En la edad adulta, ya no creo en ningún cuento de hadas. Efectivamente, qué milagros puede haber, cuando tienes un trabajo, hijos y quehaceres domésticos. Pero, en realidad, los magos viven justo a nuestro alrededor. Es gracias a ellos, de repente, encontramos cosas muy queridas y el elevador siempre llega a tiempo. Pero estos magos guardan sus secretos con mucho cuidado.
Si eres dueño de un perro como yo, sabrás lo difícil que puede ser que se quede quieto mientras le cortas las uñas. Muchas veces se sienten incómodos cuando debes ocuparte de ciertas partes de su cuerpo, especialmente la cola, las patas, las orejas y la boca. ¿Qué tal si pruebas con un poco de mantequilla de maní? Casi siempre funciona como premio. Si recortas las uñas de tu perro con frecuencia, las golosinas lo ayudarán a asociar todo este proceso con la obtención de algo agradable una vez que hayan terminado. Con el tiempo, puede que hasta notes que a tu perro le entusiasma que le corten las uñas.
Entonces, tienes un nuevo cachorro. Pero cuanto más tiempo estás cerca de él, más empiezas a preguntarte: ¿mi perro es raro? Desde lamer el sofá hasta olfatear a otros perros “allá atrás”, el comportamiento de tu mascota puede dejarte un poco confundido. Veamos algunas de las cosas más extrañas que hacen los perros y averigüemos por qué las hacen, y si alguna de ellas es motivo de preocupación. “¿Por qué mi perro lame los muebles?”.
Los gatos adoran todo tipo de masajes y caricias, pero hay zonas específicas en las que les gusta más. Muchos gatitos cierran los ojos y empiezan a ronronear, durmiéndose lentamente mientras les frotas la parte superior de la cabeza, las mejillas o el puente de la nariz. Y mientras cabecean, bostezan, por supuesto. Los científicos no están seguros de las razones que explican los bostezos de los gatos, pero la principal parece ser similar a la de los humanos: cuando el cerebro necesita más oxígeno para mantenerse despierto, la forma más fácil de conseguirlo es un bostezo grande y profundo. Por eso, cuando un gato lo hace, puedes estar seguro de que quiere quedarse dormido.
Probablemente has escuchado historias sobre personas que rescatan perros o gatos. Algunas personas incluso han rescatado desde ardillas hasta elefantes. Bueno, Elena Larrea también es una rescatista. Ella se dedica a salvar caballos y equinos en general, pero lo peculiar acerca de esta activista, no es lo que hace, sino cómo lo hace. Resulta que la mejor manera que encontró para solventar su refugio, fue uniéndose a la plataforma de contenido para adultos, Only Fans. Aquí te contamos su historia.
Las personas caminan por el mismo lugar cuando están estresadas, y los perros también. ¿Alguna vez viste que tu perro daba vueltas por la sala del veterinario mientras esperaban su turno? Es una señal de estrés. El camino de tu amigo peludo suele repetirse y repetirse. Una vez que tu perro ha sido examinado, normalmente sacude el cuerpo. En cierto sentido, tu mascota literalmente está sacudiéndose el estrés.Los perros son más propensos a perder pelo cuando se sienten ansiosos. Afuera podría resultarte más difícil notar todo el pelo que tu mascota deja atrás, pero en la mesa del veterinario se vuelve bastante obvio. Es probable que tu perro jadee después de un largo paseo en un día caluroso, pero esto también puede ser producto de otras cosas. Puede que respire agitado porque está feliz de verte, o después de haber hecho ejercicio, incluso si la temperatura de afuera es cómoda. Pero, si no sabes por qué lo está haciendo, hay buenas chances de que esté estresado.
