10 Reacciones de la piel que están a la vista y sus causas (que quizás desconozcas)

Mujer
hace 4 años

La piel es, sin dudas, una parte muy importante del ser humano. Sabemos que puede tener diferentes tonalidades, texturas y apariencia. Sin embargo, hay muchos datos sobre ella que desconocemos, y aun si los supiéramos, podríamos ignorar sus motivos. ¿Por qué nos ruborizamos? ¿Por qué se nos pone la piel de gallina? ¿Por qué nos bronceamos o nos quemamos con el Sol?

Genial.guru buscó en sitios especializados y encontró respuestas a todas estas dudas, además de algunos datos claves para comprender por qué la piel es imprescindible para nuestras vidas.

1. Nuestra piel se renueva por completo cada mes

Nuestra piel está compuesta por miles de millones de células. Dentro de este número, que parece incontable, entre 30 000 y 40 000 se deprenden de nosotros en forma de escamillas cada minuto. Esta sorprendente suma nos lleva a calcular que aproximadamente cada cuatro años y medio podríamos perder hasta 18 kilos de piel. ¿A dónde va a parar todo lo que perdemos? Se desprende de cada uno de nosotros de manera tan silenciosa como invisible para mezclarse con el polvo que se deposita en el piso y en los muebles de nuestra casa, el cual, si no limpiamos pronto, puede convertirse en alimento para ácaros.

Pero ¿qué sucede cuando perdemos piel, entonces? ¿Desaparecemos? No. Se trata de un proceso continuo de muerte y regeneración, el cual tarda de dos semanas a un mes. Es por eso por lo que nuestra piel se renueva por completo en 30 días, aproximadamente. Y esto significa algo más: la piel que vemos es efímera, forma parte de la capa de células muertas que están a punto de caer. Esta renovación constante también explica por qué las lastimaduras y los cortes suelen cicatrizar rápidamente y el bronceado nos dura poco.

2. ¿Por qué nos ruborizamos?

El ruborizarse es una respuesta involuntaria de nuestro organismo. Un modo en que reacciona sin que nosotros podamos hacer algo para evitarlo, sino casi todo lo contrario: cuando más queremos que no se note que estamos avergonzados, más colorados nos ponemos. Cuando experimentamos este sentimiento, la adrenalina aumenta, el corazón y la respiración se aceleran, y se dilatan los vasos sanguíneos para que la sangre fluya más rápido por nuestro cuerpo. En el rostro, los que se expanden son los capilares sanguíneos, y esto es lo que hace que nuestra cara se vea repentina e irremediablemente sonrojada.

Quien se sonroja delata quizás que ha hecho algo que “no debería” y se siente avergonzado por ello. Entonces, el rubor podría ser un pedido de disculpas de nuestro propio cuerpo por haber cometido un error social.

3. ¿De qué depende el color de la piel?

De más oscura a más pálida, la tonalidad de la piel depende de la cantidad de melanina que esta contenga, un pigmento cuya concentración es más alta en las pieles oscuras y más baja en las claras. Este responde a la luz solar haciendo que nuestra piel se oscurezca y creando una capa protectora que puede bloquear parcialmente los efectos nocivos de los rayos UV.

Según cada tipo de piel, este bloqueo será más o menos eficaz. Cuanto más pigmentada se encuentre, más oscuro será su color, porque tendrá mayores cantidades de melanina y se encontrará más protegida de los rayos solares. Esto explica por qué las pieles oscuras son mucho más resistentes al Sol que las más claras.

4. ¿Cuál es la causa de las pecas?

La melanina también es la protagonista aquí. Lo que ocurre en las pieles pecosas es que esta sustancia no se distribuye de manera uniforme, sino desigual, en pequeños grupos. Estos puntos son ni más ni menos que zonas de la piel que tienen más concentración de melanina y que se intensifican ante la exposición a la luz solar (mientras que suelen disminuir, por ejemplo, en invierno). De allí que las personas que tienen pecas puedan notar que, luego de tomar sol, estas se multiplican de inmediato. La melanina se activa en todas las pieles, solo que en estas se hace más evidente porque está agrupada en pequeños montoncitos, en lugar de distribuirse de manera pareja.

5. ¿Por qué la piel se enrojece cuando se quema con el Sol?

La melanina, una vez más, es la responsable de las pieles bronceadas. En realidad, este color tan atractivo no es más que la reacción de la piel frente a lo que considera un ataque (los rayos UV). La melanina actúa como una especie de barrera: aumenta su concentración y absorbe estos rayos para evitar un daño irreparable. Por eso nos vemos bronceados después de exponernos moderadamente al Sol.

Pero lo que ocurre es que no todas las pieles producen la misma cantidad de melanina, y, en ocasiones, esta no alcanza para evitar que estos rayos lleguen hasta capas más profundas de la piel y terminen dañándola. La quemadura se produce cuando el tiempo que pasamos expuestos al Sol, o el modo en que lo hacemos, supera la capacidad protectora de esta barrera natural. A las pieles más claras les basta 15 minutos para quemarse, mientras que las más oscuras pueden estar expuestas a la misma radiación durante más tiempo sin que nada les ocurra.

