Imposible de detectar, pero si la ves, huye rápido

Si estuvieras en peligro de tener un encuentro con un animal peligroso, lo último de lo que querrías preocuparte sería de no poder verlos. Echemos un vistazo a algunos de estos cazadores furtivos que han dominado el arte del camuflaje. Las serpientes definitivamente tienen la capacidad de morderte incluso antes de que sepas que hay una cerca. ¡Y vaya que les gusta mordernos! Se estima que 4,5 millones de personas son mordidas por serpientes cada año. Desafortunadamente para los humanos, la serpiente con la mayor producción de veneno (que es la cantidad contenida en las glándulas venenosas a la vez) también es experta en discreción. Permíteme presentarte a la víbora del Gabón. Nop, aléjate.

Esta especie de serpiente se puede encontrar en los bosques subtropicales y las sabanas de África occidental, incluidos Costa de Marfil, Ghana, Guinea, Liberia, Sierra Leona y Togo. Eso es un montón de serpientes. Por lo general, crecen hasta una longitud de aproximadamente 1 m a 2 m, y pueden pesar de 9 a 12 kg. Esto la convierte en una de las víboras más grandes y pesadas. ¡Y no digo esto solo por efecto dramático, sino que la especie también tiene los colmillos más grandes de cualquier serpiente venenosa! A menudo miden 5 cm de largo o más y se doblan contra el paladar del animal cuando no están en uso. ¿Ya hice que la víbora del Gabón suene aterradora? Si no fue suficiente, podría ser un buen momento para informarte que la criatura tiene escamas agrandadas en la nariz que parecen un par de cuernos. Solo para acompañar su amplia cabeza triangular y sus pupilas con hendiduras verticales. ¡Ooh!

Como animal de emboscada, a la criatura le gusta aprovechar al máximo sus escamas moteadas de color marrón grisáceo. Bitis gabonica es su nombre científico real. Es una cazadora nocturna, por lo que permanecerá perfectamente quieta debajo de las hojas o plantas en el suelo del bosque esperando a que su presa pase antes de atacar. La serpiente es carnívora. Su dieta incluye principalmente roedores, pájaros, ranas y lagartijas. Su capacidad de caza se beneficia enormemente de esta habilidad para mezclarse perfectamente con su entorno. Esto incluso la hace capaz de derribar animales más grandes, como mangostas y liebres.

No hace falta decir que si logras ver una víbora del Gabón mientras paseas por África occidental, solo hay dos cosas en las que debes pensar. La primera: no la acaricies. En realidad, ¡huye de ella! Aunque son lentas y perezosas, estas serpientes tienen uno de los ataques de mordedura más rápidos que existen. Y su cabeza puede moverse entre 281 y 321 km/h durante un ataque. Ah, y lo segundo es que tal vez deberías contratar a alguien para que camine delante de ti, por si acaso. Sin embargo, afortunadamente, las mordeduras de estas criaturas son muy raras, ya que la víbora del Gabón es mucho más tranquila que otras serpientes peligrosas, como la víbora bufadora o la mamba negra. Esto no significa que no debas tener cuidado. Las mordeduras a menudo ocurren cuando un pie humano pisa a la criatura accidentalmente. Porque, como sabemos ahora, no son lo más fácil de ver.

Para los desafortunados que son mordidos, es muy serio. El veneno de la víbora del Gabón es extremadamente peligroso si no se contrarresta con un antídoto dentro de dos a cuatro horas. De acuerdo, es posible que ya sepas que muchas serpientes usan el arte del camuflaje a su favor, dado que están cerca del suelo y no son especialmente anchas o altas. ¿Por qué no miramos a una criatura más grande que podrías pensar que no tendrías problemas para detectar? ¿Qué tal un leopardo? Los leopardos se encuentran en muchas partes del mundo, como África, partes del Medio Oriente y Asia, incluidas China, India y el este de Rusia. En promedio, pueden pesar entre 50 y 90 kg, y medir hasta 2 m, excluyendo su cola de 1 m de largo.

Típicamente de color amarillo en la parte superior y blanco en la parte inferior, los leopardos tienen manchas oscuras dispuestas en lo que parecen rosetas por todo el cuerpo. Los diferentes patrones de estas manchas han confirmado la existencia de varias razas diferentes de leopardos. Los negros están perfectamente equipados para cazar a otros animales durante la noche, mientras acechan en las sombras, gracias a su pelaje completamente negro. Pero es posible que hayas pensado que los abrigos manchados de los otros leopardos en realidad los harían bastante fáciles de notar. Y no es así. En ambientes donde hay muchos parches claros y oscuros de diferentes tamaños y tonalidades, ayuda tener muchos puntos, manchas o rayas. Solo piensa en las áreas bañadas por el sol del interior de África y cómo el animal podría usarlas para su beneficio. Como si necesitaran más habilidades que les permitieran comportarse de una manera molesta y sigilosa, los leopardos también son ágiles trepadores de árboles. En otras palabras, también pueden acecharte desde arriba.

