Trucos de lenguaje corporal que te ayudan a caer bien en segundos

Psicología
hace 1 mes

Tu lenguaje corporal influye de forma significativa en cómo los demás te perciben, especialmente en contextos profesionales. Aunque es importante ser uno mismo en conversaciones informales, proyectar la actitud adecuada en el trabajo puede moldear percepciones y abrirte nuevas oportunidades.

La psicología detrás de la comunicación no verbal

La comunicación no verbal incluye el lenguaje corporal: un mensaje transmitido sin usar palabras. Los movimientos y gestos, ya sean sutiles o evidentes, pueden revelar con claridad lo que una persona está pensando o sintiendo.

Solo entre un 7% y un 10% de lo que comunicamos se expresa con palabras. El resto, al menos un 85%, se transmite de forma paraverbal o no verbal. Cuando alguien está bajo presión o experimenta emociones intensas, suele comunicarse aún más a través de estos medios.

Cómo los gestos más simples pueden marcar la diferencia

Según un estudio de neurocientíficos, las personas que muestran una leve sonrisa acompañada de una ligera elevación de las cejas durante una conversación suelen generar mayor simpatía y confianza en sus interlocutores.

Cuando buscamos apoyo o queremos conectar con alguien, tendemos a acercarnos a quienes se ven amigables y receptivos, en lugar de aquellos que parecen distantes, incómodos o indiferentes. Pequeños gestos pueden mejorar enormemente nuestras interacciones con los demás.

Cómo ajustar tu lenguaje corporal para comunicarte mejor

Durante una conversación, tu postura es clave, especialmente al estar sentado. Inclinarte ligeramente hacia delante demuestra que estás atento e interesado, mientras que inclinarte hacia atrás puede transmitir desinterés.

Las personas que caminan con la cabeza baja pueden parecer tímidas o inseguras, mientras que quienes la llevan en alto proyectan seguridad y orgullo. Las posturas abiertas con brazos y piernas sin cruzar indican disposición y participación, mientras que cruzarlos puede reflejar una actitud defensiva.

En situaciones importantes, como reuniones o entrevistas de trabajo, mantener una postura erguida pero relajada, con los hombros hacia atrás y la cabeza en alto, comunica confianza. En cambio, una postura encorvada puede dar señales de inseguridad o nerviosismo. Incluso la orientación de tus pies puede decir mucho, así que pon atención a tu lenguaje corporal en todo momento.

Comprender las diferencias culturales y psicológicas

Muchas personas creen que evitar el contacto visual es señal de que alguien miente. Sin embargo, esto puede deberse a diferencias culturales, sociales o psicológicas. En algunas culturas, un contacto visual breve es lo normal; en otras, puede ser visto como una falta de respeto. También, una persona introvertida podría evitar mirar a los ojos sin que eso signifique algo negativo. Observa los músculos de los ojos: tienden a tensarse cuando alguien se siente incómodo, enojado o estresado.

En lugar de centrarte en un solo gesto, observa el comportamiento habitual de la persona y cualquier cambio. Si no haces esto, podrías malinterpretar las señales. Por ejemplo, lo que parece ansiedad en una persona activa podría ser su comportamiento normal.

Por otro lado, alguien que carece de empatía puede imitar expresiones para manipular las emociones de los demás.

Qué dice la posición de tus pies sobre tu personalidad

Se dice que cada acción revela algo de nuestra personalidad, ya sea cómo caminamos, hablamos o nos movemos. Aquí te mostramos cuatro posturas al estar de pie que pueden decir mucho sobre tu carácter:

