En la mayoría de las ilusiones ópticas y fotográficas, lo que vemos ante nuestros ojos contradice las leyes de la física y la realidad. Pero si prestamos suficiente atención a lo que vemos, descubriremos la realidad en lugar de la ilusión. Y podemos estar tan sorprendidos que caemos en una trampa, al ver algo que nunca estuvo allí en primer lugar. La razón detrás de esto puede ser el hecho de que a los humanos les gusta que los tomen por sorpresa, ya que podrían aprender algo nuevo.
“De pronto flash, la chica del bikini azul” dice una de las canciones más populares de Luis Miguel. Muchas especulaciones surgieron sobre quién era la verdadera chica sobre la que habla el famoso cantante en ese hit, pero un usuario de internet encontró fotos viejas de su madre ¡junto a Luismi! y no dudó en compartirlas para que todos puedan sacar sus propias teorías.
A menudo nos encontramos con objetos que parecen ser una cosa, pero que en realidad son otra. Esto puede generar confusión y sorpresa, especialmente cuando la función del artículo no es clara a primera vista. Lo interesante es explorar diferentes elementos y ver cómo podemos llegar a confundirlos. Prepárate, porque hay muchos objetos que tienen una capacidad asombrosa de engañar y asombrar a nuestros ojos. ¡Comencemos!
Nada es peor que emocionarse con algo que hace tiempo hemos querido comprar y que, cuando finalmente lo tenemos, no es ni la sombra de lo que imaginamos. Aunque no es algo muy común, hay algunas personas que parecen tener la suerte al revés y han experimentado el sinsabor de una expectativa que fue aplastada por la cruda realidad.
El mundo está lleno de cosas extrañas, desde caprichos de la naturaleza y construcciones raras hasta ideas locas de personas que sorprenden por su originalidad. Gracias a los oportunos usuarios que sacan sus cámaras en el momento preciso, podemos, al igual que ellos, levantar nuestras cejas de sorpresa al ver tales rarezas.
Hoy en día, es de lo más común hacer pedidos por teléfono, desde internet o incluso por mensajería instantánea. Nuestras ciudades, de hecho, están repletas de vehículos que se encargan de repartir los millones de pedidos. Si bien es cierto que la mayoría de los repartidores hacen su trabajo de maravilla, hay otros que podrían compararse con algunos de los trabajadores de equipaje de los aeropuertos: sabes cómo dejas la maleta, pero no cómo ni dónde la recogerás. Con el reparto ocurre algo similar; cuando llegue a tu puerta lo que ordenaste, podrías llevarte una “linda” sorpresa.
Muchas veces, la escena de una película puede impactarnos tanto que se nos queda grabada en la memoria. Podríamos pensar que las interpretaciones de los actores son tan magistrales que han tenido que ensayar mucho para lograr un momento perfecto en pantalla; sin embargo, para nuestra sorpresa, a veces esas actuaciones surgen de la espontaneidad y resultan ser mejores que lo que estaba en el guion. Aquí algunos ejemplos.
Hay personas que definitivamente nacieron para estar juntas. No solo congenian sus personalidades, sino que además nos transmiten una armonía que está más allá de lo que las palabras pueden explicar. Pero hay otras parejas que, por más que lo intenten y le pongan voluntad, no logran conectarse. Por lo tanto, siempre es preferible esperar a que llegue tu media naranja antes que forzar una relación que no te convence.
Seguramente has vivido una situación vergonzosa en la que hubieses preferido que te tragara la tierra. La buena noticia es que nos ha pasado a todos, y probablemente nos sucederá de nuevo. Además, en el futuro siempre tendremos una historia divertida para contar. Algunos podrán decir que rompieron la ducha de un novio reciente, o hasta que felicitaron a una mujer embarazada ¡que no estaba esperando un hijo! De cualquier manera, tendrán ese recuerdo para siempre.
Muchos conocemos el sentimiento de cuando no esperas que suceda nada especialmente bueno, y de repente recibes una sorpresa que revoluciona tu día. Los protagonistas de hoy son personas comunes y corrientes que estaban ocupadas con sus tareas cotidianas cuando de repente descubrieron algo que les hizo pasar por toda una gama de emociones. Algunos de estos acontecimientos pueden sorprenderte, mientras que otros pueden hacer que te des una pequeña palmada en la cara, pero ciertamente no te dejarán indiferente.
La mayoría de las personas pasan gran parte del día rodeadas de comida, ya sea preparándola o sencillamente comiendo. Lo que es seguro es que al menos 3 veces al día estamos con ella. Sin embargo, algunos corren con la suerte inesperada de encontrarse con una pequeña sorpresa en el aspecto de los alimentos, lo que definitivamente les da un toque divertido y curioso.
