20+ Hechos sobre la película “Como agua para chocolate”, cuya producción incluso llamó la atención de la policía

Arte
hace 3 años

Como agua para chocolate es una película mexicana que se estrenó en las salas de cine en 1992. Logró cautivar a gran parte del público nacional e internacional gracias a su historia cultural y gastronómica mezclada con pizcas de amor secreto y tradiciones familiares. Si crees que el plato fuerte ya fue servido, tal vez te quede espacio para degustar un postre preparado con historias y anécdotas que tienen un vínculo con este largometraje.

Genial.guru ya preparó la mesa y tiene para ti una selección de curiosidades relacionadas con esta producción cinematográfica, las cuales probablemente no hayas escuchado antes.

  • Como agua para chocolate es una adaptación de la novela homónima escrita por Laura Esquivel y publicada en 1989. La escritora también fue la encargada de elaborar el guion para la película, en colaboración con el director Alfonso Arau.

  • Giovanna, astróloga y amiga de Laura Esquivel, le aconsejó a la escritora que realizara una novela. Le hizo caso y se inspiró en las fotos de Tita, una tía abuela suya a quien no se le permitió casarse para quedarse a cargo de su madre hasta envejecer. Así fue como surgió la historia que describió Arau durante una conferencia.

  • Basándonos en la experiencia personal de Arau, el costo de esta cinta alcanzó un total de 2 millones de dólares, cifra muy elevada en comparación con los 300 mil dólares que en ese momento las productoras gastaban para la realización de una película en México. Para obtener el presupuesto suficiente, el director recibió ayuda de un banco, e incluso tuvo que empeñar su propia casa y a “su abuelita”.

  • Para la realización de la película, se contrató a jóvenes egresados de escuelas de cine para que ocuparan áreas como edición, asistente de dirección y fotografía. Un hombre llamado Emmanuel Lubezki fue el fotógrafo elegido para participar en el rodaje. “Chivo”, quien ha ganado varios premios Óscar por producciones como El renacidoGravedad, volvió a trabajar con Arau en 1995, para la cinta Un paseo por las nubes.

  • En los ensayos previos a la filmación, la actriz Delia Casanova fue quien interpretó el papel de Mamá Elena. Sin embargo, de un momento a otro, no regresó al set, y el personaje le fue otorgado a Regina Torné, quien finalmente apareció en pantalla. Arau explicó que Delia mostró descontento por algo, situación que la hizo abandonar la producción.

  • Debido al poco dinero y a la falta de mobiliario para el rodaje, se compraron muebles usados cruzando la frontera. Para disimular la ausencia de elementos en la locación, Arau solicitó a Lubezki que realizara una película “oscura”. Con ello se logró una técnica de filmación fiel a la época de la Revolución Mexicana, tiempo en el que se desarrolla la historia.

  • Durante la filmación del largometraje, el equipo de trabajo conformado por actores y personal técnico estuvo aislado tres meses en un desierto cercano a un pequeño pueblo de Coahuila, en México. El director consideró que su realización fue muy complicada para todos por esta situación.

  • Mario Iván Martínez, actor que interpretó al Dr. John Brown, recordó que para una escena se cambió el caballo que utilizó originalmente para transportarse en una carreta, debido a que el primer ejemplar no llegó a tiempo para la continuación de la filmación. Se utilizó un animal de montar y estuvo cerca de provocar un accidente.

  • Y hablando del Dr. Brown, Mario Iván explicó que, pese a su experiencia personal de vivir en Inglaterra y conocer el acento angloparlante, se apoyó en una persona de habla inglesa que llevaba varios años viviendo en México para conseguir un tono de voz acorde a su interpretación.

  • Lumi Cavazos, actriz que realizó su primer protagónico en esta película interpretando a Tita de la Garza, desconocía la novela al momento de reunirse por primera vez con Alfonso Arau. Además, explicó que esperaba ser llamada para interpretar a Gertrudis, hermana de Tita, papel que le fue entregado posteriormente a Claudette Maillé.

  • Una de las escenas más recordadas del personaje de Gertrudis es cuando monta a caballo sin ropa. Claudette reveló en un blog dedicado al cine que fue la primera vez que realizó este tipo de tomas y que no tuvo complejos, en parte por la educación y forma de vida que experimentó durante su tiempo en Francia. Por lo tanto, la escena fue completamente real.

  • En una de las escenas románticas entre Tita y Pedro (Marco Leonardi), se suponía que los personajes serían acompañados por fuegos artificiales. Sin embargo, eso no fue posible debido a problemas económicos. Durante una noche de lluvia y tormenta, a Arau se le ocurrió aprovechar los destellos de los relámpagos para completar la grabación de esa parte.