Un año humano no es igual a un año de perro. Tal vez creas que los perros envejecen siete veces más rápido que nosotros, pero no es tan simple. De hecho, un perro que ha vivido cerca de 1 año ya tiene 31 años. Lo más probable es que para entonces ya tenga sus propios cachorros corriendo por la casa. Pero aquí es donde las cosas se complican: 2 años humanos no implican que tu perro tiene 62 años. Tu amigo necesitará unos 4 años humanos antes de alcanzar una edad avanzada. Un perro de 4 años tiene unos 50 años, pero un perro de 7 años tiene 62 años, y uno de 8 tendrá solo 64.En otras palabras, envejecen más rápido, pero también más lento a medida que pasa el tiempo. ¡La próxima vez que celebres el cumpleaños de tu mejor amigo, asegúrate de poner muchas velas en el pastel y de comprar más regalos de lo normal! Creer que los perros no ven colores es un error común. No es así, pero tampoco ven las cosas como nosotros. Tienen problemas para diferenciar los rojos y los verdes, los perciben como una mezcla de tonos grises, marrones, azules y hasta amarillos.
Los gatos pueden envejecer significativamente en tan solo dos o tres años. Sin embargo, a pesar de que solíamos creer que los gatos eran considerados “adultos mayores” a los ocho años, las circunstancias han cambiado y cada vez es más común que los veterinarios atiendan a animales que alcanzan los veinte años. Los expertos también sostienen que la vida de un gato puede dividirse en seis etapas, en las cuales es importante ajustar sus cuidados.
Si fuera necesario, seríamos capaces de correr hasta la luna y luego regresar con tal de ver bien a nuestra mascota. Sin embargo, aunque nuestras intenciones sean las mejores, no siempre sabemos cuál es la mejor forma de ayudarlas cuando tienen un problema. Por ejemplo, si se les clavó una espina en una pata o queremos saber cómo proceder ante alguna emergencia. Por suerte, con un poco de información podemos estar preparados para los imprevistos; al menos hasta que podamos consultar con un especialista.
Desde que alguien nos regale nuestro dulce favorito porque se acordó de nosotros cuando lo vio hasta acompañarnos en un momento importante sin que se lo pidamos: la lista de maneras en las que alguien nos puede expresar su afecto o aprecio es infinita. Y dado que no existe una regla acerca de cómo y cuándo debe suceder, muchas veces nos llevamos la sorpresa de recibir un gesto de cariño sin esperarlo.
Son suaves, grandes compañeros y hacen pasar ratos muy divertidos a su lado. Quienes tienen un perro saben que el sumarlos a la familia conlleva una gran responsabilidad. Además de cariño, necesitan atención a su bienestar. Lo primordial es visitar a un veterinario, pero también podemos estar conscientes de los riesgos que corren nuestras mascotas para darles un mejor cuidado, estar atentos y saber si algo anda mal.
Un cambio siempre es estresante, sobre todo las mudanzas, porque implican moverse no solo de casa, sino también modificar la rutina del hogar. Y si compartes tu espacio con un ser especial, como un perro o un gato, el mudarse puede resultar igual de estresante para ellos, ya que cambiarás su mundo sin poder explicarles por qué.
Muchos dueños de mascotas saben que sus animalitos a menudo temen ir al veterinario, así como las personas tienen miedo de ir al dentista. Pero algunos médicos saben cómo crear una atmósfera tan acogedora que los amiguitos peludos de cuatro patas no tienen ningún problema en quedarse más tiempo en el consultorio.
Un día, miramos nuestro living, nuestra terraza o nuestro balcón y pensamos que les falta más verde. En ese mismo momento nos proponemos visitar un vivero y comprar plantas que los decoren y los llenen de colores. Finalmente llega el día y recorremos los pasillos del local buscando las flores más coloridas y las plantas más fáciles de cuidar. Pero quizás en el entusiasmo, elijamos la menos indicada y nos estemos llevando un enemigo a casa.
Para muchas personas, los perros no son solo animales de compañía, sino verdaderos miembros de la familia. Ya se ha dicho: los perros no son toda tu vida, pero la completan. Podemos amarlos tanto como a nuestros padres o hermanos, y queremos lo mejor para ellos. Pero, a veces, en nuestro afán por darles lo mejor, podríamos llegar a cometer errores que pueden lastimarlos o estresarlos.