Hay ocasiones en que percibimos cosas que parecen increíbles, coincidencias que nos hacen tallarnos los ojos de asombro y que no creeríamos de no ser porque ahí estaba una cámara para capturarlas.
Tratándose de una fiesta de bodas, el atuendo indispensable, sin dudas, es el vestido de novia. Y para tener ese look de ensueño, algunas mujeres no tienen pudor en comprar la prenda más cara y lujosa. Sin embargo, otras prefieren economizar y optan por conseguir ropa de segunda mano, con lo que prueban que verse elegantes gastando muy poco es completamente posible.
Hoy en día es algo muy común ver que existen aplicaciones de prácticamente cualquier cosa en las que puedes comprar y ellos te llevan lo que pediste hasta tu hogar. Esto ha ayudado mucho a las personas, porque así no tienen que salir de casa; sin embargo, aun con tanta tecnología, suele haber confusiones en los pedidos.
La interjección “¡Guau!”, utilizada para describir sorpresa y admiración, tiene orígenes escoceses y se remonta al siglo XVI. Cientos de años después, todavía usamos la misma palabra cada vez que vemos algo increíble y no podemos encontrar otra forma de describirlo.
A veces, la vida nos mima con un regalo fantástico sin previo aviso. Algunas personas piensan que estos obsequios se dan por casualidad, mientras que otras creen que el universo ha esperado el momento adecuado para recompensarnos por una buena acción que hicimos en el pasado. En cualquier caso, siempre es grato recibir una sorpresa agradable que alegre un día normal y nos tome desprevenidos.
A todos nos ha pasado que perdemos algún objeto que está a simple vista y nos resulta imposible encontrarlo. Quizás las experiencias de los demás nos sean útiles para estas ocasiones: tal vez nos brinden algún consejo, nos inspiren para encontrar algo extraviado hace mucho, o simplemente nos levanten el ánimo y nos devuelvan la esperanza.
Sucede que, a veces, actuamos o decimos algo sin pensarlo demasiado. Luego notamos que los demás nos miran con los ojos bien abiertos y una expresión de sorpresa en su rostro, y caemos en la cuenta de que metimos la pata hasta el fondo. Inmediatamente, el bochorno nos invade y deseamos desaparecer por arte de magia. Esta situación es bastante común, y suele generar historias que provocan una buena ráfaga de carcajadas.
Cuando decidimos tomarnos el trabajo de ordenar el ático o el sótano, es probable que inesperadamente hallemos varios objetos de antaño, y por unos instantes nos sentimos como si viajáramos en el tiempo. Puede que algunos de estos hallazgos nos transporten a una época en la que quizás aún ni habíamos nacido.
Dicen que las casas tienen sus propios alma y rostro. Todos los hogares cuentan con secretos y peculiaridades. Algunos de ellos se quedan con un recuerdo de sus dueños anteriores, mientras que otros secretos se ocultan allí desde el momento de su construcción.
Algunas personas presentan sus regalos sin cubrirlos, es decir, tal como fueron comprados. Otros los envuelven con un bonito papel y les ponen un lazo. Y también hay otro tipo de gente que se toma la molestia de hacer que el envoltorio del regalo parezca algo distinto de lo que hay dentro de la caja. Desde luego, tiene un aspecto impresionante. ¡Y la “sorpresa” que lleva adentro es aún más genial!
Algunos esperan con ansias las fiestas de Año Nuevo: compran el árbol de Navidad con antelación, miran videos que enseñan a maquillarse con brillantina, preparan un largo menú y corren por los centros comerciales, comprando regalos para amigos y familiares. Otros, en cambio, consideran sinceramente que la tarde y la noche del 31 de diciembre son un momento ordinario y no entienden a qué viene tanto alboroto.
La sorpresa es la emoción más corta: dura solo unos segundos como máximo. No importa de dónde seamos, cuando algo nos sorprende, hacemos la misma expresión universal: nuestra mandíbula cae, nuestras cejas se elevan y, de vez en cuando, puede seguir un grito ahogado. A veces, las cosas pueden sorprendernos porque son totalmente diferentes a lo que imaginamos. Las personas de esta selección tienen el superpoder de convertir una sorpresa negativa en positiva, riéndose de ella, y queríamos que te unieras a la diversión.
Expectativa, nervios, dudas, malestares y muchos cambios: cada mujer, o incluso cada pareja, experimenta el embarazo como un mundo aparte. Los siguientes futuros padres sin duda han demostrado que los nueve meses de espera pueden resultar muy divertidos y estar llenos de sorpresas.
