Entrenamiento fácil de 10 minutos para unos ojos agudos
¡Hola! ¿Puedes ver a esta hermosa persona que te habla desde la pantalla? Eso es posible gracias a tus ojos, el segundo órgano más complejo del cuerpo humano después del cerebro. Dentro de tus ojos están ocurriendo muchas cosas increíbles. Si bien un globo ocular es bastante pequeño (del tamaño de una pelota de ping-pong), alberga más de 2 millones de componentes.
Oye esto: nuestros ojos aparecieron mucho antes de que se inventaran los dispositivos y hábitos modernos. En sus inicios, el cuerpo humano no fue diseñado para pasar cada vez más tiempo frente a una pantalla. Por eso, es crucial mantener nuestros ojos saludables. Además de la higiene y la alimentación adecuada, la forma en que miras los objetos afecta directamente a la calidad de tu visión. Por eso, déjame enseñarte 8 ejercicios fáciles que puedes hacer en cualquier momento y lugar para mejorar tu comportamiento visual. Solo te llevarán unos minutos.
No te preocupes, ¡los haré todos contigo! Recuerda que tu seguridad es lo más importante. Si sientes molestias en algún momento, interrumpe los ejercicios de inmediato. ¿Lo ves? Jaja. Hablemos de la distancia. Ahora mismo, me estás viendo en la pantalla. Pero si yo estuviera de pie frente a tu ventana a una distancia de unos 30 metros, tu cerebro usaría circuitos neuronales diferentes para observarme. Hoy en día la gente se pasa el tiempo mirando sus aparatos de cerca, y este hábito no permite que el sistema de visión se relaje adecuadamente. Supongamos que no la dejas descansar. En ese caso, puedes experimentar dolores de cabeza, y las cadenas neuronales pueden modificarse con el tiempo.
Por eso, este es el primer ejercicio. Sal a tu balcón o simplemente párate junto a la ventana. Lo ideal es que la abras, ya que el cristal filtra mucha luz solar beneficiosa para tu bienestar. Ahora, mira hacia el horizonte durante un par de minutos. La visión panorámica permitirá que tu lente se expanda y se estire. Los expertos recomiendan hacer estas pausas cada 30 minutos de trabajo. Además, afirman que los adultos deberían limitar el tiempo de pantalla a menos de 2 horas al día fuera de las actividades laborales. Parece una misión imposible, ¿verdad? Bueno, siempre podemos cambiar. Tus ojos pueden moverse gracias a los músculos extraoculares que están unidos al globo ocular. Seis de ellos se encargan de cambiar la dirección de la mirada, mientras que el séptimo controla la elevación de los párpados. Esto es lo que debes hacer para entrenarlos.
Fija la cabeza en una posición. Manteniendo los ojos abiertos, comienza a dibujar figuras geométricas sencillas con la mirada. Voy a comenzar con un cuadrado. ¿Puedes verlo? Ahora, hagamos otra cosa. ¿Puedes adivinar esta forma? ¡Estoy dibujando un corazón! Buen trabajo. Haz este ejercicio durante al menos un minuto al día para mantener la elasticidad de tus músculos oculares. Muy bien, pasemos al siguiente. Tu sistema visual está perfectamente ajustado al movimiento; no solo al tuyo, sino al de todas las cosas que te rodean.
Uno de los superpoderes de los ojos es la persecución suave: la capacidad de mantener los ojos fijos en un objeto en movimiento. Nuestro siguiente ejercicio te ayudará a fortalecer esta capacidad. Toma cualquier objeto pequeño con tu mano. Yo tomaré este bolígrafo. Coloca la mano delante de tu cara. La distancia debe ser de la longitud del brazo. Fija tu cabeza y tu cuerpo en una posición y centra toda tu atención en el objeto. Y ahora, vamos a mover lentamente el bolígrafo en direcciones aleatorias: de izquierda a derecha, de arriba a abajo. Tus ojos deben permanecer centrados en el bolígrafo y moverse al mismo ritmo. Mueve el bolígrafo lo más suavemente posible.
Para desafiar aún más tu visión, intenta dibujar trayectorias inesperadas. Voy a dibujar algunos garabatos y signos de infinito y a escribir mi nombre. Si quieres hacer esta tarea más difícil, pídele a un amigo que mueva el objeto por ti. De esta manera, tendrás que estar más concentrado, a menos que tengas poderes telepáticos. Sigue el objeto durante unos minutos. Puedes hacerlo todos los días o de vez en cuando, como 2 o 3 veces por semana. Según los expertos, los ejercicios de persecución suave pueden ayudar a mejorar y mantener tu visión. Así que no dudes en salir a la calle y admirar la nieve que cae o las hojas que se mecen con el viento.
