¿Cuántas cámaras ocultas te vigilan ahora mismo?

¿Alguna vez has tenido la sensación de que te vigilan? Bueno, es fácil instalar cámaras ocultas por todas partes, pero no es tan sencillo encontrarlas. En un lugar lleno de gente podría haber cámaras apuntando en todas direcciones. Veamos quién te está vigilando ahora mismo.

Estás caminando, listo para cruzar la calle y reunirte con tu amigo para tomar una taza de café. ¿Cuántas cámaras te observan? Empecemos a contar. Para empezar, las cámaras de la calle vigilan a todo el mundo, especialmente cerca de los edificios. La señal se pone en verde y cruzas. Pasas por un cajero automático para retirar algo de dinero y te encuentras con tu amigo, que está sentado junto al mostrador. Es posible que no hayas visto la cámara que hay justo encima del semáforo para atrapar a quien cruce de manera indebida. Después, el cajero automático tiene la suya junto con otras dos en la parte superior, cerca de la entrada del banco. Luego tienes la que está fuera de la cafetería y al menos dos adentro, que vigilan el mostrador. ¿Cuántas cámaras contaste?

Llevas el carro al estacionamiento subterráneo y entras al centro comercial para comprarle un regalo a tu amigo. ¿Cuántas cámaras crees que hay aquí? En primer lugar, las que te apuntan desde arriba. Después de manejar, te estacionas para conseguir un pase de entrada, y tienes una cámara en la parte inferior apuntando a tu número de matrícula por si pasa algo. Hay docenas de cámaras en cada planta. Por último, estacionas el auto y te metes en el elevador para llegar a tu destino. Aquí no hay sorpresa: la cámara del ascensor. Caminas por el centro comercial y ves otras más encima de las tiendas. Entras en un negocio y ves al menos tres cámaras. Y no olvidemos a la pareja que se toma selfis.

Ahora, miremos en tu bolsillo. ¡Ajá! Llevas una cámara contigo todo el tiempo. Sabemos que podemos sacar una foto genial o grabar un video cuando queramos. Sin embargo, alguien podría acceder a tu teléfono de manera remota, sin permiso. Si lo consiguen, podrán hacer casi todo lo que quieran con tu teléfono, incluso prender la cámara y revisar la galería. No te preocupes. Este tipo de cosas solo les ocurren a personas de muy alto perfil que se consideran objetivos. Si consiguen tu número, lo único que tienen que hacer es una llamada equivocada y ya están adentro. Además de acceder a tu cámara y a tu galería, podrían ver tus contactos, tus cuentas y contraseñas y leer todos tus mensajes, aunque estén cifrados.

El cifrado es la forma de codificar los textos para que nadie pueda saber cuál es el mensaje original. La mayoría de las aplicaciones de chat cuentan con el llamado cifrado de extremo a extremo, que permite que un mensaje vaya desde el emisor y llegue al receptor como texto sin formato. Por el camino, el mensaje no puede ser visto ni por la empresa de la aplicación de mensajería ni por tu proveedor de servicios de Internet. Si una de estas aplicaciones espía ingresa a tu teléfono, puede ver tus mensajes tal como los estarías viendo tú. No interfiere con el tráfico, sino que solo lo observa. Capta lo que escribes en el teclado, lo que significa que conoce todas las contraseñas que escribes en tu teléfono. Correr este tipo de aplicaciones puede costar millones de dólares, así que solo las pueden usar unos pocos. Son prácticamente inaccesibles para casi todo el mundo.

Estás en el patio delantero de tu casa. Desde el umbral hasta el árbol cercano al basurero, hay montones de lugares para instalar una cámara oculta. He aquí un recorrido rápido: la puerta principal. La silla del porche. Encima de la casa del perro. ¿Quién es un buen chico? La copa del árbol. La pequeña roca junto a la entrada de tu casa. Dentro del gnomo de jardín y en el techo de tu porche. Estás manejando por el campo en un largo tramo de vegetación. No hay nadie a tu alrededor. Decides parar junto a un acantilado y disfrutar de la puesta de sol antes de que oscurezca demasiado. No hay nadie a la vista. Te alegras de saber que ninguna cámara te observa, excepto una. ¿Adivinas dónde está? No, no está en tu coche. Es invisible. Bueno, no, de hecho, está en el cielo: los satélites. Hay algunos que captan imágenes de todos los rincones de la Tierra. No pueden captar los detalles de tu carro, pero están observando. Siempre observando...

