Si dejaste una botella de plástico en el auto, no bebas de ella

No dejar los objetos de valor o un chocolate en el auto es una obviedad, pero hay otras cosas que la gente suele pasar por alto. Estos son algunos de los objetos que no debes dejar en tu vehículo. El número uno son las latas de aerosol: fijador de pelo, desodorante, pintura en aerosol, limpiadores domésticos y otros productos similares. En la parte posterior de estas latas verás una recomendación de temperatura de almacenamiento. Pues bien, respétala. Esto es lo que puede ocurrir. Como estas latas están presurizadas, son más sensibles a la temperatura. Lo que hay dentro puede expandirse y provocar una grieta. En ese caso, la lata podría estallar. Las temperaturas superiores a 49 grados ya son alarmantes, y tu auto puede alcanzar fácilmente esa temperatura en un día intenso de verano.

Unos investigadores de los EE. UU. han calculado cuánto tarda un auto en convertirse en una “fábrica de sudor” en un día caluroso. En una hora, el interior de un vehículo estacionado al sol alcanza los 35 grados o más, con un promedio de casi 47 grados. Si quieres que tu auto siga en una pieza, llévate las latas de aerosol. El segundo elemento es el protector solar. Es vital para tu piel, ya que disminuye el riesgo de complicaciones cutáneas y evita el envejecimiento de la piel causado por el sol. Esto incluye arrugas, flacidez y manchas de la edad. Pero, cuando lo dejas en el auto, se expone a altas temperaturas y su vida útil puede acortarse. Si tu protector solar se ha echado a perder, puede que notes un olor raro al destaparlo. Además, el calor puede hacer que la tapa se abra y la sustancia pegajosa se esparza por todo el auto. La misma regla aplica también a los lápices labiales y otros cosméticos.

Lo siguiente son las botellas de plástico. Hay dos razones por las que no debes dejarlas dentro del auto. En primer lugar, una botella de agua de plástico puede actuar como lupa, aumentar los rayos del sol y desatar un incendio. Un departamento de bomberos de Oklahoma realizó un experimento y confirmó que el peligro de incendio era real. David Richardson, de ese departamento, afirma que puede ocurrir si el haz de luz se enfoca lo suficiente. La segunda razón está relacionada con tu salud. Muchas botellas de plástico contienen bisfenol, un compuesto potencialmente tóxico. Sus niveles pueden aumentar a altas temperaturas, lo que podría ser perjudicial para tu cuerpo. Existe la posibilidad de que esta sustancia química entre a tu bebida si dejas la botella dentro del vehículo.

¡Ah, las baterías! Pueden dejar de funcionar a plena potencia cuando las dejas abandonadas en el auto. Podrías comprar unas nuevas y resolver este problema, pero no será tan fácil solucionar una fuga o una rotura. A veces incluso llegan a ser perjudiciales para la salud, ya que el ácido de la batería es peligroso cuando se inhala y altamente corrosivo. Una vez más, la razón de las fugas está relacionada con las altas temperaturas. Los fabricantes de baterías recomiendan mantener sus productos a temperatura ambiente. Este hecho está parcialmente relacionado con las baterías: se trata de los aparatos electrónicos. ¿Has tomado conciencia del calor que puede alcanzar tu teléfono cuando está expuesto al sol? Supongamos que estás conduciendo y mirando el GPS. Incluso en esta situación, tu celular puede calentarse. ¿Qué le ocurrirá después de horas de exposición al sol? Las compañías telefónicas se oponen rotundamente a que los clientes dejen sus dispositivos en los vehículos porque podrían apagarse, dañarse o... ¡bum!