Trabajar en una tienda de animales tiene su propia rutina diaria: detener las fugas de hámsteres, atrapar a los pájaros que se han escapado y tratar de guardar las apariencias cada vez que los clientes hacen algo fuera de lo común. Pero ante todo, trabajar con animales es una vocación, por eso creemos que los empleados de las tiendas de mascotas tienen un gran corazón.
Ser veterinario es un trabajo difícil. A los veterinarios les resulta imposible enterarse por sus pacientes de lo que les preocupa, deben entenderlo sin palabras. Pero al mismo tiempo, todas las dificultades de esta profesión siempre se compensan con una montaña de satisfacciones.
No come pescado, pero con mucho gusto mastica pepinos y malvaviscos. Se niega a comer el alimento recetado por el veterinario, pero mira atentamente el plato con sopa de su dueño. Al parecer, estos problemas los han tenido casi todos los amos de peludos bigotudos.
Cuando tenemos una mascota en casa, es imposible no consentirla. Pero, a veces, al salir a comprar sus cosas, nos encontramos con artículos en los que es mejor no gastar dinero.
Dar la bienvenida y estrenarse como mamá o papá de un cachorro sería como subirse a una montaña rusa, las sorpresas son inagotables. Es importante informarse y planificarse con responsabilidad, conociendo lo que es capaz de hacer el perro en cada una de las etapas de sus primeros meses de vida y acompañarlo con voluntad y alegría.
Al tener una perrita en casa, es importante conocer las etapas de su desarrollo. Una de estas es cuando alcanza la madurez sexual o tiene su primer celo. Llegado ese momento, podrá reproducirse si no ha sido esterilizada. Sus dueños deben saber que, en esos días, su pequeña presentará cambios físicos y de comportamiento, además demandará cuidados especiales.
Amamos a nuestras mascotas, pero a menudo no tenemos en cuenta las reglas básicas de su cuidado. Queremos hacer lo mejor, pero terminamos creando nuevos problemas para nuestro pequeño pero verdadero amigo. Como resultado, la salud de la mascota puede verse afectada, y su comportamiento puede comenzar a no ser el deseado.
Cuando escuchamos la palabra “veterinario” solemos pensar en una persona que se dedica a curar a los animales. Pero hace falta tan solo un momento para darse cuenta de que el trabajo de esta gente implica mucho más que simplemente sanar algunas heridas. Puede que este sea uno de los empleos más divertidos y adorables del mundo, ya que los animales siempre son una fuente inagotable de ternura.
Una visita al veterinario es una prueba de fuerza tanto para la mascota como para su dueño. A veces puedes leer todo tipo de sentimientos en la cara de tu “hijo”. Además, no siempre son negativos. Por ejemplo, algunos traviesos de cuatro patas se emocionan en la clínica, y otros captan regiamente las miradas de admiración de los demás.
Dar regalos a una mascota es algo habitual en casa, pensando tanto en las necesidades como en un pequeño premio. Si bien muchas tiendas para mascotas ofrecen la más alta calidad, no siempre es así, pues cada mascota se comporta diferente. La ventaja es que hay tantas personas que han pasado por situaciones con sus mascotas que ahora podemos saber qué está bien y qué no al darles algo nuevo.
Todos recordamos esos errores tan vergonzosos que cometimos en nuestros primeros empleos; pues eso le acaba de suceder a un pasante de HBOMax, quien envió por error unos correos vacíos a los suscriptores de la plataforma. En un tuit la empresa pidió una disculpa por el incidente y a partir de allí, los internautas empezaron a compartir las historias de los descuidos que tuvieron en sus primeros trabajos, como regar el té sobre los clientes o tumbar una plataforma en línea de música a nivel mundial.
Hay ciertas cosas acerca de vivir con un animalito que nos hacen sentir que tratamos con un niño pequeño. A la gran mayoría de las mascotas, hay algo que les causa molestia e incluso hasta terror: ir al veterinario. Hay que admitirlo, ¿quién no teme ir al médico? Aunque este puede no ser el mejor amigo de todos, siempre hará lo posible por tener sanos y fuertes a nuestros peluditos.
