Descubrí la peor versión de mi novio cuando nos mudamos juntos, ¿debería terminar la relación?

Al principio, todo parecía adorable: su torpeza, su despiste, su forma atolondrada de demostrar amor. Pero ahora que viven juntos, lo que antes era tierno se ha transformado en una carga. ¿Qué pasa cuando el amor no basta para equilibrar una convivencia que se vuelve agotadora? Esta es la historia de una usuaria de Reddit que se enfrenta justo a ese dilema, poniendo diariamente a prueba su paciencia.

Todo era maravilloso en un principio

“Mi novio y yo llevamos 4 años juntos. Al principio me enamoré de él porque vi que era una buena persona, honesto y que le gusta ayudar a los demás. Conforme fui conociéndolo me di cuenta de que era torpe, patoso y despistado. En esos momentos pensé que era lindo porque veía que él intentaba hacer las cosas bien, solamente que no lo conseguía. No me importaba echarle una mano y si hacía las cosas mal no me molestaba porque pensaba que al menos lo había intentado.

Hasta hace unos meses, vivíamos separados. Él vivía con sus padres y yo en un piso de estudiantes alquilado. Cuando terminé en la universidad, decidimos ir a vivir juntos. Él trabaja desde hace ya bastantes años y tiene un sueldo estable. Yo encontré mi primer empleo (50% teletrabajo) alrededor de la zona donde él trabaja. Después de un tiempo en la empresa vi que era estable y entonces empezamos a buscar alquileres con opción a compra en una zona cercana al trabajo de ambos. Al final nos mudamos y ahora llevamos 3 meses viviendo juntos”.

Del encanto a la frustración

“Aquí viene el problema. Lo que hasta hace poco me parecía un rasgo lindo de él, ahora no lo soporto. Lo tengo que hacer todo yo (cocinar, limpiar, lavar la ropa, planchar, hacer la compra...) porque él no lo hace bien. Se ofrece a hacerlo y lo intenta, pero al final acabo diciéndole que por favor deje que lo haga yo porque si no, luego tengo que hacer el doble de trabajo: arreglar el estropicio y a continuación empezar a hacerlo de nuevo. Al principio lo llevaba bien, pero últimamente cada vez lo soporto menos. Estoy de mal humor y le hablo mal porque estoy molesta con él. Después reflexiono y entiendo que él no tiene mala intención y le pido perdón por cómo lo trato, pero al día siguiente ocurre lo mismo de nuevo.

La semana pasada estuve indispuesta y tuve que quedarme en la cama todo el día (sufro de vértigos puntualmente, no de forma recurrente, pero alguna que otra vez), así que él me dijo que no me preocupara, que él se encargaba de todo. A lo largo del día no sé cómo hizo para derramar un cubo con agua mientras fregaba el suelo, tropezarse mientras traía la colada y que cayera toda la ropa al suelo, derramar el cubo de basura (el orgánico) y romper un cuenco mientras lo fregaba. Todo en menos de 18 horas.

Tuve que levantarme varias veces, mareada, a ayudarle a limpiar la cocina, a recoger la ropa del tendedero porque aún quedaba más de la que se le había caído y a fregar los platos porque si lo dejo a él hacerlo nos quedamos sin vajilla en menos de una semana”.

Cuando el amor no es suficiente

“No puedo enfadarme con él porque su intención es buena, se ve que lo intenta. Pero siempre hay algún percance. Al final se disculpa por ser tan torpe y me promete que intentará hacerlo mejor, pero vuelve a hacerlo igual. Ya le he dicho varias veces que intente prestar más atención y tener más cuidado, y me jura que lo hará, pero nada cambia.

Yo lo quiero mucho. Se preocupa mucho por mí. Es una persona leal y honesta, que sabe escuchar y tiene unos valores morales similares a los míos. Sin embargo, esta situación cada vez me tiene más angustiada. No es capaz de hacer nada por sí mismo. En su trabajo es excelente y puedo confiar en que no me engañará nunca. Pero las tareas cotidianas son sencillamente imposibles para él”.

¿Es factible un futuro con él?

“En un futuro me gustaría formar una familia y tener un hijo, ¿pero cómo voy a estar tranquila? Si yo no estoy, ¿cómo puedo confiar en que él cuidará bien de nuestro hijo? Si cuando me pongo enferma no es capaz de ocuparse de la casa por solo un día...

No quiero dejarlo porque lo quiero muchísimo. Pero se me hace cuesta arriba tan solo al imaginar que si me quedo con él esto es lo que me espera para el resto de mi vida.

He llegado a la conclusión de que la mejor solución es simplemente enseñarle y ayudarlo, porque él tiene ganas de aprender. También voy a intentar ser más flexible y comprensiva, nos va a venir bien tanto a él como a mí”.

Las reacciones: ¿qué le recomiendan las demás personas?

Las respuestas de la gente no se hicieron esperar y estas son algunas sus recomendaciones:

• “Mi consejo, si de verdad quieres que aprenda, déjalo equivocarse. No hagas las cosas por él, aunque a ti no te guste como ‘terminan las cosas’ por qué en primera le quitas la oportunidad de aprender y en segunda es algo medio controlador de tu parte, querer que las cosas se hagan siempre a tu manera. No lo digo por mal, más bien, deberías ser un poco más flexible con ciertas cosas, por ejemplo, si vez que está rompiendo la vajilla, pues compra platos de plástico, no es como que alguien se vaya a morir por eso”. © Mean-Trifle8847 / Reddit
• “A veces el ser perfeccionista y controlador te lleva a ver qué otros hacen todo mal, te recomiendo que mires eso en ti primero si no lo estás padeciendo. Por lo que describiste es un buen tipo, no lo dejaría solo por eso”. © Weird_Rooster5879 / Reddit
• “¿Te casaste con el Chavo del Ocho? Honestamente, no creo que haya solución, salvo dejarlo. O lo hace a propósito para no tener que hacerlo él, o su torpeza es innata; y, si lo es, está difícil corregirla, a menos que tenga alguna discapacidad diagnosticada que lo haga ser así (no es que con eso se pueda corregir, pero al menos se podría intentar tratar, aunque en algunos casos sea intratable).” © Neither_Guava_8292 / Reddit

Hay relaciones donde el amor es profundo, pero la convivencia se vuelve un maratón de paciencia. Y no porque falte cariño, sino porque uno termina sintiéndose más como el adulto responsable que como una pareja. Las buenas intenciones no lavan los platos ni limpian la suciedad. Pero, ¿es razón para terminar la relación? ¿Tú que le recomendarías a esta mujer? Te leemos.