15 Personas que fueron bendecidas por un giro del destino inesperado

Para muchos dueños, los perros son como parte de la familia. Si hay que elegir entre un perro fiel y una pareja romántica, es comprensible que mucha gente se decante por la mascota, sobre todo si llevan años juntos. Pero esto plantea una pregunta interesante: ¿es realmente erróneo elegir a un perro que siempre te da felicidad antes que a alguien que acabas de conocer y que ya ha echado a perder tu confianza? Una mujer compartió su historia sobre esto en Reddit, y definitivamente tiene sus pensamientos al respecto.
Ella escribió:
“Yo (24 años) y mi novio (24 años) llevamos juntos casi 4 años. Nos llevamos bien, en su mayor parte, cosas como que él pierda algo mío HAN pasado, pero nunca a este nivel.
He tenido a mi perra, Milo (12F) toda su vida, nos hemos criado juntas, y le cuesta mucho llegar a confiar en los demás. Siempre ha sido una chica inquieta, pero es la luz de mi vida y siempre ha estado a mi lado incluso en mis peores días”.
“Hace 3 años, presenté a mi novio a mi familia, que es solo mi madre y Milo. Él y mi mamá se llevaban bien, pero él no reconocía a Milo de ninguna manera, lo cual está bien, no esperaba que él estuviera encima de ella, considerando que a ella no le gusta eso. Pero aun así me pareció bastante extraño porque dijo que le encantaban los perros y, para ser sincera, me lo creí porque siempre acariciaba a los canes cuando estábamos fuera.
Cualquier interacción durante los últimos 3 años con ella fue limitada, pero Milo le tomó cariño, le saludaba, se acercaba a él para que le diera caricias (que a veces le daba) y lo aceptaba en nuestros paseos diarios. Hace 1 año y medio Milo se puso enferma, tenía una infección dental bastante grave y se le había hinchado todo el ojo derecho. Le pedí a mi novio que nos llevara al veterinario porque yo no tengo coche.
El veterinario se ocupó de la infección y me dio algunos antibióticos para que se los diera todos los días e instrucciones para limpiar la herida que quedó después de que el veterinario limpiara el pus. Durante un par de semanas no salí mucho con mi novio, cuidé de Milo porque no se encontraba muy bien. Una cosa que me llamó la atención fue el hecho de que parecía bastante cabreado cada vez que le hablaba de su evolución. Mirando atrás, eso debería haber levantado algunas banderas rojas, pero supongo que lo pasé por alto”.
“Ahora que te he contado la versión corta del pasado, esto es lo que pasa en el presente: planeé con mi madre irnos de vacaciones cortas, a visitar a mis abuelos. Estaba hablando con mi novio sobre este viaje y le dije quién cuidaría de Milo: mi mejor amigo, Alex (23 años). Mi novio se ofreció entonces a cuidarla. Se enfadó porque yo no acudí primero a él, afirmando que quiere a Milo y quiere ir de paseo con ella, yo acepté a regañadientes, considerando que este ‘amor’ por ella había salido de la nada.
El viaje debía durar 3 días. El día 2, estaba hablando con mi novio por teléfono, y me dijo casualmente que a Milo le gusta mucho quedarse en la calle. A mí me pareció raro, y le pregunté qué quería decir. DEJABA A MI DULCE NIÑA SOLA EN EL EXTERIOR DURANTE HORAS Y ¡¡¡SALÍA A CONTROLARLA CADA HORA!!! Tengan en cuenta que vivo en un departamento y no tengo jardín.
Mi madre y yo nos fuimos en cuanto se lo dije. Llegamos a casa alrededor de las 9 de la noche. Desde entonces, bloqueé a mi novio en todo y he estado buscando a mi chica. He impreso carteles, he salido todos los días durante horas y la he puesto en grupos de Facebook de mi zona (si tienes algún consejo sobre algo más que pueda hacer, por favor, házmelo saber)”.
“Mi ex ha venido hoy a recoger sus cosas, y puede que algunos de ustedes estén felices por lo que van a leer, pero no ha recuperado ni una sola cosa.
Cuando me vio empezó a suplicarme que le perdonara y, gracias a ustedes otra vez, accedí a perdonarle si me decía la verdad. Me miró directamente a la cara y me dijo: ‘Si te digo la verdad, no me perdonarás’. Se me volvió a romper el corazón, pensando en lo peor. Cuando me vio llorar, me dijo que debía superarlo porque ella ya era mayor, pero que si realmente la quería de vuelta, debía volver con él, y cuando confiara en que realmente le perdonaba, podría volver a verla.
Yo estaba agotada, desesperanzada y enfadada, y aunque quería recuperar a mi chica, no podía mirarlo, y mucho menos estar con él el tiempo que él pensara que me costara perdonarlo. Así que se fue, sin decirme nada de Milo”.
“Me llamaron unas horas más tarde y al otro lado estaba una señora que encontró a Milo en el arcén. Me dijo que esperaría a que viniera, porque cuando quiso recogerla parecía estar sufriendo.
Cuando llegué y la vi, allí tumbada, todas mis emociones me inundaron. Mi dulce bebé, aunque parecía tan diferente, estaba viva. Ahora pasa la noche en el veterinario, tiene dos costillas rotas y está deshidratada”.
“Los agradezco a todos y cada uno de los que se tomaron la molestia de guiarme en esta pesadilla. Gracias de nuevo.
Mi bebé está viva y estará en casa pronto, voy a presentar cargos”.
Al final, la mujer tomó la mejor decisión al elegir a su can antes que a su novio, que claramente le había mentido. Además, su novio descuidó a su perra, lo que provocó un accidente. Esta situación demuestra que estaba en la relación equivocada. La clave de su experiencia es que es importante elegir a una pareja que no solo te acepte por lo que eres, sino que también cuide de las cosas y los seres que amas, incluidas tus mascotas.