De lo contrario, si tus ojos se acostumbran a perseguir solo objetos en una pantalla plana, tu visión panorámica natural empeorará con el tiempo. Nuestro siguiente ejercicio es una versión de “cerca o lejos” del anterior. Coloca el bolígrafo más cerca de ti. Míralo fijamente durante unos 20 segundos y evita cualquier distracción. Por cierto, puedes usar cualquier objeto, incluso tu propio pulgar. A continuación, 20 segundos después, aleja el objeto hasta la longitud del brazo y vuelve a concentrarte en él durante unos 20 segundos. Llévalo lentamente a la posición inicial. Espera otros 20 segundos y repite todos los pasos.
Sigue haciendo este ejercicio durante 5 o 7 minutos. Si realmente quieres cuidar tu visión, puedes incluir este ejercicio en tu rutina diaria.La córnea recibe oxígeno directamente del aire. En otras palabras, tus ojos están respirando. Por desgracia, también pueden entrar otras impurezas junto con el oxígeno. Especialmente cuando olvidas parpadear con frecuencia, lo que puede provocar sequedad e inflamación. Con el tiempo, esto puede deteriorar la visión. El siguiente ejercicio parece muy sencillo, pero ayuda a hidratar los ojos y a recuperar la sensación de comodidad. Comienza a parpadear. Hazlo activamente durante un minuto, como yo.
¿Sientes alguna diferencia? Este ejercicio ayuda a limpiar y a lubricar los ojos. Además, les da un descanso de la luz, y debería ayudar a regular la circulación sanguínea dentro de tus ojos. Puedes hacerlo cuando te sientas tenso después de un largo día de trabajo. Un complejo sistema de tu cerebro vincula tu estado de alerta con la posición de tus ojos y tu mentón. Cuando tus párpados están levantados y miras hacia arriba, tu cerebro lo considera una señal de alerta. El siguiente ejercicio parece bastante sencillo, pero es poderoso. Probémoslo. Abre los párpados y levanta los ojos. Mira al techo tan alto como puedas. Pero no fuerces demasiado los ojos: detente antes de sentir molestias o dolores. Ahora intenta mantener la mirada hacia arriba durante 10 o 15 segundos.
Puedes usar este truco siempre que te sientas cansado para recargar rápidamente tu concentración. Pero es probable que fracases si intentas hacerlo al aire libre en un día soleado, ya que los ojos se entrecierran por la luz del sol, cuando la idea es que estén bien abiertos. Además, colocar la pantalla de la computadora más arriba, ligeramente por encima del nivel de los ojos, puede ayudarte a sentirte más despierto durante el día. ¿Has notado que tu mirada se mantiene estable cuando mueves la cabeza? Esto ocurre gracias al oído interno.
Los sistemas vestibular y visual trabajan juntos para enviar señales desde los músculos del ojo a los órganos del equilibrio en el oído interno. Así es como mantienes el equilibrio y la visión clara y sabes dónde está el suelo y dónde el techo. El siguiente ejercicio trabaja con esta zona y ayuda a mantenerla en forma. Puedes sentarte o ponerte de pie. Fija la cabeza y el cuerpo en una posición. Mueve los ojos hacia arriba y abajo. Repite este ejercicio unas 20 veces. Y ahora gira los ojos de lado a lado, como yo. Repitámoslo también 20 veces. Aquí tienes otro ejercicio para alegrar a tu sistema vestibular. Necesitarás una pelota de tenis u otro objeto redondo de peso y tamaño similares, como una manzana. Pero no te la comas.
Enfoca tus ojos en la pelota y lánzala de una mano a otra por encima del nivel de los ojos. Haz este ejercicio al menos 20 veces e intenta seguir la trayectoria de la pelota en todo momento. Ten cuidado: no debe caer en tu cara. La segunda parte de este ejercicio es un poco más difícil. Lanza la pelota de mano a mano por debajo de la rodilla 10 veces. Puedes comenzar por la rodilla derecha o por la izquierda. Eso no importa, pero no olvides cambiar de rodilla y hacer la misma cantidad con la segunda pierna. Buen trabajo. Y hablando de la visión, recuerda: puedes descubrir muchas cosas con solo observar atentamente.