Muchas personas son buenas para las matemáticas, otras tienen un talento increíble para el arte o el entretenimiento. Pero hay gente que posee una habilidad extraordinaria en cosas comunes o que podrían parecer extrañas. Por ejemplo, caminar sigilosamente hasta el punto de no ser percibido, o tal vez una memoria impecable que solo sirve para recordar los horarios de clase de nuestros amigos.
Cuando elegimos una mascota, queremos que sea inteligente, amable y obediente. Y lo más importante, que tenga buena salud. Por supuesto, una buena genética no descarta los problemas que puedan surgir a lo largo de la vida del animal. Pero hay razas de perros que son menos propensas a las enfermedades peligrosas. Y con las visitas regulares al veterinario y el conocimiento de la raza, puedes disfrutar de un compañero de cuatro patas feliz y sano durante mucho tiempo.
De repente, tu gato comienza a tener un comportamiento diferente del habitual, y hasta te da la sensación de que está triste o deprimido. Suele suceder después de un cambio brusco en la rutina familiar, como una mudanza, el nacimiento de un bebé o el fallecimiento de un miembro de la familia o un compañero del animal. Tú más que nadie conoces a tu mascota y sabes que algo no anda bien con ella. Y sí, tus percepciones no están erradas. Los gatos pueden padecer depresión, y es bueno aprender a identificarla a tiempo.
Jonathan Oziel tiene siete años y es conocido en su natal Monterrey, México, como el dueño de “Bien bañado WOW”. Su negocio, en donde baña perros para ahorrar dinero y convertirse en veterinario, se volvió popular luego de que el dibujo con el que lo promociona se viralizara en redes sociales. En el anuncio, el pequeño explica los detalles de su servicio y garantiza que los peludos, además de limpios, quedan felices.
“¡Consigamos un gatito! ¡Mira qué linda pelotita esponjosa!”. Muchos, al ver una foto de un pequeño gatito bebé, ceden al impulso y salen a elegir un amigo de cuatro patas, pensando que seguirá siendo un pequeño bulto inofensivo. Pero con el crecimiento también llegan algunas dificultades y las peculiaridades del cuidado se vuelven evidentes: un gato necesita ser peinado constantemente; otro, por el contrario, necesita que le compren ropa de abrigo. Y con algunos gatos incluso es bueno salir a pasear.
Hay algo que todos los dueños de gatos aprecian, y es el hecho de que estos animalitos sean tan limpios. En la mayoría de los casos, es muy sencillo enseñar a un minino a usar una caja de arena para hacer sus necesidades. Sin embargo, de vez en cuando puede presentarse un problema que suele desconcertarnos: nuestro precioso amiguito peludo deja charquitos de orina por toda la casa, la cual rápidamente comienza a oler mal. ¿Por qué lo hace?
La limpieza bucal de perros y gatos es necesaria para evitar la acumulación de bacterias en la superficie de los dientes tras cada comida y la posterior formación de sarro. Ambos casos pueden derivar en el mal aliento de nuestras mascotas. Sin embargo, seguir una rutina de higiene dental ayudará no solo a reducir el olor desagradable, sino también a evitar futuros problemas de salud.
Son parte de nuestra familia, pero pocos sabríamos qué hacer para ayudarlos en caso de emergencia. Un episodio de alergia de nuestra mascota, por ejemplo, puede hinchar su garganta hasta sofocarla. O un simple corcho de botella podría bloquear su respiración. Ellos son nuestros leales compañeros y por eso merecen nuestros mejores planes de acción y nuestros cuidados si una emergencia lamentable llegara a surgir. Preparémonos para ayudarlos.
En la cultura popular, suele decirse que los gatos tienen siete vidas. Aunque sabemos que este dicho no es real, sí es común pensar que, por su gran habilidad y agilidad para ejecutar saltos, es difícil que los gatos pierdan el equilibrio. Sin embargo, esta es una creencia equivocada, pues una de las principales razones por las que los gatos son llevados de emergencia al veterinario es el síndrome del gato paracaidista.