La tecnología nos ayudó a comparar a 10 animales con sus antepasados

La selección natural, la capacidad para adaptarse a los cambios y las mutaciones genéticas dieron como resultado que los animales hayan ido evolucionando a lo largo de millones de años. O bien, que se hayan extinguido por diversas razones. La paleontología es la ciencia que, entre otras cosas, estudia organismos extintos y los relaciona con los actuales.

Aunque los paleontólogos desde siempre han comparado a los animales modernos con sus ancestros, ahora cuentan con una excelente herramienta: la Inteligencia Artificial. ¿Qué piensas que le ocurrirá a tu animal favorito en los próximos miles de años?

1. Perro

Los paleontólogos han determinado que el origen de los cánidos (perros, chacales, lobos, zorros) se remonta a unos 60 millones de años atrás. Tal vez uno de los primeros cánidos fue el Miacis, un pequeño mamífero de aspecto similar al de una comadreja que habitó el continente que hoy conocemos como Asia.

2. Gato

En un trabajo científico de 2017 se comparó el ADN presente en los huesos fosilizados del famoso felino Dientes de Sable con el material genético de los gatos domésticos, y se llegó a la conclusión de que ambas especies comparten un ancestro común, a pesar de que los separan unos 20 millones de años. Tal vez es por este motivo que nuestros gatos se ven tan orgullosos.

3. Gallina

En el 2020 se descubrió un fósil único que, según los investigadores, sería un pariente muy cercano del grupo al que pertenecen las gallinas y los pavos actuales. El fósil, que perteneció a un animal que convivió con los últimos dinosaurios, recibió el nombre de Wonderchicken y tiene un cráneo muy completo, algo bastante raro, considerando su antigüedad.

4. Elefante

De acuerdo con varios estudios, se sabe que el famoso mamut es el animal que comparte más genes con el elefante asiático. En otras palabras, aunque esté extinto hace ya varios miles años, es el pariente conocido más cercano.

Por otra parte, se sabe que el mamut convivió durante muchísimo tiempo con los humanos prehistóricos, tal como lo muestran las pinturas rupestres.

5. Jirafa

En un artículo publicado en 2022, se describe un fósil descubierto hace unos años que nos da una idea de cómo eran los antepasados de las jirafas. Se trata de una “extraña bestia” llamada Discokeryx xiezhi que vivió hace 16,9 millones de años en lo que hoy es el norte de China.

Tradicionalmente, se ha pensado que el cuello de las jirafas se alargó tanto por la búsqueda de alimento en las copas más altas de los árboles. Sin embargo, el grosor del cráneo y las vértebras del D. xiezhi sugieren que la evolución del cuello estuvo relacionada con la competencia que había entre los machos que golpeaban sus cabezas entre sí por las hembras o el territorio.

6. Hipopótamo

En 2015 se encontró en Kenia un fósil de 25 millones de años al cual se llamó Epirigenys lokonensis y que podría estar muy relacionado con los hipopótamos actuales. Según los estudios, el animal tenía el tamaño de una oveja y pesaba 100 kilogramos; es decir, la vigésima parte del hipopótamo moderno.

Hay muchísimo que no se conoce sobre la evolución del hipopótamo, y el Epirigyns sin duda será de gran ayuda para comprender cómo vivían los ancestros de este enorme animal que hoy en día habita solo en algunas partes de África.

7. Ballenas

Las ballenas azules son las criaturas más grandes que han vivido en la Tierra, con una longitud de hasta 30 metros y un peso de 200 toneladas. Sorprendentemente, no todos sus antepasados fueron enormes mamíferos marinos.

Un ejemplo famoso es el Pakicetus. Este animal habitó en lo que hoy es Pakistán hace unos 49 millones de años, y se piensa que está en la misma línea evolutiva que las ballenas, dadas las características y la conformación de los huesos, en especial los del oído; era del tamaño de un perro y podía caminar sobre la tierra.

8. Caballos

El Eohippus o Hyracotherium es un “caballito” que habitó lo que hoy es el viejo mundo y América del Norte entre unos 55 y 58 millones de años atrás. El árbol evolutivo de los caballos actuales (en el cual se incluye a los burros y a las cebras) es muy rico en especies y en variedades anatómicas. El Eohippus es tal vez uno de los primeros representantes de este grupo.

Este caballo primitivo tenía una cabeza corta y sus ojos estaban en el medio del cráneo; su espalda estaba algo arqueada y tal vez llevaba un “abrigo” a rayas para camuflarse.

9. Osos

Aunque se han encontrado varias especies de fósiles relacionados con los osos, se piensa que el pariente más cercano de los osos pardos es el oso de las cavernas. Estos animales vivieron durante el pleistoceno y se extinguieron hace 24 000 años durante el último período glacial.

Se han encontrado muchos esqueletos completos que ayudan a comprender cómo era su anatomía. En tamaño llegaban a medir hasta 2 metros, y podían pesar hasta 600 kg.

10. Águilas

En 2021 un grupo de investigadores encontró un nuevo fósil que perteneció a un águila prehistórica, tal vez una de las primeras del grupo. Esta especie llamada Acheahierax sylvestris vivió en los bosques de Australia hace 25 millones de años.

Su tamaño era algo menor que el de un águila actual de cola de cuña; sus garras, de 15 centímetros, eran lo suficientemente fuertes como para levantar un koala o una zarigüeya. Sus alas eran cortas y robustas, adaptadas para el vuelo dentro del bosque y no tanto para el cielo abierto.

El fósil fue hallado en los desiertos secos del interior de Australia Meridional, en una zona que antaño fue una selva tropical llena de una rica variedad de aves y otros animales, y por eso es uno de los lugares favoritos de los paleontólogos para buscar fósiles.

Sin duda los nuevos descubrimientos arqueológicos y paleontológicos nos ayudan a conocer mejor tanto el pasado del ser humano como el de otras especies; tal es el caso de las aves o de los tiburones. La tecnología y los adelantos, además, han derrumbado algunos mitos sobre cómo se veían varios animales prehistóricos.

Aprender cómo era la vida en tiempos remotos nos enseña a valorar nuestra fauna actual y también a luchar contra la extinción de muchas especies.