Las pertenencias personales son otra prioridad en la lista. Lo primero que a uno se le viene a la cabeza es la billetera o el bolso. Sin embargo, a veces un pasaporte o incluso unas monedas que dejas cerca del asiento del copiloto son suficientes para atraer a un ladrón. Es mejor mantener esas cosas fuera de la vista. Por ejemplo, puedes guardarlas en el maletero en lugar de dejarlas en el asiento trasero. El número 7 también está relacionado con los robos. A veces la vida es demasiado ajetreada, y es comprensible que no puedas limpiar el auto con frecuencia. Pero dejar basura en él es otro error. Los ladrones tienden a buscar autos de aspecto descuidado, ya que piensan que el propietario no lo usa con frecuencia. ¿Y las plantas? Sé que no es habitual tener plantas en el auto, pero a veces es necesario trasladarlas. El calor del interior del vehículo puede deshidratarlas fácilmente. Otra cosa que no deberías guardar en el auto durante mucho tiempo son los medicamentos. Los cambios constantes de temperatura en el interior del vehículo pueden reducir la eficacia de las píldoras. Las autoridades recomiendan mantener la mayoría de los medicamentos entre los 13,5 y los 15 grados en un lugar fresco y seco.

Los documentos importantes que contengan datos personales tampoco deben quedar en tu vehículo. Algunos ejemplos son los formularios de impuestos, los estados financieros y los expedientes académicos. Un ladrón podría cometer fraude o robo de identidad utilizando esta valiosa información. ... Y también debemos considerar la comida y la bebida. Los expertos recomiendan no dejar comida o sobras en un auto caliente por más de dos horas, o solo una hora si la temperatura supera los 32 grados. La misma regla aplica también en invierno. Por ejemplo, las conservas tienen un alto riesgo de echarse a perder. Si una lata de guisantes se congela en tu auto, el efecto será similar al que tendría un refresco. Deja que se descongele en el refrigerador en lugar de dejarlo a temperatura ambiente. Si el producto no tiene un aspecto ni un olor normal, tíralo en un lugar donde ni siquiera un animal pueda encontrarlo. No intentes probarlo; confía en tus otros sentidos. Si parece oxidado o tiene alguna grieta, también debe terminar en la basura.

Los huevos son otro ejemplo. Normalmente no deben congelarse. Pero supongamos que olvidaste una bolsa de compras en el maletero y que hace tanto frío por la noche que los huevos se congelaron. Guárdalos en el refrigerador antes de usarlos. Deben estar duros, es tu única opción. La congelación hace que la yema se vuelva espesa y similar a un jarabe: pierde su fluidez natural y no se mezcla bien con otros ingredientes. No deberías dejar a tus mascotas solas en el auto, obviamente. Y no solo por el posible aumento de la temperatura. Se sentirá incómoda sin que tú, su mejor amigo, la acompañe. Debido a la frustración, podría hacer algo para hacerse notar, como, por ejemplo, arruinar el interior de tu vehículo.

Regresemos a la época invernal. Si es posible, mantén el depósito de gasolina de tu auto lleno hasta la mitad. Así evitarás que los conductos de la gasolina se congelen. Esto también facilita encender el motor y conducir por la mañana. Mientras vigilas el medidor de combustible, es una buena idea que también eches un vistazo a la presión de los neumáticos: el frío puede reducirla. No solo las altas temperaturas pueden dañar algunos objetos, también las bajas. Un buen ejemplo son las latas de pintura. Debes sacarlas rápidamente de tu vehículo en invierno. Los ingredientes de la pintura pueden sufrir dilataciones, separaciones y aglomeraciones debido al frío. En otras palabras, ya no podrás usarla. El clima también afecta a los instrumentos musicales de madera, como los violines y las guitarras. Los cambios de temperatura y humedad pueden hacer que se deformen, se agrieten o se rajen.

Las fluctuaciones de temperatura también afectan a los anteojos. En un auto caliente, las monturas de plástico pueden doblarse, o el plástico puede volverse quebradizo cuando hace mucho frío, lo que lo hará más propenso a romperse. No dejes las llaves de casa ni el control del garaje dentro del auto. Es una práctica cotidiana para mucha gente, pero también es arriesgada: pueden caer en las manos equivocadas. A la hora de escuchar música, la mayoría conecta el celular al auto o escucha la radio. Los CD se usan cada vez menos. De todos modos, no los dejes en el auto: podrían deformarse y no podrás volver a usarlos. ¿Se te ocurre algún otro objeto que no debas dejar en el auto?