Entonces, ¿qué animales son engañados por las habilidades de camuflaje del leopardo? Bueno, cualquier cosa que pueda comer, desde pequeños roedores hasta antílopes acuáticos. Pero los leopardos generalmente cazan antílopes y ciervos de tamaño pequeño y mediano. Afortunadamente, de todas las especies de “grandes felinos” que puedes encontrar durante un safari en África, ¡los leopardos son los que menos probabilidades tienen de atacar a un humano! La mayoría de los casos de encuentros peligrosos entre leopardos y humanos ocurren cuando el animal está debilitado y no puede cazar. ¡Así que tiene que tomar lo que sea que pueda conseguir! No significa que no debas mantener los ojos abiertos, realmente abiertos, dada su capacidad para esconderse, si estás en un área conocida por ser frecuentada por leopardos. No tiene sentido tratar de huir de un animal que puede alcanzar una velocidad de hasta 56 km/h. Curiosamente, esto es en realidad más lento que la velocidad máxima de la mayoría de los animales que caza, lo que nuevamente habla de la capacidad del leopardo para escabullirse.

Hay muchas razones por las que el pelaje del leopardo funciona a su favor desde una perspectiva de camuflaje. Pero ¿sabes dónde esto podría no ser demasiado efectivo? ¿Qué tal el Ártico blanco como la nieve? Allí es posible que no notes un cierto par de ojos, nariz y almohadillas de patas que se acercan a ti porque el resto del cuerpo de su dueño se confunde con el entorno. ¡Y el dueño en cuestión es el oso polar! Sí, el oso polar puede camuflarse tan bien en su entorno que en realidad puede pasar por un ventisquero. Lo que es supersorprendente es que el pelaje del animal ni siquiera es blanco. ¡El pelaje del oso polar es amarillo, y su piel en realidad es negra!

Los osos polares usan su camuflaje a su favor no solo para cazar, sino también para su propia protección. Es extraño pensar en esto, dado que los osos polares son las especies de osos y carnívoros terrestres más grandes del mundo. Pueden pesar hasta 600 kg y medir hasta 1,5 m de altura a cuatro patas, ¡o casi 3 m cuando están de pie! A pesar de ser difícil de detectar debido a su pelaje, es el arte de la paciencia lo que el oso polar prefiere usar cuando busca comida. Un método de caza común utilizado por este es simplemente mantenerse inmóvil junto al orificio de respiración de una foca, y a menudo no solo durante horas, sino por días.

A veces, esta paciencia no tiene recompensa. E incluso cuando una foca sale a respirar, su cuerpo resbaladizo hace que, en promedio, los osos polares solo atrapen una de cada cinco focas con las que se encuentran. Bueno, no hay nada de malo en tomar el asunto en tus propias manos o, en este caso, patas. Los osos polares son nadadores muy hábiles y también pueden cazar en el agua. Pueden alcanzar una velocidad de 10 km/h remando con las patas delanteras y manteniendo las patas traseras planas como un timón. Sus patas están ligeramente palmeadas para ayudarlos a nadar. Por lo general, pueden contener la respiración bajo el agua hasta por treinta segundos.

Afortunadamente, las interacciones entre osos polares y humanos son muy raras. Entre 1870 y 2014, solo hubo 73 encuentros peligrosos documentados entre las dos especies. Al igual que con los leopardos y las víboras del Gabón, tendríamos que esforzarnos para encontrar uno. ¡El problema es que hay una buena posibilidad de que nos encuentren primero si lo hacemos! A veces, algunas criaturas ni siquiera usan el arte del camuflaje. Son tan pequeñas que no puedes verlas. Este es el caso de una especie de medusa conocida como Malo kingi o el asesino de reyes común. Esta criatura normalmente crece hasta 3 cm. Puedes compararla con el tamaño de una uña del pulgar humano. ¡Imagina estar en el océano y tratar de detectar algo tan pequeño!

Malo kingi tiene cuatro tentáculos rodeados de tejido que se asemeja a un halo. Puedes encontrar esta medusa principalmente en aguas australianas. La criatura en realidad obtuvo su nombre de un desafortunado encuentro con un turista estadounidense llamado Robert King, que estaba de visita en Australia, fue a nadar y fue... asesinado, supongo. Aunque puedes pensar que las medusas simplemente flotan sin rumbo en el océano todo el día, la mayoría de ellas son en realidad cazadoras activas, y Malo kingi no es diferente. Esta criatura incluso tiene ojos equipados con lentes, córneas y retinas. Permiten que las medusas vean imágenes reales en lugar de solo diferenciar entre áreas claras y oscuras.

A pesar de ser tan pequeña, Malo kingi es extremadamente venenosa, como descubrió el pobre Sr. King. Al entrar en contacto, dispara su veneno al torrente sanguíneo de otros animales a través de sus células punzantes en forma de dardos ubicadas dentro de los tentáculos. Afortunadamente, no busca interactuar con la gente. Sin embargo, se estima que 150 millones de personas son picadas por todo tipo de medusas cada año. Por lo tanto, siempre es mejor estar atento al estar bajo el agua.