Científicos afirman que la propuesta del joven que plantó 15 mil millones de árboles es una solución real para salvar el planeta

A muchos no les gusta la idea de llevar a casa tarea de la escuela, pero a Felix Finkbeiner, le cambió la vida. Su país natal, Alemania, estaba sufriendo las consecuencias del cambio climático y le pidieron que hiciera una presentación frente a sus compañeros sobre ello. Luego de investigar sobre el tema, quedó tan impactado que se comprometió a plantar árboles para salvar el planeta. Hoy podemos decir que ha cumplido su objetivo con creces.

Genial.guru te presenta un proyecto medioambiental que ha tenido un impacto colosal en la naturaleza.

El discurso que generó el cambio

Felix Finkbeiner no llamó la atención de muchos en el 2008 cuando, a los 9 años, declaró en una asamblea escolar que quería crear conciencia sobre el cambio climático a los niños del mundo y que los motivaría a que planten en sus ciudades 1 millón de árboles. Sin embargo, con el tiempo, el mundo dirigiría sus ojos hacia él y su causa. Había lanzado el discurso inspirado por Wangari Maathai, entusiasta ambientalista y ganadora del Premio Nobel de la Paz, y su ejemplo lo llevaría lejos.

Manos a la obra

Aunque en su escuela el eco no fue arrasador al principio, su lema “Deja de hablar, empieza a plantar”, se volvió viral. El internet y las redes sociales hicieron lo suyo y Felix lo aprovechó para lanzar una competencia de plantación de árboles entre escuelas en Alemania. El concurso creó tanto movimiento que atrajo la atención de los medios de comunicación, de personajes medio ambientalistas importantes e incluso de las Naciones Unidas, quien lo respaldó y nombró miembro junior de la junta del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, PNUMA.

Fue escuchado por los líderes mundiales

Con solo 9 años, Felix fundó la ONG “Plant for the Planet” (Planta para el Planeta). Su meta inicial incluía salvar a su animal favorito, el oso polar, pero al poco tiempo, cambió a salvar el futuro. Fue así que, a los 10 años, presentó su idea frente al Parlamento Europeo y luego en la Conferencia de la Juventud en Corea del Sur un año después. En sus carteles se leía “Planta un árbol”, en el que exponía su proyecto de solicitar a los organismos internacionales a que crearan conciencia en los niños sobre los peligros del cambio climático y los animaran a plantar árboles en sus países como parte de sus propuestas de gobierno.

Quiere crear una generación de embajadores defensores del medio ambiente

Fue así como, en el 2008, no solo líderes gubernamentales accedieron a su propuesta, sino que también inició una campaña en la que creó conciencia y educó a miles de niños a través de las Academias de Plant for the Planet, en las que niños y adolescentes se entrenan para luchar contra el cambio climático a través de la plataforma digital creada por Plant for the Planet y de la ayuda que reciben de la ONG.

Los logros son colosales

Fueron más de 67 000 niños de 66 países que se convirtieron en Embajadores de la Justicia Climática en sus países y que promovieron la plantación de los mil millones de árboles que Felix buscaba. El objetivo de plantar un millón de árboles en el mundo se cumplió en solo 2 años. Hoy, él tiene 21 años y Plant for the Planet se ha transformado en una ONG que recibe donaciones y el respaldo de instituciones renombradas como el World Wildlife Fund y el gobierno alemán. Se estima que la organización ha promovido la plantación de más de 15 mil millones de árboles desde el 2006.

Su nueva meta daría un pulmón al planeta

Su nueva meta es conseguir que en el mundo se planten 1 billón de árboles en un máximo de 30 años. Es decir, más del doble de árboles que pueblan la totalidad de la Amazonia. Si se lograra, científicos afirman que restauraría bosques deforestados, compensaría las emisiones mundiales de CO2 y conseguiría recuperar una atmósfera que daría equilibrio a la Tierra.

Este efecto cadena le ha brindado pulmones extra a nuestro planeta. ¿Crees que Felix logrará la meta del billón de árboles? ¿Consideras que hay otras maneras sencillas que se podrían duplicar para salvar al planeta? ¡Cuéntanos tu opinión en los comentarios!