Por qué Ryan Gosling no quería hijos hasta que un papel cambió su vida

Para muchas personas tener hijos o formar una familia no es una prioridad. El famoso actor, Ryan Gosling era uno de ellos. Por su cabeza no cruzaba la idea, hasta que un día, haciendo su trabajo, pasó algo que cambió su parecer por completo y le dio un giro a su vida para siempre.

Ryan Gosling ha dado de que hablar en los últimos meses gracias a su participación como Ken, en la tan esperada cinta de Barbie. Pero recientemente hizo otra declaración que puso los ojos sobre él, que confirman que no solo es encantador en pantalla, sino también fuera de ella.

Lo cierto es que Gosling a pesar de que ahora es un orgulloso y dedicado padre de familia, serlo no fue siempre su deseo. Hace poco confesó que no tenía en mente tener hijos hasta que pasó algo dentro de un set que cambiaría su forma de pensar con respecto a su futuro.

En el 2011, Ryan tenía 31 años. Estaba soltero y no tenía planes de formar una familia. Pero todo cambió cuando comenzó a grabar la cinta El lugar donde todo termina, junto a Eva Mendes, su ahora esposa.

En la película, ambos actores hacen de pareja y crean una familia juntos. Poco a poco, gracias a las escenas que compartían en pantalla, actor comenzó a tener sentimientos por ella. “Pretendíamos ser una familia, y realmente no quería que siguiera siendo una ficción”, continúa. “Me di cuenta de que esta sería una vida que tendría mucha suerte de tener”.

Así fue como el actor se percató de que quería ser padre, porque al fin había encontrado a alguien con quien querría compartir esa experiencia de vida. “No estaba pensando en niños antes de conocerla, pero después de conocer a Eva, me di cuenta de que simplemente no quería tener hijos sin ella”.

Ahora llevan más de 10 años como pareja. Y aunque comparten poco sobre su vida privada, se ve que Gosling tomó una buena decisión al darse cuenta de sus sentimientos. Ahora crían juntos a sus dos hijas, alejadas de los medios, y el actor incluso se tomó un descanso de la actuación durante algunos años, para dedicarse a su familia. “Quería pasar tanto tiempo como pudiera con ellas”.