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La ropa puede ser nuestro mejor aliado para mostrar al mundo quiénes somos, destacar lo que nos gusta de nosotros o sentirnos como deseamos al vernos al espejo. Los colores son parte de este modo de presentarnos ante nosotros mismos y frente a los demás, por lo que podemos usarlos como un truco para lucir más jóvenes. Sin embargo, también es posible que nos hagan aparentar más años de los que tenemos.
En Genial.guru recopilamos algunos ejemplos de cómo un color puede hacer un cambio en cómo nos vemos.
El negro es un color clásico que siempre estará de moda; sin embargo, si se usa de pies a cabeza, puede hacer que nos veamos mayores de lo que somos, esto debido a que suele realzar las líneas del rostro y las ojeras. Por ello, una opción es optar por un color rosa brillante en vez de uno oscuro, ya que este tipo de tonos hará que nuestra piel luzca más vibrante.
Los colores oscuros pueden quitar vitalidad a la tez y acentuar imperfecciones, por lo que en lugar de un tono morado oscuro, podríamos elegir un azul turquesa, el cual resalta el brillo de distintos tonos de piel.
El negro más oscuro y nítido puede no sentar siempre bien, sobre todo a las pieles de colores más suaves, por lo que una alternativa para poder seguir vistiendo algo similar al look totalmente negro es optar por un color como el azul marino.
Es posible que este tipo de morado, sobre todo cerca del rostro, dé una apariencia sombría, enfermiza, y haga que aparentemos más años. Una opción similar pero más vibrante es cambiarlo por un rojo violáceo, que es llamativo y profundo.
El verde oliva, musgo o similares también pueden ocasionar que algunas líneas de expresión o imperfecciones resalten, por lo que una recomendación es elegir algún color más suave. Recomendamos un rosa claro; este suele ser relacionado con la juventud, por lo que al portarlo, además de darle luz a la piel, también puede hacernos pensar en alguien joven.
El gris puede ser tu mejor amigo a la hora de aparentar menor edad, o tu peor enemigo, pues hay algunos tonos que se consideran adecuados para jugar a tu favor. Sin embargo, hay que ser cuidadosos con la combinación, por lo que, si no estás segura, podría resultar mejor optar por un blanco puro, considerado el color de la pureza, la inocencia y, por supuesto, la juventud.
Aunque el cómo se vean los colores fríos depende, en muchos casos, de cada persona, una forma fácil de no equivocarse para verse más joven y evitar lo contrario es elegir tonos brillantes y atrevidos, como el rojo profundo, que hará que luzcamos llenas de vida.
El café oscuro puede agregar años si se lleva un atuendo completo en este tono. Por el contrario, el coral, debido a que se trata de un color alegre, vibrante, lleno de energía y, al mismo tiempo, suave o sofisticado, podría aportar a vernos más jóvenes, incluso usándolo de pies a cabeza.
Si te encantan los colores oscuros, como el negro, evita usarlos muy cerca del rostro, pues los efectos que tienen al ponerse en esa zona acentúan ciertos rasgos que pueden aparentar mayor edad. Es recomendable optar por un cuello en “v” en lugar de cuellos altos en esta tonalidad.
¿Qué color consideras puede hacerte parecer de mayor o menor edad? Compártenos tus consejos en los comentarios.