6. Nuestra piel está plagada de bacterias

En la edad adulta, en nuestra piel pueden habitar hasta 1 000 especies especies diferentes de bacterias. Estos organismos creados por nuestro propio cuerpo suelen ser buenos porque ayudan a combatir otros patógenos a los que nos exponemos día a día. Pero algunas condiciones, como factores ambientales, el paso de los años, el estrés, la ansiedad y la exposición excesiva al Sol, pueden volverlos en nuestra contra y causar diversas afecciones dermatológicas, como dermatitis, acné y rosácea.

7. ¿Por qué se nos eriza la piel?

Así como no podemos evitar ruborizarnos, tampoco podemos hacer nada para que nuestra piel no se erice cuando sentimos frío, nos sobresaltamos, asustamos, o ante una caricia, cuando escuchamos una canción que es especial para nosotros o recordamos algo vivido que nos gustó mucho. Se trata de una respuesta involuntaria de nuestro cuerpo ante ciertos estímulos, y lo que logra, una vez más, es dejarnos en evidencia. Esta es una reacción primitiva defensiva que heredamos de los animales. La piel de gallina tiene que ver con la contracción de diminutos músculos que están en la base de cada vello que recubre la piel. Ante determinados estímulos, estos se contraen provocando que el pelo “se pare”. Literalmente, “se nos ponen los pelos de punta”.

En los animales que tienen una gruesa capa de pelo, esta erección logra que se forme una “burbuja” de aire que sirve para protegerlos y aislarlos del frío. Cuanto más pelo tengan, más funcionará este recurso. Y su pelaje también se eriza cuando se sienten amenazados. Un gato con el pelo erizado y la espalda arqueada parece más grande, y esto puede servirle para ahuyentar a un enemigo. Pero en los seres humanos se produce, de manera también involuntaria, la liberación de una hormona llamada adrenalina. Y esto ocurre ante cualquier emoción fuerte, ya sea amenazante o placentera. Esta hormona es la responsable de que la piel se contraiga, el corazón se acelere y nos suden las manos. ¿Quién no ha experimentado alguna de estas sensaciones (o todas a la vez) a lo largo de su vida?

8. Emociones a flor de piel

Los seres humanos tenemos entre 6 y 10 millones de sensores táctiles que toman información que llega tanto desde el exterior como desde el interior del cuerpo. La mayor parte de estos sensores están en la piel, muchos de ellos alrededor de la boca y en la punta de los dedos. Ellos son, en parte, los responsables de que experimentemos frío, calor y muchas otras sensaciones.

El hecho de que una misma reacción (por ejemplo, cuando se nos eriza la piel) se pueda percibir como placentera (y no como una amenaza) si el estímulo es una caricia, podría tener que ver con nuestra capacidad de discernir. Nuestro cerebro nos permitiría racionalizar la situación y experimentarla de ese modo.

9. ¿Por qué la yema de los dedos se arruga en el agua?

La capa más externa de la piel está cubierta por un aceite especial que, además de humectar y proteger los tejidos, la vuelve impermeable. Cuando nos lavamos las manos, fácilmente podemos ver que el agua no penetra en la piel, sino que resbala. Esto es porque el aceite funciona como una barrera que impide que la piel se vuelva absorbente como una esponja. Pero cuando sumergimos los dedos durante mucho tiempo en agua, como cuando nadamos o nos damos un relajante baño de inmersión, ese sebo desaparece, y entonces el agua penetra la capa más externa de la piel. Como resultado, esta se llena de agua.

¿Y por qué esto hace que la piel se vea arrugada? Existen varias teorías que explican la causa de que la piel se arrugue en el agua, una de ellas sostiene que se trata de un mecanismo de adaptación: los objetos mojados pueden tomarse más fácilmente con los dedos arrugados que lisos.

10. Piel, uñas y cabello, parte de una misma familia

El pelo y las uñas son un tipo modificado de piel. Son más bien su extensión, y sirven para protegernos. El cabello crece en todas partes del cuerpo, excepto las palmas de las manos, las de los pies y los labios. Y las uñas protegen las puntas sensibles de los dedos de manos y pies.

Ni en un lado ni en el otro hay vida. Y entonces, ¿por qué crecen? Realmente no lo hacen. Lo que hace la piel nueva al crecer es empujar las células muertas (aquellas que antes han sido piel), y es este crecimiento el que hace que el pelo se mueva hacia arriba o hacia abajo, según la zona del cuerpo en la que esté. Algo similar ocurre con las uñas: las células de la piel crecen y se acumulan en las extremidades de los dedos, formando una capa sólida de queratina: ni más ni menos que la uña. Esta ausencia de vida explica también por qué no sentimos dolor cuando nos cortamos el pelo o las uñas. Es que son los nervios los que transmiten señales de dolor al cerebro, y al no haber nervios allí, tampoco hay malestar. ¿Una prueba más de que no crecen, sino que son “empujados”? Si crecieran, lo harían desde las puntas, no desde la raíz.

¿Hay algún dato que te haya sorprendido más que otro? ¿Conoces alguna otra característica curiosa de la piel que no hayamos mencionado? ¡Compártela con nosotros en los comentarios!

Comentarios

Recibir notificaciones

Lecturas relacionadas