Historias conmovedoras que harán que hasta los más escépticos comiencen a creer en el amor

A veces puede parecer que las personas modernas se han endurecido y ya no son capaces de tener sentimientos sinceros. Pero, en realidad, el amor está en todas partes, solo hay que mirar con más atención. Por ejemplo, puedes ver a una pareja de ancianos festejando su aniversario de bodas a pesar de todo, o a una mujer que recibe de una forma muy especial a su marido, quien ha regresado triste del trabajo. Hoy hemos reunido esta clase de historias de personas reales para compartirlas contigo.

Genial.guru ha recopilado para ti las 10 historias más conmovedoras de las comunidades “Oído por ahí” y “Habitación N° 6”. Esta lectura puede provocar una mejoría aguda en el estado de ánimo y un deseo de abrazar a los seres queridos. ¡Hasta querrás correr a confesar tus sentimientos a esa persona especial! Así que te recomendamos que leas con discreción.

• Le puse contraseña a mi laptop porque no quería encontrar ahí juegos de tanques o, Dios no lo quiera, algún virus. Le dije a mi esposo que le dejaría usarla si adivinaba la clave en 3 intentos. La descubrió al primero escribiendo “teamo”.
• 3 días antes del 47° aniversario de su boda, mi abuelo fue hospitalizado por un pequeño derrame cerebral. Pero incluso estando en el hospital pudo hacerle una sorpresa a mi abuela: le escribió un poema y fue a comprar flores, a pesar de las prohibiciones de los médicos. Y cuando ella fue a verlo y lo vio con el obsequio, sus ojos se llenaron de lágrimas.
• Un día, mi novia me contó que cuando era pequeña tenía un libro de cuentos de hadas que le leía su madre. La obra era vieja, de los años 50, y ella lo adoraba. Busqué fotos en Internet y logré encontrarlo. Ella se lo había olvidado en otro país, en una mudanza. Averigüé dónde comprar uno similar y se lo regalé. Por primera vez en mi vida pude ver a alguien llorar de felicidad. Resultó que, casualmente, había encontrado su antiguo libro, con la firma de su madre.

• Vivía con mi madre mientras yo salía con un hombre. Nos estábamos por casar y, de repente, mi mamá cayó enferma. La echaron del trabajo, comenzamos a tener menos dinero y muchos más gastos en la medicación. Se lo conté a mi novio y se fue en silencio. Me puse triste, pensé que había decidido dejarme al enterarse del problema. Pero una semana más tarde apareció, me entregó un sobre lleno de dinero y me dijo: “Compra todo lo necesario y no te preocupes por tonterías”. Resultó que había vendido su auto para ayudarnos.

• Con mi pareja llevamos casados 8 años, pero él casi nunca me dice “Te amo”. En lugar de eso, prepara la cena, le ayuda a nuestro hijo con la tarea, y ayer me sorprendió colgando mi bata de dormir cerca de la estufa para que yo, congelada por el camino a casa, me pusiera algo calentito al llegar... Al diablo con las flores y las palabras altisonantes, el amor se demuestra con actos.

• Hoy me di cuenta de que el amor existe. Mamá iba a irse a estudiar a otra ciudad. Papá estaba triste y la seguía por toda la casa. Ella le preguntó: “¿Cómo vivirás si me muero?”. A lo que él respondió: “No lo haré, me acostaré junto a ti”.
• Me estaba haciendo la manicura en la casa de la manicurista. Su esposo llegó del trabajo, haciendo preguntas estándar sobre el clima, el trabajo y la cena. La voz del hombre sonaba triste, decaída. La mujer me miró y dijo: “Espera 5 minutos, tenemos un ritual”. Pensé que se irían a la habitación o que escucharía besos detrás de la puerta. Pero ella lo abrazó con fuerza y ​​enterró la cara en su pecho. Él aspiró el aroma de su cabello y repitió: “Gracias, eres mi felicidad”. Luego le dio un beso en la frente y la dejó regresar conmigo. Si alguien me dice que el amor no existe, le arrojaré una piedra.

¿Conoces historias similares a las de este artículo, que les hayan sucedido a tus amigos o a ti? ¡Estaríamos encantados de conocerlas!