Su familia iba directo a la quiebra, pero un sorpresivo mensaje de Messi le cambió la vida
En medio de las situaciones más difíciles y desafiantes, donde la incertidumbre y el pesimismo parecen tomar el control, a veces surge una luz de esperanza de la manera más inesperada. Estos momentos pueden cambiar el curso de nuestras vidas, recordándonos que incluso en los tiempos más oscuros, existe la posibilidad de un cambio positivo. Así nos lo demuestra la historia de este hombre quien, quizás ni en sus sueños más locos, llegó a imaginar que el mismísimo Lionel Messi le daría un vuelco a su vida.
Guillermo Fernández es un emprendedor Argentino, quien, al lado de su esposa e hijos, tienen hace varios años un negocio de fabricación de parrillas para asados. El negocio empezó en el patio de su casa y poco a poco fue creciendo, a medida que Guillermo incorporaba elementos de diseño y personalización para sus clientes.
Sin embargo, el negocio continuaba siendo una pequeña empresa y, a pesar de los esfuerzos de Guillermo y su esposa, Flavia, por sacarla a flote, habían empezado a experimentar dificultades financieras que los llevaron a considerar vender todo y empezar de cero, para poder sacar adelante a sus tres hijos.
En medio de la incertidumbre sobre el futuro de su emprendimiento, Fernández recibió un mensaje que transformó su situación. El remitente era Lionel Messi, quien se comunicó con él a través de Instagram para solicitar una parrilla.
Hacía poco tiempo, Guillermo había elaborado una parrilla para alguien que resultó siendo amigo de Messi y el futbolista, al verla, quedó encantado. Tanto, que no dudó en escribirle por Instagram a Guillermo, con el fin de encargarle una para él y su familia: «Quería ver si te podía pedir una». Ese mensaje fue la salvación ante lo que este fabricante de parrillas llama «una agonía».
El mensaje, por supuesto, tomó a Guillermo por sorpresa. Sus ojos no podían creer que de la cuenta oficial de Instagram del capitán de la selección de fútbol argentina, viniera un pedido para su negocio. El puente para concretar el negocio fue Antonela, esposa del deportista, quien le dio todas las especificaciones de lo que Lionel quería para su parrilla familiar.
«Veníamos mal y fue como una luz al final del túnel. Gracias a su compra pudimos salvar el año», señaló este emprendedor argentino. Fernández expresó su gratitud en las plataformas de redes sociales hacia el capitán de la selección argentina. A partir de ese momento, su empresa experimentó un crecimiento extraordinario y comenzó a recibir miles de pedidos de diversos lugares del mundo, y hoy en día han podido dar empleo a más familias en su taller.