Si tu hijo comienza la escuela o el jardín de infantes y tiene miedo, ten en cuenta estos consejos para ayudarlo a superar sus temores

Es muy común que los niños pequeños, al comenzar la escuela primaria o el jardín de infantes, sientan miedo: el colegio es, para ellos, un lugar desconocido en el que estarán durante horas sin sus padres. Esto puede ocurrir también con los chicos un poco más grandes cuando son cambiados de escuela: los amigos y los espacios conocidos ya no están, y eso los asusta mucho.

En Genial.guru creamos para ti una lista de consejos que puedes tener en cuenta para ayudar a tu pequeño hijo a superar sus miedos.

1. Háblale antes de que comience la escuela

Antes que nada, puedes preparar a tu hijo para este gran cambio en su vida. ¿Cómo? Siéntate con él y conversa sobre este asunto. Cuéntale las cosas positivas que encontrará en la escuela (puedes resaltar que hará nuevos amigos) y luego pregúntale por sus miedos o dudas. Un detalle muy importante: cuando te diga a qué le tiene temor, no lo minimices ni le restes importancia. Dile que lo comprendes, que a ti te sucedió lo mismo a su edad, y explícale con paciencia que siempre lo apoyarás.

2. Si puedes, acompáñalo durante los primeros días

Si tu trabajo y ocupaciones diarias te lo permiten, acompaña a tu hijo durante los primeros días, esos que se conocen también como “período de adaptación”. Cuéntale que lo llevarás a la escuela y lo irás a buscar hasta que se adapte, y que siempre estarás disponible. Esto hará que se sienta más seguro, ya que tendrá la certeza de que su madre o su padre estarán cerca.

3. Preséntate ante los maestros

Ten en cuenta que cada maestro tiene varios niños a su cargo. En muchas ocasiones, aunque quiera prestarle la misma atención a todos, eso puede volverse dificultoso. Una buena idea es que durante los primeros días de escuela te presentes ante los profesores de tu hijo, les digas quién eres, los pongas al tanto de los temores de tu pequeño, y les pidas que tengan en cuenta su tiempo personal de adaptación. Además, es una buena oportunidad para conocer a los padres de los otros niños... que seguramente estarán en tu misma situación.

4. Involúcrate en esta nueva etapa

Un modo de ayudar a tu hijo a sacarse de encima el miedo a la nueva escuela es haciéndole ver que lo acompañas. Como dijimos anteriormente, lo ideal sería que pudieras tomarte unos días en el trabajo. Pero si no puedes, hay otros modos de involucrarte: cuando llegues a tu casa, pídele a tu hijo que te cuente cosas sobre su día escolar, que te muestre su cuaderno, que te diga cómo se llaman sus compañeros. Es una forma de hacer que la escuela comience a formar parte de la rutina familiar y, por lo tanto, deje de ser algo extraño para tu pequeño.

5. Cuéntale cosas de tu experiencia escolar

Si tu hijo entiende que tú también has ido a la escuela (es decir: que no siempre fuiste madre o padre), es posible que se relaje. ¿Por qué? Porque es común que en la niñez sobredimensionemos las cosas, y eso puede hacer que tu hijo crea que nadie lo comprende. Si le cuentas pequeñas anécdotas de tu propia experiencia escolar, le será más fácil comprender que la escuela no es el fin del mundo: tú has “sobrevivido” a ella, así que él también puede superar esa etapa.

6. Invita a sus amigos a casa

Seguramente, a medida que pasen los días, tu hijo hará nuevos amigos en la escuela (aunque en un principio eso le parezca imposible). Cuando eso ocurra, hazle saber a tu pequeño que esas amistades te parecen bien e invítalos a merendar a tu casa, o arregla con los padres de los otros niños una salida grupal. Con esto, tu pequeño se sentirá más seguro de sí mismo y comprenderá que la escuela es un buen lugar, también, para ampliar su círculo de personas queridas.

7. Mantente alerta al acoso

Por último, no queremos dejar pasar un tema que afecta a muchos niños y adolescentes: el acoso escolar. No es un algo menor: si tu hijo es víctima de esto por el motivo que sea, seguramente es infeliz en la escuela. Y si es tu pequeño quien acosa a un compañero, debe saber que lo que hace está mal porque puede lastimar a otros. Lo ideal sería que hables de estos temas con tu hijo, con los maestros y con otros padres. De este modo, si hay un caso de violencia en la escuela, no será ignorado y podrá ser tratado a tiempo.

¿Tu pequeño ha empezado la escuela? ¿Cómo se siente al respecto? Comparte tu experiencia con nosotros en la sección de comentarios.