Qué hacer cuando alguien está siguiéndote

Curiosidades
hace 1 año

Muy bien, esta es la situación: estás caminando a casa después de una noche de fiesta con amigos. De pronto, oyes pasos detrás de ti. Volteas y ves a alguien que alguien se acerca. “¿Acaso me está siguiendo?”. Si alguna vez te encuentras en esta situación, esto es lo que debes hacer. Camina un poco más rápido. Si oyes que los pasos te alcanzan, tus sospechas eran correctas. Dobla varias veces a la izquierda. Tres o cuatro veces son suficientes para que regreses a tu posición inicial. Así confirmarás que la persona te persigue, no tendría ningún otro motivo para darle la vuelta a la manzana. Además, puedes aprovechar para desaparecer.

En cuanto dobles, corre hasta que te pierdan de vista. Si hay alguien cerca, puedes decirle “¡hola!” en voz alta y fingir que es tu amigo. Dile que alguien está siguiéndote y pregúntale si puede acompañarte a una zona más pública hasta que encuentres otro camino a casa. No vayas a tu casa o tu departamento cuando te estén siguiendo, incluso si alguien se ofrece a ayudarte. Si lo haces, tu perseguidor sabrá dónde vives. Podría regresar más tarde o esperar a que salgas de casa. Pero supongamos que no hay nadie en la calle y que esta figura sigue detrás de ti. Si tienes una capucha, métela en el cuello para ocultarla. Y si tienes una cola de caballo o un bollo, suéltate el cabello mientras caminas. Tu perseguidor tendrá más problemas para tomarte del cabello o la ropa si no tiene nada concreto que agarrar.

Ahora debes perderlo. Si acabas de alejarte de una calle transitada, puedes fingir que olvidaste algo tocándote en los bolsillos. Di en voz alta: “Uf, ¿dónde está mi billetera?”. Mientras tanto, comienza a caminar aún más rápido en la dirección contraria. Es más arriesgado perseguir a alguien que camina hacia una calle concurrida. Y también es menos probable que sigan a alguien sin billetera. Nunca digas que perdiste las llaves, te serán útiles más tarde. No saques el teléfono para navegar en Internet o enviar mensajes. La luz de la pantalla hará que tus ojos tengan problemas para adaptarse a la oscuridad. Además, mirar la pantalla te llevará a caminar más lento.

Observa tus alrededores y averigua tu ubicación exacta. Mientras caminas, busca el nombre de la calle, mira los números de las casas y las tiendas y recuerda los edificios que hay cerca. Necesitarás esos detalles más tarde. Si no puedes escapar y la calle o callejón donde te encuentras parece interminable, date la vuelta y mira a tu perseguidor. Observa su ropa, sus ojos, su altura y su edad. “Sudadera negra, pantalones azul marino, gorra de béisbol verde. Listo”. Así podrás dar una descripción precisa a las autoridades más tarde. Además, le enviarás un claro mensaje: “Sip, te veo”. Las personas con malas intenciones suelen aprovechar el factor sorpresa. Al establecer un contacto visual prolongado, les quitas esa confianza. Lo tomarás desprevenido, y ya no te verá como un blanco. Muéstrate seguro de ti mismo, con los hombros hacia atrás y el mentón hacia arriba. No te muestres perdido o nervioso. Debes transmitir una energía de “sé lo que estoy haciendo”. Eso no le gustará.

Supongamos que el sujeto de la gorra verde es valiente y decide acercarse a ti para preguntarte algo. Mantén un contacto visual constante. Si te pide una dirección, no mires hacia abajo para buscar tu teléfono, eso te distraerá. Simplemente dile que no sabes cómo ir. La pregunta es bastante sospechosa de por sí: ¿quién no tiene un teléfono con mapa hoy en día? Si llevas libros o bolsas con las compras, prepárate para soltarlos en cuanto sientas que algo no anda bien: las cosas pesadas te harán más lento.

Ahora necesitarás las llaves. Colócalas en la palma de la mano con los dientes asomando por el puño. Si sucede lo peor, tendrás algo puntiagudo que podrás usar para defenderte y huir. No te quedes callado. Haz un escándalo mientras intentas escapar. Grita “fuego” en lugar de “ayuda”. La gente reacciona más a esa palabra que a un pedido de auxilio. Además, nadie quiere perseguir a una persona que grita como loca y llama la atención. Si te siguen a una buena distancia, saca el celular y llama a la policía. Ahora es cuando necesitas saber todos los detalles de la calle en que te encuentras, tu ubicación y los edificios que te rodean. Quédate al teléfono con el oficial y sigue sus instrucciones. Otro escenario posible es que alguien te siga en público. Si eso ocurre, entra a una tienda o a cualquier lugar donde puedas perderte entre la multitud. Si tu chaqueta y tu camiseta son de colores diferentes, quítate la chaqueta; así será más difícil que esta persona te identifique.

Si entras a un restaurante o una cafetería y tu perseguidor no se da por vencido, tendrá que entrar y esperarte. Una opción es que vayas al baño y te quedes unos 5 o 10 minutos. Tal vez se canse y se vaya. Si sales y ves que sigue ahí, ve a la fila, pide algo y dile disimuladamente a uno de los empleados que te están siguiendo. Lo más probable es que se encargue del asunto y te ayude a estar a salvo. Toma tu orden y siéntate. Busca tu teléfono y diles a tus amigos o familiares dónde te encuentras para que puedan buscarte o hacerte compañía. Mientras esperas, prueba estos trucos: ¡Bosteza! Si el otro hace lo mismo, sabrás que te está observando: los bostezos son visualmente contagiosos.

Finge que miras tu reloj. Si la otra persona hace lo mismo, es otra señal de que te está observando. Imitamos instintivamente a la persona que tiene nuestra atención. Para engañarlo, sal del lugar y camina un poco hasta que el perseguidor te pierda de vista. Después, en cuanto salga, vuelve a entrar. No tendrá razones para entrar de nuevo, a menos que esté siguiéndote. Cuando alguien venga a buscarte, pídele a un empleado que te lleve a la salida trasera, solo por si acaso. Evita caminar solo. Y si caminas solo, muévete por calles concurridas y mantente alerta a lo que te rodea. Ya sabes, todo ese espacio más allá de tu teléfono. Jeje, ¡solo bromeo! En resumen: Espero que nunca te pase algo así, pero estar preparado te dará más seguridad.

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