Lo de cargar el bolso en un solo hombro es cierto que se nota porque está más cargada la zona.
10 Cosas que el masajista sabe sobre su cliente, incluso si lo ve por primera vez
El estilo de vida de una persona impone una huella en su cuerpo, y no se trata solo de los malos hábitos. Pasatiempos, el modo de trabajar, lesiones antiguas, problemas de salud: todo esto un profesional lo puede literalmente “leer” en nuestro cuerpo. Y si algunos cambios son irreversibles, a otros podemos hacer frente por nuestra cuenta o nos puede ayudar un especialista calificado.
Genial.guru averiguó qué puede notar un masajista en un paciente en la primera sesión. Resultó que estas personas saben más sobre nosotros de lo que pensamos.
1. Llevas una bolsa en un hombro
Un masajista experimentado notará inmediatamente que un lado del cuerpo está más tenso que el otro. El hábito de llevar una bolsa (especialmente pesada) en el mismo hombro a la larga conduce a un desplazamiento de la columna vertebral. Aparece rigidez en los glúteos, los isquiotibiales y los cuádriceps, lo que a su vez provoca un ángulo antinatural de inclinación de la pelvis. Para evitar una metamorfosis desagradable, alcanza con cambiar periódicamente el hombro.
2. Tienes hijos
El embarazo no pasa desapercibido para el cuerpo de una mujer: durante los 9 meses el cuerpo cambia, incluidos los ligamentos que se ablandan, no solo en la región pélvica, sino en todo el cuerpo. Se recuperan recién un par de años después, por lo que el masajista definitivamente notará los cambios en la primera sesión. Además, algunas mujeres empiezan a tener el síndrome del túnel carpiano durante el embarazo. Afortunadamente, la mayoría de los problemas desaparece con el tiempo.
3. Pasas mucho tiempo al volante
La postura en la que la persona está detrás del volante no es del todo correcta. Las rodillas resultan estar más arriba de las caderas y el cuerpo se inclina hacia delante. Debido a esto, aparece tensión en los hombros y la espalda baja, que en caso de que esta postura se mantenga durante un tiempo prolongado tiene un efecto perjudicial en la columna vertebral. La persona comienza a agacharse y jalar su cabeza en sus hombros. Si tienes que pasar mucho tiempo detrás del volante, haz un pequeño calentamiento siempre que sea posible y piensa en parches especiales para el respaldo del asiento.
4. Duermes en una posición incorrecta
Los expertos creen que la mejor postura para dormir es de espaldas, y debe haber una almohada no solo debajo de la cabeza sino también debajo de las rodillas. Mientras que los amantes de dormir boca abajo a menudo tienen que pagar por su hábito con el dolor matutino en el cuello. La presión adicional en la parte superior de la columna vertebral provoca rigidez muscular, y con el tiempo puede causar problemas más serios, como la curvatura.
5. Has sufrido lesiones en la infancia
Las consecuencias de algunas lesiones son típicas y, por lo tanto, es poco probable que un especialista no los note. Por ejemplo, las personas que han sufrido una fractura de cadera, columna o pierna a menudo tienen una ligera diferencia en la longitud de las extremidades. Es posible que hayas olvidado cómo patinaste mal en la infancia, pero para un masajista todo quedará claro después de un examen detallado.
6. Estás usando demasiado el teléfono inteligente
A menudo nos olvidamos de controlar nuestra postura cuando estamos mensajeando o revisamos las redes sociales. Y esto está mal: la cabeza se extiende inconscientemente hacia la pantalla del celular, levantamos los hombros y se contraen los músculos del cuello. Como resultado, incluso una simple friega de esta área puede causar dolor o incomodidad. Y un pasatiempo largo en tal pose puede provocar trastornos funcionales y hombros torcidos. La principal recomendación para los fanáticos de la navegación por Internet: alejarse con más frecuencia de la pantalla y hacer un pequeño entrenamiento.
7. Eres alérgico
Hay puntos particularmente sensibles en la cara: están localizados en la región de los ojos, la frente y las mejillas. Si realmente tienes un ataque de alergia, estas áreas se inflaman. Además, el problema se puede identificar no solo visualmente, sino también durante la palpación. Los tejidos en estas zonas al tacto se sienten diferentes comparando con su estado normal. Los ganglios linfáticos en el tórax y el cuello también pueden inflamarse.
8. Trabajas mucho frente la computadora
Trabajar muchas horas frente una computadora tiene varias consecuencias desagradables para el cuerpo. En primer lugar, hay contracciones en el cuello y los hombros. En segundo lugar, la parte inferior de la espalda de las personas que están obligadas a pasar todo el día frente una computadora sufre mucho. Además, muchos se quejan de la tensión en las nalgas y las piernas, que invariablemente se acumula por culpa de la la posición equivocada del cuerpo.
9. Tienes problemas con la digestión
Todo es muy simple: cuando sufres de los estreñimientos crónicos, el estómago se endurece. El masajista notará el problema apenas tocándote. Afortunadamente, el mismo terapeuta de masaje puede ayudar a hacer frente a la enfermedad; existen muchas técnicas especiales para eliminarla.
10. Llevas una mochila pesada
Hay muchas técnicas en el uso de una mochila, cuyo incumplimiento tendrá consecuencias desagradables, desde la escoliosis hasta la enfermedad cardíaca. Como mínimo, las correas pueden apretar los omóplatos, y los músculos en esta área se tensarán en respuesta a la presión (por cierto, lo mismo sucede cuando se usa un sostén demasiado apretado). Por lo tanto, es extremadamente importante elegir el equipo correcto. La mochila debe quedar ajustada a tu espalda. Es deseable que tuviera un cinturón, entonces la carga se distribuirá de manera uniforme y minimizará los riesgos.
¿Has notado algún síntoma similar en tu cuerpo? ¿Crees que los hábitos afectan mucho la salud?
Comentarios
Wow! No sabía que podían detectar alergias :O
Es obvio que nuestros hábitos influyen en nuestra salud.
Yo padezco dolor de cervicales por trabajar frente al ordenador.
Mi postura al dormir no es buena y siempre me levanto con dolor.