En nuestro día a día, nos podemos encontrar con cosas o con detalles que nos llamen la atención, como por ejemplo, algún mensaje oculto en un empaque de comida o las buenas acciones de desconocidos que nos alegran el día. Sin embargo, existen momentos en que también nos podemos llevar una sorpresa que, en lugar de sacarnos una sonrisa, nos haga preguntarnos cómo es que pueden darse este tipo de situaciones.
Tan pronto como aparecimos en la vida de nuestras madres, ellas desarrollaron cualidades especiales: ingenio extraordinario, sentido del humor y lógica peculiares, comprensibles solo para ellas. Uno solo puede sorprenderse de cómo nos “enseñaban” a ordenar la habitación de tal forma que nosotros mismos nos alegrábamos de hacerlo. O qué alturas increíbles alcanzaban en el arte de presentar regalos. Y se pueden escribir leyendas sobre sus indescriptibles fracasos.
La satisfacción que se siente al ver felices a nuestros seres queridos no se puede comparar con nada, más aún cuando esa alegría llega por una sorpresa o regalo que llevamos tiempo preparándoles para demostrarles cuán especiales son para nosotros y cuánto los queremos.
Normalmente, uno está tan acostumbrado a ver protagonistas de telenovelas con belleza envidiable que sin duda, cuando tienen una apariencia de “patito feo”, es toda una sorpresa. Pero a veces los personajes transitan por muchos sucesos que se pueden reflejar no solo en sus diálogos o en su forma de actuar, sino también en la forma en la que se ven. Así que cuando hacen un cambio drástico de apariencia, los fanáticos deben prepararse, porque seguramente la historia también cambiará, y mucho.
Conocer a alguien o encontrarse con un amigo, un familiar o un héroe de la infancia por primera vez puede provocarnos una variedad de emociones: desde sorpresa o desencanto hasta alegría y satisfacción. Pero, pase lo que pase, una cosa es cierta: este tipo de reuniones resultan inolvidables.
Nuestro cerebro sabe trolear. Le encanta hacer sorpresas en forma de ilusiones ópticas, o puede “no ver” el objeto que está justo frente a nuestros ojos, especialmente cuando es necesario encontrarlo en ese preciso momento.
En la eterna batalla de la expectativa contra la realidad, muchas veces salimos perdiendo, ya sea porque estamos pidiendo demasiado o porque la fortuna no estuvo de nuestro lado. Sin embargo, hay ocasiones en que somos bendecidos con una grata sorpresa, que en el caso de la comida, vale la pena compartir con el mundo.
La moda a menudo nos sorprende a todos. A veces, se trata de una sorpresa agradable, seguida de admiración y del deseo de correr inmediatamente a la tienda. Y en otras ocasiones, lo que crean los diseñadores parece tan ambiguo y poco claro que es inevitable que nos surjan un par de preguntas al respecto de estas “obras maestras”.
A algunas personas les gustan los interiores inusuales y disfrutan viendo la sorpresa en las caras de sus invitados. Y otros prefieren la practicidad y no piensan en nada de eso, hasta que tarde o temprano se mudan a una nueva casa y encuentran allí una curiosidad, dejada por los anteriores propietarios. Y esto es absolutamente normal. Al fin y al cabo, todo el mundo es diferente y cada uno de nosotros crea su propia historia con las cosas de las que se rodea.
Algunas personas nacen con un factor sorpresa, algo que las hace únicas. Así son los protagonistas de este artículo, cada uno de los cuales nos sorprende con su apariencia. Muchos de ellos pueden llamar la atención por su fuerte genética, cautivándonos con sus ojos pecosos, sus unicejas y sus marcas de nacimiento. Pero, por supuesto, todos tenemos algo especial que nos distingue de los demás.
La señora fortuna es una dama cambiante. A veces no logramos atraparla durante tanto tiempo que comienza a parecernos que la vida se compone únicamente de períodos negros. Por ejemplo, cuando por la mañana todo se cae de las manos, las compras en Internet se convierten en una gran decepción, y el asiento junto a la ventana de un avión no tiene la correspondiente ventana. Pero, como si nos rehabilitara de las desgracias pasadas, la fortuna a veces nos arroja unos bonos que no esperábamos en absoluto.
Maria Yudakova es especialista en etiqueta. En sus publicaciones, explica cómo comportarse cortésmente con otras personas sin olvidarse de uno mismo. Ella cree que la etiqueta no es una especie de conocimiento sagrado para la élite, sino que está disponible y es necesaria para todos. María habla con palabras sencillas y mucho humor sobre las reglas que rigen nuestras vidas.