de wifi era muy larga, así que la escribí con un marcador en mi brazo. Al día siguiente, en mi examen de ciencias, capté la mirada sospechosa del profesor. Después de aprobar el examen, me arremangué para hacerle saber al maestro que no tenía anotaciones para copiarme, pero vi en mi brazo la inscripción hecha el día anterior con el marcador negro. Afortunadamente sonó el timbre. Me acerqué a un amigo y comencé a contarle lo que tenía escrito en mi brazo. Hablé en voz alta para que el profesor me escuchara. Creo que logré mi objetivo, porque no desaprobé el examen. © michaela_danielle / Reddit

  • Llevé mi teléfono a reparación. El lugar quedaba a 20 metros de mi casa. El reparador me conocía personalmente.
    “Lo necesito con urgencia”, dije. “No tengo un teléfono de repuesto”. Después de un par de horas fui a buscarlo, todo estaba bien, lo habían reparado perfectamente. Estaba pagando el servicio cuando el reparador dijo: “¿Por qué no viniste antes? ¿No tenías prisa? Tú mismo dijiste que era urgente...”.
    Encendí el teléfono y vi tres llamadas y cuatro mensajes de WhatsApp del reparador que decían que el celular ya estaba listo. © Koteggg / Pikabu

  • El otro día necesitaba un juguete pequeño, así que me metí en la caja de juguetes de mi hijo para realizar una auditoría. Entre todas las demás figuras, saqué también la del Alien y la puse sobre la mesa. Por la noche, mi pequeño hijo estaba sentado a la mesa con las figuras nuevas/viejas (una de las cuales era el Alien), y yo simplemente pasaba por ahí. Él me dijo: “Papá, ¡mira el monstruo que encontré!”. Mientras caminaba, lancé: “¡Es Alien!”. La sonrisa de mi hijo desapareció, sus ojos me miraron sin comprender. Pensé que no me había escuchado y repetí, señalando la figura: “¡Es Alien!”. El resentimiento y la tristeza se añadieron al malentendido en el rostro de mi hijo, quien, inseguro, llevó la mano con la figura del Alien hacia el borde de la mesa para apartarla. Sus ojos ya estaban llenos de lágrimas, y me miraba a punto de romper a llorar. Yo lo miraba y no entendía qué había dicho para provocar tal estado. Una fracción de segundo después, me di cuenta... Le dije a mi hijo: “¡No es de alguien! Se llama así: Alien. ¡Hay una película con ese nombre!”. © Eqiulibr / Pikabu

  • Me di cuenta de que mi esposo no me escuchaba o me escuchaba, pero no de una manera normal, sino como si pasara el flujo de información que provenía de mí a través de un “tamiz” interno. Yo llevaba media hora hablando en detalle sobre el diálogo que había mantenido con mi jefe esa mañana. Luego de la última frase emotiva, mi esposo me miró desconcertado y dijo: “No entiendo, ¿quién es Noe?”. Noe Suntonto, en serio, ¿quién puede ser? © Unknown / Ideer.ru

  • Soy de los Estados Unidos, estoy estudiando en los Países Bajos, y aquí me hice amiga de otra chica estadounidense. Ella está saliendo con un británico. Para su cumpleaños, nuestros amigos europeos querían organizar para ella una fiesta temática estadounidense muy especial. Intentaron pensar en cosas supernorteamericanas para usar como tema y se decidieron por nuestra tendencia a llamar al 911 cuando nos sentimos amenazados o en peligro. La lógica era la siguiente: después de todo, ella envejeció, y nuestros compatriotas ancianos llamaban al 911 cuando se lesionaban. Cuando llegó mi amiga, le vendaron los ojos y la llevaron a una habitación. Le quitaron la venda y vio un pastel con una bandera estadounidense que decía “911” y tenía bengalas alrededor. Imagínate su desconcierto en ese momento. © jra312 / Reddit

  • Ayer llevé el arnés de mi perro para que lo repararan: se había roto el clip del broche. Compré uno nuevo. Fui a la tienda de reparación de calzado y marroquinería. Le dije al dueño: “Tengo una pregunta poco estándar. Aquí se necesita este grosor de las capas del cinturón. ¿Puede descoserlo, reemplazar el clip y volver a coserlo?”. Él lo estuvo consultando con una costurera durante mucho tiempo. Al final, aceptó. Me entregó un papel con la orden, me dijo la cantidad que debía pagar. Pagué, tiré el papel en mi billetera y me fui. A las 6 p. m. regresé por el arnés. El dueño no estaba. Me quedé allí y esperé unos 10 minutos. Recordé que tenía que mostrar el papel. Mientras esperaba al dueño, empecé a examinar la nota y casi me desmayé de la risa (me reí a carcajadas para mis adentros, con dificultad para contenerme y estallar en risa a viva voz): ¡¡¡"Bragas de red“!!! El dueño regresó junto con la costurera. Al verme, cambió su expresión a una muy seria. Con una carcajada, le dije que acababa de ver que el papel con la orden decía “Bragas de red”, ¡y era un arnés para un perro, para un bulldog francés! El dueño sonrió.
    Pero lo que terminó de desmayarme fue la frase de la costurera:
    -Pues te dije que no eran bragas, sino algo para perros, ¡y había pelo de animal dentro! © OggySeyy / Pikabu

“Bragas de red”.

