15+ Veces que la suerte llegó sin previo aviso

Si ya has intentado con cremas, tratamientos y otros métodos para combatir el acné sin obtener resultados, es posible que la alimentación esté jugando un papel más importante del que imaginas. Aunque el acné puede deberse a múltiples factores, lo que consumes a diario influye notablemente. Ciertos alimentos pueden favorecer la producción excesiva de sebo y provocar inflamación o desajustes hormonales, lo que se refleja en la aparición de granitos y acné. Aquí encontrarás una lista detallada con los alimentos que pueden afectar tu piel y los que la benefician.
Siempre que sea posible, reduce el consumo de comidas industrializadas que contengan conservantes, aditivos, colorantes y grasas poco saludables. Todas estas sustancias favorecen la inflamación y obstrucción de los poros. Nos referimos a alimentos que puedan incluirse en uno de estos grupos:
Cuando el cuerpo está deshidratado, los procesos internos se ralentizan, lo que genera desequilibrios que pueden favorecer la aparición del acné. El agua, por tanto, es fundamental para una piel sana, ya que ayuda a eliminar toxinas, hace que nuestro hígado y riñones funcionen bien, reduce la inflamación y favorece la hidratación.
Aunque no cura el acné, una buena hidratación puede mejorar la función de la barrera cutánea y prevenir la producción excesiva de grasa. Beber al menos 1,5 litros al día impulsa la regeneración celular y ayuda a la piel a eliminar impurezas, haciéndola menos propensa a los brotes.
Si deseas algo con sabor o eres fan de los tés, el té verde puede ser una buena opción al tener propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y seborreguladoras.
¿Qué métodos conoces tú para curar el acné? ¿Cuál te ha funcionado y cuál te ha resultado un verdadero fracaso?