  • Pies juntos: Indica una personalidad respetuosa y diplomática. Esta postura transmite calma y atención, sugiriendo que eres buen oyente y que consideras las opiniones de los demás antes de formarte una propia. Las personas que adoptan esta posición suelen evitar conflictos y priorizan la armonía, lo que refleja seguridad en sí mismas, no debilidad.
  • Pies ligeramente separados: Proyecta autoridad y firmeza. Esta postura demuestra que te sientes cómodo tomando el control y ocupando tu espacio físico y social. Es una pose de poder clásica que refleja una personalidad decidida y segura, atrayendo a los demás con tu presencia dominante.
  • Un pie ligeramente adelantado: Revela una personalidad relajada y consciente de sí misma. Sugiere una actitud abierta y optimista ante la vida. Las personas que adoptan esta postura suelen ser accesibles, sinceras y disfrutan del presente, expresando libremente sus emociones. También proyectan confianza y coherencia con sus valores internos.
  • Pies cruzados: Suele representar una personalidad introspectiva, que valora su espacio personal. Indica cautela ante nuevas situaciones y una actitud reservada, ya que quienes adoptan esta posición prefieren tomar su tiempo antes de entablar conversación. Pueden parecer tímidos o inseguros al principio.

Cómo influye tu postura en las primeras impresiones

Se cree que la mayoría de las personas tienden a apuntar sus pies hacia quienes sienten afinidad, como un mejor amigo o alguien a quien consideran un líder. Para mostrar interés en otra persona, intenta mantener los pies alineados y una postura erguida. Este lenguaje corporal también transmite seguridad en uno mismo. En cambio, si los pies apuntan hacia afuera, puede interpretarse como señal de nerviosismo, ansiedad, incomodidad o incluso deseo de irse.

Es importante tener en cuenta que muchas personas forman impresiones basadas en la posición de tus pies. Por eso, si deseas caer bien, cuidar tu postura puede marcar la diferencia. Aun así, procura mantener una actitud lo más natural posible.

Opiniones de expertos sobre las señales no verbales

Según Michael Ellsberg, experto en lenguaje corporal, el contacto visual es una de las herramientas más importantes en la comunicación cara a cara. Un contacto visual adecuado transmite honestidad, sinceridad, cercanía, atención y disposición para escuchar. Solo ten cuidado de no parecer demasiado insistente o intimidante; si se maneja con naturalidad, puede ser un método muy eficaz para conectar.

Una persona que mantiene el contacto visual durante una conversación demuestra seguridad y puede generar una sensación de confianza en los demás. Por el contrario, desviar la mirada o mirar hacia abajo suele interpretarse como una señal de inseguridad.

Lillian Glass, también experta en lenguaje corporal y autora del libro The Body Language Advantage, afirma que el contacto visual firme es el mayor indicador de confianza. "Las personas seguras de sí mismas siempre miran hacia arriba, nunca hacia la mesa, el suelo o sus pies", explica Glass. "Ya sea durante una conversación o simplemente al caminar por los pasillos de la oficina, miran a los demás y conectan con ellos a través de la mirada."

Cómo el lenguaje corporal adecuado puede ayudarte a triunfar en los negocios

En el mundo de los negocios, la capacidad de entrar a una sala con una actitud segura, que transmita compromiso y confiabilidad, es fundamental. Cada gesto que haces comunica algo sobre ti: quién eres, cómo te sientes y cuánto te importa lo que haces.

"Tú controlas el mensaje que estás enviando", escribe Barbara Pachter en su libro The Essentials of Business Etiquette. "Si proyectas una imagen segura, creíble y tranquila, las personas te percibirán de esa manera."

¿Estás enviando las señales correctas con tu lenguaje corporal? ¿Te muestras accesible manteniendo el contacto visual y usando gestos que hacen sentir cómodos a los demás? ¿Te inclinas hacia delante para escuchar y mostrar interés? Estos pequeños detalles físicos pueden abrirte puertas en el ámbito profesional o, por el contrario, convertirse en obstáculos si no los manejas bien.

Aunque el lenguaje corporal no define por completo tu personalidad, ofrece pistas valiosas sobre cómo te perciben los demás. Usa estas observaciones como una oportunidad para conocerte mejor y comprender mejor a quienes te rodean. Tal vez descubras nuevas facetas en tus relaciones o adquieras una ventaja en distintas situaciones que te ayude a avanzar en la vida.

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