Te han invitado a la casa de tu vecino. ¿Qué tiene de rara esta habitación? Sé que hiciste una pausa para verla más de cerca, pero la respuesta es: nada. No hay nada fuera de lugar ni que indique que hay cámaras ocultas estratégicamente colocadas. Pero hagamos zoom por un momento. Más cerca. Sí, eso es solo una pared. Pero ese pequeño agujero negro que parece suciedad es en realidad una lente. Estas cámaras se insertan con un taladro en las paredes y no están colocadas a la altura de los ojos.

Vuelve a hacer zoom en esta pared. Hay muchos elementos alrededor, como un librero, un reloj de pared y una lámpara. Puede que tú los veas como objetos cotidianos. Pero otros los verán como una oportunidad para colocar algunas cámaras ocultas. En una biblioteca, se puede encontrar fácilmente una posición perfecta para colocar la cámara, ya que es uno de los lugares más desordenados de la pared. Hay algunos libros huecos a la venta en los que uno puede meter la cámara y hacer un agujero para el objetivo. Y pum, no se sabrá ni se sospechará nada.

Algunos cuadros pueden albergar una cámara oculta, especialmente si es lo suficientemente voluminosa. Puedes sospechar que hay una cámara sobre todo si se trata de un cuadro barato. Se puede camuflar con facilidad el objetivo y colocarlo estratégicamente. Es sencillo colocar una cámara oculta en los relojes de pared. De hecho, cualquier reloj es lo suficientemente bueno como para esconder un dispositivo. Requiere algo de trabajo, pero se puede hacer. Lo más fácil es que no es necesario taladrar nada. Y lo mismo ocurre con otros tipos de relojes como los despertadores y los relojes digitales.

Ahora, veamos esta sala de estar. A primera vista, parece acogedora, pero al menos 5 cámaras ocultas están colocadas en ciertos puntos. ¿Por qué habría una caja de pañuelos sobre una mesa de café? O sea, es conveniente, pero mira cómo está ubicada. La desventaja es que alguien podría meter la mano y arruinar la cámara. Esta maceta en la esquina está completamente sola por una razón. Detrás de las gruesas hojas, hay una cámara con un gran angular excelente para captar toda la habitación. La cámara número 3 está junto al soporte de la tele. Presta atención al logotipo. Está disimulado por la luz roja que muestra cuando tu televisor está encendido. La cámara número 4 está dentro del perchero. Durante el verano, nadie tendrá que colgar nada allí, así que podemos colocar una cámara en el lugar menos obvio de la habitación. La última está justo delante de ti: la puerta principal. La mayoría de las cámaras miran hacia fuera para ver quién viene. En este caso, tenemos una cámara que apunta en ambas direcciones.

Estas cámaras capturan imágenes en tiempo real que pueden verse en cualquier teléfono inteligente o tableta. Y lo más loco es que puedes ver lo que transmiten casi desde cualquier parte del mundo. No tienes que estar en el mismo país para ver las imágenes provenientes de tu casa. Algunas de estas cámaras son tan sofisticadas que no graban si nada se mueve. En otras palabras, son detectores de movimiento. Esta tecnología no es nueva, pero el hecho de que exista es bastante impactante. Si alguna vez descubres que una cámara oculta te está filmando, puede que ya sea demasiado tarde para hacer algo. En la mayoría de los casos, las cámaras retransmiten la grabación en directo, lo que significa que no puedes hacer nada al respecto. La información no se guarda para ser recuperada más tarde, sino que se transmite en vivo para quién sabe cuántas personas.