19 Niños que lograron dejar a sus padres con los pelos de punta

En un panorama donde muchas celebridades han enriquecido a los cirujanos plásticos, con un incremento del 40 % en los procedimientos estéticos realizados en los últimos dos años, es poco común encontrar a figuras públicas que abracen cada línea de expresión en su rostro con orgullo.
Salma Hayek, la reconocida actriz, se distancia de la búsqueda incansable por detener el tiempo. Con una serie de estrategias y secretos, ha logrado conservar una vitalidad envidiable, y está dispuesta a compartir sus métodos con el mundo.
La abuela de Hayek, una cosmetóloga formada en París, dedicó su vida a embellecer a otras mujeres. De ella, Hayek aprendió que el cuerpo se regenera durante el sueño, restaurando el equilibrio del pH de la piel. “Lavarse la cara por la mañana solo interrumpe estos procesos naturales. Si limpio mi rostro por la noche, ¿cómo podría amanecer sucio?” comenta la actriz.
A pesar de un horario exigente y viajes frecuentes, Hayek se asegura de mantener su cuerpo en movimiento. Aunque dispone de poco tiempo para ejercicios formales, transforma las actividades diarias en oportunidades para entrenar. Mientras se cepilla los dientes, por ejemplo, mantiene los brazos en alto y opta por activar los glúteos en lugar de las rodillas al subir escaleras.
Lejos de teñir su cabello, Hayek acepta sus canas con gracia. Argumenta que no tiene la paciencia para teñirse y prefiere no desperdiciar su juventud en ello.
¿Qué piensas que es lo más efectivo para mantenerse joven?