Yo no podría dormir sin almohada
Qué le pasa a tu cuerpo si empiezas a dormir sin una almohada
Las primeras almohadas que conocemos se remontan a la antigua Mesopotamia. Estaban hechas de piedra y solo la gente adinerada podía permitírselas. A diferencia de las almohadas de piedra antiguas, las que usamos hoy en día son suaves y esponjosas, y muchas personas no pueden dormir sin abrazar una almohada grande y acogedora. Pero, de hecho, dormir con una almohada quizá no sea la mejor manera de descansar, ya que puede afectar a tu cuerpo y tu estado de ánimo.
En Genial.guru entendemos que puede ser difícil separarte de tu almohada favorita, pero dormir sin ella tiene muchos beneficios para la salud, y estuvimos investigando para presentarte algunos de ellos.
1. Previene el dolor de espalda
Muchas almohadas pueden llevarnos a una posición antinatural para dormir, y el apoyo que brindan no dura mucho. Aunque la almohada en sí misma no hará que te duela la espalda, puede empeorar muchos de los síntomas subyacentes. Cuando duermes sin almohada, tu columna puede descansar y tu cuerpo está en su posición natural.
2. Te ayuda a lidiar con el dolor de cuello
La mayoría de las almohadas no pueden ayudarte a descansar en la posición correcta, e incluso pueden empeorar las posturas para dormir. Doblar el cuello de alguna manera durante mucho tiempo te hará sentir incómodo, y las almohadas que son demasiado firmes o demasiado blandas pueden provocar dolor de cuello.
3. Combate los dolores de cabeza
Si te despiertas con dolor de cabeza o te sientes mareado, tu almohada podría ser la culpable. Las almohadas demasiado altas hacen que la cabeza y el cuello se doblen hacia delante y añaden más tensión a los músculos del cuello. Esto podría provocarte dolor de cabeza por la mañana una vez que te hayas levantado de la cama.
4. Puede aliviar el estrés
Si tu almohada te hace sentir incómodo por la noche, podrías terminar dando vueltas mientras duermes. Cuantas más alteraciones del sueño tengas, menos tiempo tendrá tu cuerpo para realizar muchas funciones importantes que ocurren mientras dormimos. La privación constante del sueño puede afectar tu estado de ánimo y tus habilidades de pensamiento, y hará que tu cuerpo libere más hormonas del estrés durante el día.
5. Previene el acné facial
Tu piel te agradecerá que te deshagas de tu almohada. Normalmente, tu cara está presionada contra la almohada la mayor parte del tiempo durante la noche. Probablemente no laves la funda de tu almohada todos los días, y esta acumula suciedad, aceite y polvo doméstico. Todo esto puede provocar brotes, inflamación y arrugas prematuras.
6. Puede ser bueno para tu cabello
Si te despiertas por la mañana con el cabello seco y enredado, es posible que desees renunciar a la almohada por el bien de tus mechones. Cuando estás dando vueltas por la noche, tu cabello se frota contra la funda de la almohada, lo que hace que se rompa. Las fundas de almohada también pueden absorber los aceites de tu cabello, dejándolo seco y quebradizo.
Advertencia: recuerda que este artículo solo tiene fines informativos. Para obtener asesoramiento profesional y un diagnóstico adecuado, consulta a tu médico.
¿Duermes con almohada o sin ella? ¿Has notado cómo te afecta? Cuéntanos en los comentarios de abajo.