13 Hechos sobre las relaciones que los hombres deben entender a los 30 años

Pareja
hace 3 años

El sociólogo Nicholas H. Wolfinger de la Universidad de Utah realizó una investigación y descubrió que los matrimonios realizados después de los 30 se divorcian con menor frecuencia. El problema radica en que algunas cosas las comenzamos a entender solo a esa edad. Bueno ¿cómo cambia el comportamiento de los hombres en las relaciones?

Genial.guru averiguó qué cosas descubren los hombres sobre las relaciones después de los 30 años.

1. En realidad las relaciones necesitan esfuerzo

Los jóvenes a los 20 años creen que, si tienen el corazón de la chica en sus manos, entonces ella no va a desaparecer. En realidad, es más fácil destruir relaciones de lo que parece, por eso, necesitan un esfuerzo constante. Después de los 30 años, los hombres se dan cuenta de que es importante dedicar tiempo a la mujer amada, resolver juntos los problemas domésticos y llegar a un acuerdo.

2. El pasado tiene que quedarse en el pasado

A los 20 años, parece que solo debe haber un amor para toda la vida, pero a los 30 años viene un entendimiento de que cualquiera tiene derecho a tener su historia. Por lo tanto, si en la juventud cualquier contacto con los ex o simplemente fotos conjuntas pueden realmente molestar a tu novio, entonces un hombre maduro se aplica al pasado de la forma filosófica: esto es pasado, lo más importante es lo que pase ahora.

3. No existen personas perfectas

Tampoco existen medias naranjas perfectas, ni aquellas personas por las que valga la pena esperar toda la vida y ¡es maravilloso! Sí, nadie está destinado a nadie y no tienes que esperar hasta que una voz del cielo u otra señal del destino te indique la única variante posible de tu propio “vivieron felices por siempre”. Los hombres de 30 años creen en su destino, por eso, a dicha edad hay que recordar que las personas perfectas no existen y construir las relaciones con imperfectos, pero con una persona querida.

4. Es normal compartir los problemas

A los 20 años, parece que el hombre tiene que resolver sus problemas por sí solo y pedir un consejo o ayuda es una señal de debilidad. Un hombre maduro entiende cuán importante es la confianza y el respeto en las relaciones, por eso, si él tiene problemas, él podrá compartirlos con su novia. Después de los 30, viene el entendimiento que es imposible que el amor exista sin amistad y el matrimonio es para estar juntos en las buenas y en las malas.

5. Nadie tiene que ajustarse a tus expectativas

“Pensaba que ella no sería así, que por mí cambiaría sus planes de ir a Katmandú”, exactamente así piensan los chicos decepcionados en su juventud. Los hombres maduros comprenden perfectamente que la chica puede desconocer totalmente lo que él pensaba sobre ella, su comportamiento no tiene que ajustarse a lo que él quería ver, y es imposible obligar a una persona a que cambie para satisfacer tu propia percepción. Las personas son diferentes y eso es lo maravilloso.

6. Eludir el problema no es resolverlo

Los chicos jóvenes tienen miedo de las peleas o los conflictos y en lugar de resolver el problema, prefieren no hablar sobre él o desaparecer por un tiempo determinado, esperando que la chica se calme y todo se resuelva por sí solo. Pero esto no funciona completamente o a lo mejor trae consecuencias contrarias. Un hombre maduro entiende que el reconocer el problema es un buen inicio y, a pesar de que no se pueda resolver de inmediato, con el paso de tiempo lo podrán resolver juntos.

7. Puedes y debes participar en las tareas domésticas

En la juventud, el chico podría conservar los estereotipos sobre las tareas domésticas, pero en la madurez es mejor deshacerse de ellos. En la mayoría de los casos, es muy común que los dos miembros de la pareja trabajen, así que rechazar la ayuda en las tareas domésticas al buscar excusas por tu trabajo muestras egoísmo. Los hombres maduros no vacilan en participar en las tareas domésticas y comprenden cómo unir estas actividades.

8. Si prometes algo, tienes que cumplirlo

Como dice la gente “Cuando promete un hombre honrado, queda obligado”. “Pero esos son otro tipo de hombres”, agregan los chicos inmaduros. Un hombre adulto sabe el valor de su palabra, por eso, si él promete algo, entonces intenta mantener esa promesa y solo se verá obstaculizada por motivos válidos. A fin de cuentas, exactamente de estas acciones depende si la mujer confiará en él en el futuro.

9. “Todos los hombres son polígamos” es un mito. Las traiciones no demuestran masculinidad

El éxito del hombre en el cine y en la publicidad a menudo se relaciona con una gran cantidad de mujeres a su alrededor. Las mentes jóvenes se inclinan por creer en estos conceptos de la vida agregando la teoría de “polígamos” diciendo que él es hombre y es parte de su naturaleza. Con el paso de tiempo, la persona rechaza los estereotipos vacíos y empieza a valorar las relaciones completas solo con su pareja.

10. Hay que tener valentía para reconocer tus errores

“Mi esposo nunca pide perdón. Incluso a mí”, decía Claire Underwood en la serie House of Cards. Y era infeliz en su matrimonio. Un hombre maduro es lo suficientemente valiente para reconocer su error y asumir la responsabilidad por las consecuencias de sus propias acciones, mientras que un chico joven, hasta el último momento gritará que él tiene la razón, aunque siga pensando que la Tierra es plana.

11. El amor se expresa en el cuidado

El verdadero sentimiento se manifiesta en la vida cotidiana, en las pequeñeces. A una edad temprana parece que las promesas sobre estar juntos durante toda la vida o las serenatas bajo la luna son suficiente, que justamente estas cosas demuestran tu amor. Los hombres adultos saben manifestar sus sentimientos con acciones: encontrar a su mujer en la noche después del trabajo o abrazarla para que no pase frío.

12. Puedes no compartir los intereses de tu mujer, pero tienes que respetarlos

Los intereses de otra persona se pueden discutir fácilmente, especialmente en la juventud. La música, las películas, las redes sociales e incluso el bordado o el macramé: cualquier afición de la persona puede parecerle rara a alguien. Un hombre inmaduro juzga lo que no comprende, frecuentemente criticando de manera brusca a su novia y desanimándola. Un hombre adulto se da cuenta de que cada uno tiene derecho a tener su propio hobby y criticar las aficiones de su amada es indigno para un hombre.

13. El control mata cualquier relación

En la juventud, los celos pueden parecer incluso románticos, ella los considera como una verdadera señal de pasión. Una persona madura entiende que el sentimiento de la posesión tiene muy poco en común con el amor y él confía en su pareja.

Durante toda la vida aprendemos que el amor está lleno de maravillosos descubrimientos. Escribe en los comentarios qué has aprendido por ti mismo en las relaciones maduras.

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