18 Fotos que demuestran que no hay pacientes más simpáticos que los animales

Ser veterinario es un trabajo difícil. A los veterinarios les resulta imposible enterarse por sus pacientes de lo que les preocupa, deben entenderlo sin palabras. Pero al mismo tiempo, todas las dificultades de esta profesión siempre se compensan con una montaña de satisfacciones.

En Genial.guru mostramos y demostramos que el día a día de un veterinario no consiste solo en mordeduras y arañazos, sino también en mil razones para sonreír.

1. El gatito espera a que el médico complete el papeleo

2. “Mi papá veterinario atendió a este gato montés”

3. Tenía miedo del veterinario y decidió esconderse

4. Algunos pacientes no pierden su elegancia bajo ninguna circunstancia

5. “Nuestra clínica está cerrada durante el fin de semana y no creo que esta preciosidad pueda responder a los mensajes”

6. “Mi novia es veterinaria. Así es como la encontré hoy después del turno de noche”

7. “Él es un visitante VIP en nuestra clínica. Siempre tiene una habitación de lujo cuando se queda por un día”

8. “Mi madre me acaba de enviar una foto de uno de sus nuevos pacientes”

9. “Soy veterinario desde hace 10 años, pero es la primera vez que atiendo a un dinosaurio”

10. “Mi gato no quería estar con el veterinario, así que escondió su cabeza en el hoyo de los residuos”

11. “Mi novia veterinaria me envió esto”

12. Cachorro de bolsillo

13. Un día en la vida de una veterinaria

14. “Esperando en urgencias con la esperanza de que mi dulce niña esté bien”

15. “El veterinario puso una advertencia en la medicina de mis perros para que no manejaran maquinaria pesada ni condujeran mientras estuvieran enfermos”

16. “La primera visita de Pablo al veterinario”

17. “Los ojos del gato después de que el veterinario le diera la medicina”

18. “Mi gato antes y después de llevarlo al veterinario para las revisiones periódicas. ¿Ves la diferencia?”

¿Tienes una mascota? ¿Cómo se comporta en la consulta con el veterinario?