Mujer valiente, inteligente y maravillosa. Hay mujeres que se llenan de hijos, luego están estirando la mano por ayuda. Ella prefiere no tenerlos por que no es su necesidad, pero sin embargo ayuda a los niños necesitados, si ella se hubiese llenado de hijos, no podría hacer nada por los demás. La admiro.
Harta de que le pregunten por qué no tiene hijos, actriz defiende sus razones
Entre el reloj biológico y la expectativa social, una mujer a menudo siente sobre sus hombros una fuerte presión por convertirse en madre. En el pasado, se daba por sentado que tener hijos en algún momento de la vida, era el destino natural de toda mujer. Sin embargo, en la actualidad, un número creciente de mujeres ha tomado una valiente y decidida postura: el deseo de no tener hijos. Pero para algunas, como Chelsea Handler, no es una tarea nada fácil lograr que su entorno, entienda ni acepte su decisión.
Recientemente, la comediante y actriz Chelsea Handler desató una ola de críticas y comentarios a favor y en contra, cuando expuso sus razones para no tener hijos y tampoco quererlos. Usando su distintivo sentido del humor, dejó claro que está cansada de que siempre le pregunten por el tema de los hijos, aun cuando su posición al respecto es absolutamente férrea.
“Los hijos que traes a este mundo no te definen. Como mujer, estoy harta de que me hagan la misma pregunta, repetidamente, después de que he dejado mi punto de vista tan claro”. Esto sentenció la comediante y actriz estadounidense, quien ha levantado varias ampollas con tales declaraciones.
Lo que ha disgustado entre quienes la han escuchado, es el modo en que la artista ha encarado la situación. Siendo sarcástica y al mismo tiempo muy directa, Chelsea ha mostrado en sus redes sociales, varias de las que, para ella, son las ventajas de las que goza alguien que no tiene hijos.
Con una serie de videos que ella misma titula “tener hijos no es tan bueno”, Chelsea expone cómo, por el hecho de no ser madre, puede permitirse cosas que los padres no. En dichos videos, luego de sentenciar, “me encanta no tener hijos”, dice sentirse feliz porque puede ver las series de televisión que quiera, nunca se contagia de los virus que un niño puede traer a casa y no tiene que hacer tareas escolares ni levantarse temprano.
En respuesta a uno de estos videos, Handler recibió una oleada de mensajes que reflejaban la molestia de quienes no están de acuerdo con lo que ella plantea. “Lamentable, sin alma y triste”, calificaba un usuario. Otro, le auguraba un futuro sombrío: “Espera cinco años más, cuando estés aún más triste y sola y te des cuenta de que eres completamente irrelevante”. Mientras que algunos, la tacharon de narcisista.
Ciertos usuarios, por el contrario, se sintieron identificados con ella, diciendo que aun siendo padres, entienden y apoyan a las mujeres que deciden seguir un camino distinto a la maternidad.
Pero ella, en vez de acongojarse por los comentarios recibidos, aprovechó la oportunidad para denunciar lo que, a su parecer, se ha convertido en una exigencia implícita que constantemente le hace la sociedad a las mujeres. “Se trata a la maternidad como si ese fuera el propósito principal en la vida de una mujer. Creen que las mujeres sin hijos son infelices y están incompletas. A la gente le aterra que una mujer no tenga hijos”.
A pesar de no tener hijos, dejó ver que siente empatía con las madres y reconoció su labor, diciendo: “Siento un profundo respeto por las madres, pero la maternidad es muy dura”.
Sin ceder la presión, Chelsea parece haber tomado una decisión definitiva, con la que se siente tranquila y defiende su trasfondo: “Es importante saber cuándo no tienes las habilidades para criar a un bebé. Yo sé que no tengo las habilidades necesarias para criar un bebé y en vez de hacerme sentir mal, deberían felicitarme por reconocerlo”.
Además, abrió su corazón para contar cuál es ese propósito que realmente mueve su vida y que está lejos de la maternidad. “Como no tengo mis propios hijos, estoy en la capacidad de dar mucho de mí, puedo pagarle la universidad a personas que no conozco, ayudar económicamente a niños que nunca conoceré en países a los que quizás nunca vaya y para mí, ese es mi propósito”.