5 Buenas acciones que pueden convertir tu vida en un infierno
Cada uno de nosotros, al menos una vez en su vida, ha hecho una buena acción, y a cambio recibió algo que es difícil de describir sin usar malas palabras. Hemos analizado las historias de algunos usuarios de Internet acerca de cómo terminaron sus buenas intenciones, e identificamos 5 tipos de gestos agradables, de los cuales la gente a menudo se arrepiente.
Genial.guru te contará qué tipo de cosas buenas se deben hacer con gran cuidado, para que la expresión “El infierno está lleno de buenas intenciones” no cobre sentido en tu vida.
Entregar tus cosas de forma gratuita
De ninguna manera estamos diciendo que tienes que convertir tu casa en un almacén de cosas inútiles y no ayudar a los que realmente lo necesitan. Pero incluso así, al publicar avisos sobre la donación de artículos, corres el riesgo de experimentar una avalancha de reclamos y quejas inadecuados.
Por ejemplo, un hombre publicó en Internet un anuncio en el cual donaba un enorme acuario. Lo único que pidió a cambio fue que la persona que lo quisiera lo retirara por su cuenta, ya que después de una lesión en la espalda no podía levantar cosas pesadas. A pesar de eso, algunos sujetos querían que él transportara dicho objeto hasta su ciudad, mientras que otros demandaban que además les regalara los peces.
El hombre estaba tratando de ser amable, pero al final, su paciencia se agotó, y decidió vender el acuario por una cantidad mínima de dinero. Inmediatamente apareció un comprador: un padre quería regalárselo a su hija. Fue a retirarlo a la casa del dueño, y después de un par de semanas envió fotos del artículo repleto de peces.
Como se puede ver en esta historia, es más seguro no donar cosas en Internet, sino ponerlas a la venta, aunque sea por un precio simbólico. Sin embargo, también así puedes tener problemas: a algunas personas les gusta negociar, enfatizando su difícil situación, lo que no siempre es cierto.
Hay otras opciones: llevar la cosa que no necesitas a una organización de caridad, o si las leyes y reglamentos de tu país lo permiten, simplemente dejarla en la calle cerca de tu casa, donde la pueda recoger cualquier persona. Por ejemplo, en algunos lugares, eso se hace con los muebles.
Amar a las personas que no están preparadas para una relación seria
Las personas que dicen no estar preparadas para iniciar una relación seria, no mienten: simplemente evitan especificar que no están preparadas para armar una pareja contigo. Tal vez hayas notado que después de una ruptura, ese sujeto que te decía no quería formar una familia, encuentra esposa o marido muy rápidamente.
Un amor desinteresado es perfecto, pero solo si es recíproco. No pierdas tu tiempo y energía en tratar de hacer felices a los que están a tu lado solo por conveniencia, esperando que aparezca una mejor opción. Aunque suene muy doloroso, es inútil tratar de convertirse en un ideal para tu pareja y esperar hasta que se enamore de ti.
Nunca le supliques a nadie que arme una relación seria contigo. Si la persona te ama, entonces no tendrá problemas para hacerlo. Recuerda que mereces mucho más que un "probablemente".
Ayudar a las personas que no quieren ser ayudadas
Desafortunadamente, muchas personas enfrentan situaciones muy tristes cuando sus seres queridos están en problemas pero se niegan categóricamente a admitirlo, incluso si eso destruye su vida. ¿Qué deberías hacer en ese caso? Está claro que nadie quiere dejar a sus parientes y amigos a su suerte, pero tienes que entender que tus esfuerzos pueden ser desperdiciados.
No importa cuánto intentes ayudar a alguien, sea cual sea el método que utilices, si ese sujeto no quiere tu ayuda, estás perdiendo el tiempo. Es difícil aceptarlo, especialmente si deseas sacar a alguien de una mala situación, pero al final, todo lo que puedes hacer es esperar que ese ser querido lo piense mejor y acepte tu ayuda antes de que sea demasiado tarde.
Prestar dinero a quienes están acostumbrados a vivir a costa de otros
Si una persona se encuentra en una situación realmente desesperada, hay que ayudarla. Pero hay una categoría de gente que siempre está en problemas, y no se desesperan por resolverlos, esperando la ayuda de amigos y parientes. Si prestas dinero a estos sujetos, asumes el riesgo de no recuperarlo.
Es muy simple reconocer a estas personas: intenta demandar que te devuelva lo prestado, y seguramente serás odiado. Además, intentarán presentarte frente a conocidos comunes como un monstruo cruel y desalmado. Por lo tanto, si te piden un poco de efectivo prestado, es mejor entregar solo un monto, cuya pérdida podrías aceptar.
Querer complacer a todos
En el deseo de agradar a los demás, o de ser mejores por el bien de un ser querido, no hay nada malo. Pero, como pudimos investigar, te puedes arrepentir de eso. Primero, es simplemente imposible complacer absolutamente a todos en todo. Y en segundo lugar, en un esfuerzo por adaptarte al otro, corres el riesgo de perderte.
La alarma tiene que sonar si alguien insistentemente te exige que cambies tu comportamiento, estilo de vida, o apariencia. Lo más probable es que estés tratando con un manipulador que, en caso de desobediencia, te hará quedar como un egoísta (sin embargo, no estará satisfecho, incluso si te conviertes en un "ideal" para él). No hay que hacer caso a estas personas, porque preocuparse por uno mismo no es una señal de esa conducta.
Si no muestras un poco de egoísmo saludable en lo que respecta a tu tiempo, salud, metas en la vida y pasatiempos, al final no tendrás nada que ofrecer a la gente. Cuando tienes una autoestima saludable y no permites que los demás se pasen contigo, puedes mantener una relación armoniosa con ellos. El egoísmo real es cuando intentas dominar a los otros para lograr tus objetivos.