Muchas veces la risa nerviosa te sale sola, sobre todo con tus superiores en el trabajo
Una mujer compartió un método para defenderte de aquellas personas que adoran hacer bromas ofensivas
Al menos una vez en sus vidas, todas las mujeres han escuchado comentarios indecentes o frases obscenas por parte de conocidos, colegas, gerentes o simplemente transeúntes odiosos. Heather Thompson Day, escritora y profesora de Denver, contó en una red social cómo puedes poner en su lugar a los entusiastas de hacer bromas sobre faldas cortas o peculiaridades de la figura femenina.
Genial.guru quedó impresionado con las acciones sencillas y útiles que pueden hacer que un bromista desagradable se avergüence y guarde silencio. Te proponemos seguir el ejemplo de estas personas.
La mujer compartió sus trucos en Twitter y, en tan solo un par de semanas, su publicación recopiló más de 550 mil “me gusta” y fue compartida 130 mil veces. Todo esto sucedió debido a que este problema es habitual para una gran parte de las usuarias de la red.
Heather destacó que su padre le enseño cómo actuar. “Me dijo: ‘Nunca te rías. Percibirán tu risa nerviosa como una aceptación a lo que ellos dijeron. En su lugar, finge que no entiendes el sentido de la broma y observa cómo te explican por qué tienes que reírte’. Desde entonces aplico tal método”. En los comentarios de la publicación, otras chicas escribieron palabras de apoyo y admiración, además de compartir sus historias y trucos de lucha contra las bromas fuera de lugar.
Una mujer escribió que Heather había actuado incorrectamente y que no tenía que reaccionar a los comentarios indecentes. Entonces, otra usuaria le dio una respuesta digna.
¿Qué hay de ti? ¿Cómo reaccionas frente a las personas que ocultan una falta de respeto detrás de una broma? Cuéntanos en los comentarios.
Comentarios
Vaya comentarios más machistas y desafortunados
“Cuéntale esa broma a tu esposa” es una respuesta muy buena
Cuando tenía 20 años y estaba a mitad del segundo año del profesorado de Inglés, tuve un problema para anotarme para un exámen. Yo estaba en la dirección y ahí el regente/director del Instituto, donde aún estudio, me dijo que no había solución y yo le dije que entonces yo podría preguntarle a la profesora, que no tendría problema. Él me respondió que no se trataba de "hablar con la profesora". Simplemente no le interesaba hacer nada. Yo insistía y tenía lágrimas en los ojos. Después me dijo que me fuera o me daría una patada y me pondría en la calle. Dijo que era chiste. Yo, considerando que la mayoría en la carrera somos mujeres, y conociendo la violencia de género, le dije: yo que usted, no haría esos chistes hoy en día. El muy psicópata me dijo: "sólo quiero que te rias". Yo lo miré con desprecio. Al final, él habló con la profesora y ella no tuvo problema. Él salió del aula y me dijo: "ves que no soy malo". Un caradura! Y jamás le llamé "malo" ja ja. ¿Cómo alguien así es director?
Mi compañero y superior me dijo en nuestro puesto de trabajo que a mi marido le habían dado una paliza, le conteste que esa bromista como le sentaría a su mujer, el muy subnormal no me habla desde ese momento nunca se disculpo el patán, me lleve tal sofocon ante la noticia macabra, tenía que haberme dado de baja laboral y hacer un imforme, hubiera tenido que dar muchas explicaciones a su superior y se le hubieran puesto de corbata.

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