  • Vivo en Lima. Fui a la oficina de correos © porque mi paquete se había perdido.
    Yo: No puedo rastrear un paquete.
    C: ¿Desde qué ciudad se envió?
    Yo: Desde Lima.
    C: Comuníquese con el centro de soporte, no tenemos sucursales en esa ciudad.
    Yo: ¿Y dónde estamos ahora?
    C: ...
    C: UN SEGUNDO. © Wizard_Severus / Twitter

  • Hace unos 2 años me rompí el codo y anduve con un yeso blando durante un par de meses. Inmediatamente después de que me lo quitaran, el médico entró en la pequeña sala de examen y me tendió el brazo. Y le pregunté si quería abrazarme. Resultó que solo quería ver cómo se había curado la articulación del codo. No quería abrazarme. :-( © JadeElizabeth / Reddit

  • Un colega estaba aprendiendo inglés y quería hacerle un cumplido a una mujer hermosa con una gran figura. ¿Y sabes qué palabra de su limitado vocabulario se le ocurrió usar? ¡Lumpy! (“grumosa”). Ella no estaba muy contenta con ese “cumplido”, por decirlo suavemente. Con lágrimas de risa en mis ojos, tuve que explicarle que la palabra “grumosa” nunca debería usarse como un halago para una dama. © ChunkyPee / Reddit

  • Un amigo trabaja para una empresa que tendría una reunión en Portland. El empleador quería que él fuera. Mi amigo recibió una tarjeta de crédito de la compañía para pagar el vuelo, la comida y el hotel. Llegó a Portland, llamó a sus colegas y les preguntó dónde se encontrarían en el aeropuerto. Resultó que estaban esperándolo en Portland, Maine. Y él estaba en Portland, Oregón. © Unknown author / Reddit

  • La semana pasada tuve que ir al departamento de registro de la policía de tránsito. Delante de mí, en la fila, había un hombre que había ido allí para cambiar su licencia de conducir. Un capitán, oficial de la policía de tránsito, que realizaba la recepción, estaba completando y aclarando los datos de los visitantes. Entonces, escuché su conversación:
    -¿Su teléfono termina en 75?
    -No. Termina en 475.
    Hubo una breve pausa, el capitán se quedó congelado por un segundo y luego dijo:
    -Entonces dígame el número de teléfono completo. Hay un error aquí. SergeyVF / Pikabu

  • Hoy estaba yendo a trabajar, sin molestar a nadie, absorto en mis pensamientos. Una señorita venía caminando en la dirección opuesta. Parecía estar buscando algo. Me detuvo:
    -Disculpa, ¿cómo llego a la calle X?
    -No conozco esa calle, pero ahora miraré el mapa en mi teléfono inteligente y descubriremos dónde está.
    -Revisar el mapa en el teléfono inteligente es algo que puedo hacer yo misma.
    Y siguió caminando... ¿Qué fue eso? OSSOOSSO / Pikabu

  • Fuimos con un amigo a comprar un shawarma, empezamos a hablar y al final me distraje y me fui sin pagar. En casa me di cuenta, volví corriendo, me disculpé, le di al vendedor dinero y le pregunté qué había pensado de mí durante todo ese tiempo. Él respondió: “Pensé que lo tomaste como un hermano y te fuiste”. Llevo media hora con lágrimas en los ojos. CKachmazov / Twitter

  • Un conocido trabaja en una universidad de medicina. Si los estudiantes se saltan sus clases, les da una tarea individual que consta de dos partes: una es un tema quirúrgico habitual. La otra es una situación de cualquiera de las temporadas de Dr. House, y hasta ahora NINGÚN ALUMNO SE HA DADO CUENTA. © Wizard_Severus / Twitter

  • Estaba en un autobús. Viajaba sin molestar a nadie. Mientras revisaba mi teléfono inteligente, escuchaba bandas de metal extranjeras con unos audífonos y veía noticias sobre la alta tecnología. Tenía puesta una gorra de béisbol, y encima una capucha de una sudadera (hacía frío). Y entonces, en una parada subió una señora de unos 50 o 55 años. Aparentemente no estaba de buen humor, porque, empujándome en el hombro, me preguntó a viva voz: “¡Oye! ¿No quieres cederle el asiento a una mujer?”. El empujón en el hombro y el “oye” por alguna razón me confundieron un poco. Me eché la capucha hacia atrás, me quité la gorra de béisbol, saqué los auriculares de mi smartphone y, al son de la música de Metallica, pregunté: “¿Qué pasa, hija, estás cansada?”. No entendí por qué ella de repente se fue silenciosamente al final del transporte, donde ocupó uno de los asientos vacíos. ¿Tal vez la confundió mi teléfono inteligente, el cual mis nietos adultos me regalaron para mi cumpleaños? © HolderN / Pikabu

¿Has vivido situaciones en las que tú o alguien más tuvo un malentendido con otra persona? Comparte tus historias con nosotros.

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