  • Lumi Cavazos es mayor en estatura que Marco Leonardi. Para posicionarlos a la misma altura ante las cámaras, Arau realizó algunos trucos. Por ejemplo, cuando Tita y Pedro debían aparecer bailando juntos, Marco utilizó zancos caseros atados a sus zapatos. Además, durante una escena en la que ambos tenían que pasear al lado del río, se cavó una pequeña zanja para que Lumi caminara en ella. El resto de la ilusión fue producto del trabajo de fotografía.

  • En la escena de la boda de Pedro y Rosaura (Yareli Arizmendi), se sirve a los invitados el pastel que Tita preparó la noche anterior. Cuando comienzan a comerlo, ella deja la mesa y se dirige adentro de la casa. Durante su recorrido, puede apreciarse al equipo de filmación y a los camarógrafos en el reflejo de una de las ventanas.

  • En la película, Pedro le regala a Tita un ramo de rosas por ser su primer año como cocinera del rancho. Después, ella prepara codornices con los pétalos de esas flores. Cuando Tita recibe el ramo, los pétalos son rosados, pero al momento de preparar y servir la comida, estos son rojos.

  • La producción filmó algunas escenas en la localidad de Piedras Negras, Coahuila, sin permiso de las autoridades. Arau declaró que “rompieron las reglas” pese a solicitarle autorización al presidente municipal para evitar contratiempos y porque el presupuesto estaba acabándose. Como era de esperarse, varios policías arribaron a la locación e incluso persiguieron al equipo cuando este terminó de filmar.

  • La película requirió doblaje en estudio después de la filmación. Liza Willert, actriz que participó con su voz en español en series como Dinastía, Los años maravillososLa vaca y el pollito, fue elegida por Arau como la directora en ese rubro. Se repitieron algunas escenas del guion debido a ruidos externos que opacaron el sonido original. También se realizó el doblaje completo para el personaje de Pedro por parte de un actor mexicano, debido al marcado acento italiano de Marco Leonardi.

  • Aunque la comida fue uno de los elementos primordiales del largometraje, también fue uno de los problemas con los que la producción tuvo que lidiar detrás de cámaras. Se prohibió comer la mayoría de los platillos preparados en la filmación. En su lugar, una mujer conocida como “la güerita” se encargó de cocinar para todo el equipo. De acuerdo con Mario Ivan Martínez, pese al banquete que tenían a su lado para una de las escenas, a los actores les ofrecieron arroz, frijoles y atole.

  • Alfonso Arau fue rechazado no una, sino dos veces por sus amigos de Hollywood con esta película. En su primera oportunidad se presentó con el guion en la mano y después regresó con la cinta realizada, pero no recibió apoyo. De acuerdo con lo vivido por el director, el idioma español y la ausencia de famosos estadounidenses fueron los principales motivos para negarse a producirla.

  • En su período de exhibición, Arau visitó una de las salas de cine en la Ciudad de México para observar la reacción del público a su trabajo. El director explicó que las malas condiciones de las instalaciones y algunos comentarios realizados por los espectadores terminaron por desilusionarlo. Acto seguido, salió del lugar y comenzó a llorar pensando que sería un fracaso.

  • Una mujer que trabajaba en una distribuidora llamada Pandora fue la única persona que confió en la película y la llevó al Festival de Cannes para encontrar un potencial comprador. Durante el prestigioso evento realizado en Francia, se exhibió durante dos días, llenando la sala en la segunda jornada. Al terminar su proyección, Alfonso Arau comentó que había recibido más de 30 ofertas para distribuirla.

  • Mientras que en el mercado angloparlante se respetó la traducción del título original, para el público de habla francesa, la novela fue titulada Chocolate amargo (Chocolat amer), mientras que la película fue conocida bajo el nombre Las especias de la pasión (Les épices de la passion).

  • Más de dos décadas después de darse a conocer el libro y la película, Laura Esquivel realizó dos novelas que conformaron la trilogía y que dieron continuación a la historia de Como agua para chocolate. El diario de Tita fue presentado en 2016, y un año más tarde se publicó Mi negro pasado.

  • A finales de 2018, la propia autora reveló que Como agua para chocolate sería llevada a Netflix a través de una serie y también contaría con un musical en Broadway. Hasta la fecha, ni la plataforma web ni alguna productora de teatro se han pronunciado oficialmente al respecto. ¿Te gustaría ver una nueva versión?

¿Cuál es la historia que más has disfrutado o recomiendas ver tanto en su versión literaria como en su adaptación al mundo del cine?

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