5 Frases que el hombre teme oír de su mujer
Seguramente, son muchos los que estarán de acuerdo en que oír palabras inundadas de rudeza por parte de un ser querido es lo peor que te puede pasar en una relación. Llegan directamente a lo más hondo del alma y vivir algo así es más difícil de digerir que una conversación desagradable con un superior. Alguien piensa que los hombres están tallados en piedra, no puedes ofenderlos por nada, pero, a pesar de esta creencia popular, son sensibles y reaccionan de manera muy aguda ante determinadas expresiones bruscas.
Genial.guru realizó una pequeña encuesta y descubrió qué frases de la pareja son las que más hieren y molestan a los hombres.
1. “Debes ayudar a mi madre”
A nadie le gusta cuando los padres se meten en los asuntos de pareja. Pero es aún peor cuando a la relación se añaden obligaciones en forma de ultimátum. No vale la pena pisar el acelerador, la solución se puede encontrar a través de una manera ya comprobada: el diálogo. Además, un hombre atento siempre ofrece su ayuda por cuenta propia.
Si te pasas, la mayoría de los hombres percibirán esto como una actitud irrespetuosa y de abuso. Todo esto puede desembocar en una discusión, después de la cual ambas partes lamentarán aquello que se han dicho. No en vano, si te ves obligado a portarte de esta manera, quizás deberías reflexionar: ¿es la persona adecuada?
2. “Sin ti, antes lo hacía de alguna manera”
A aquellos que cuentan siempre solo con ellos mismos, les resulta difícil acostumbrarse a la aparición en sus vidas de un hombre que muestra atención y cuidado. Alguien dirá que no vale la pena ni tan siquiera acostumbrarse a eso. Pero todos queremos que nos cuiden, aunque no se reconozca en voz alta. Y si tienes miedo de mostrarte débil, esto puede desencadenar en conflictos.
Es importante que los hombres se sientan útiles. Cuando él, por ejemplo, se ofrece para llevar tu bolsa pesada, eso no significa en absoluto que parezcas una persona débil ante sus ojos. Deja que sea un buen hombre, simplemente lo que quiere es ser amable. Y, en ocasiones, sentirse tu héroe.
3. “¿Tal vez tus amigos también te sirvan el desayuno en la cama?”
Son infinitas las razones por las que surge esta pregunta: “¿Quién te importa más: tus amigos o yo?” Por ejemplo, cuando un hombre trata intencionadamente de pasar el menor tiempo posible contigo. Por supuesto, la razón puede responder a una cuestión de prioridades. Por ejemplo, quedaron en ir al cine, pero en el último momento, él canceló todo para divertirse con sus amigos. En este caso, es obvio que no eres lo más importante.
Pero si el hecho es que no tienes nada que hacer mientras él no está, o, peor aún, no confías en él, esto no es un buen augurio. Un hombre quiere que no seas solo su pareja, sino también su amiga. Y este tipo de preguntas no revelan amistad entre ambos.
4. “Esta camisa no te la quitas ni para dormir”
Los hombres no saben llevar prendas incómodas, solo con el fin de verse bien. No saben y ya está. Si no te gusta la imagen de tu pareja, puedes hablar con él de manera suave, pero no categórica. Aún así, lo principal que debes apreciar en tu media naranja es lo que se encuentra debajo de la camisa que tanto te molesta. Sí, eso: su alma.
Si el vestuario de tu pareja no cuenta con prendas decentes para asistir a un evento festivo, regaláselas. Y esa noche, cuando luces un hermoso vestido de salir, él no podrá rechazar tu petición de ponerse el pantalón y la camisa que le habías regalado.
5. “Él lo hacía todo solo, sin pedir ayuda”
Un buen hombre nunca te comparará con sus exparejas. Eres para él única e irrepetible. Por eso espera lo mismo de su media naranja. No quiere saber nada de cuánto de habilidoso era Juan o de lo inútil que era Julián.
Este tipo de conversaciones pueden enojar incluso al hombre más tranquilo y paciente.
¿Has vivido situaciones similares en tu relación? Cuéntanos cómo te las arreglaste con ellas.