18 Personas que se toparon con cosas raras y ahora no caben en sí de felicidad

Cuando salimos de la escuela, creemos que no nos va a tocar estudiar de nuevo. Esto no es del todo cierto, ya que siempre va a haber un niño en casa a quien tendremos que explicarle las tareas escolares. Está en nuestras manos darles las opciones y herramientas a los más pequeños para que vean que materias como matemática pueden llegar a ser divertidas de aprender.
En Genial.guru nos dimos a la tarea de pensar cómo sería más fácil enseñar a un niño pequeño las operaciones básicas de matemáticas, haciéndolas divertidas y didácticas.
Dibuja en unos palitos de helado la cantidad de fruta (preferiblemente la preferida de tu hijo) y en otros escribe números u operaciones. La idea es que el niño junte la cantidad de frutas con el número u operación correspondiente.
Corta 2 tiras de cartulina y únelas por un extremo con una tacha. Decora como la cabeza de un cocodrilo o cualquier otro animal que le guste a tu hijo. Después, coloca cereal a los lados en diferentes cantidades, para que el niño cuente cuál tiene mayor o menor cantidad. Esto ayudará a que aprenda la diferencia entre los símbolos de mayor y menor (ejemplo: 6 > 2).
La idea es hacer tarjetas con números y símbolos matemáticos, como suma, resta e igual. Luego genera diferentes operaciones para que el niño escoja la tarjeta con la respuesta correcta.
Busca una fruta que tengas disponible, córtala en mitades, cuartos, y octavos. Así ayudarás a tu hijo a hacer las fracciones más claras, mientras disfruta de una merienda saludable.
Necesitarás un folio de carpeta, una cartulina y un marcador de pizarra. Introduce la cartulina en blanco dentro del folio y escribe encima del plástico. Gracias a su superficie, servirá para poder escribir con el marcador de pizarra y borrar fácilmente con un paño.
Una de las características que tienen los dados es que sus caras contrarias suman siete. Entonces podemos enseñarles esto a nuestros hijos, pidiéndoles que piensen cuál debería ser el número de la cara contraria tirando el dado rápidamente, estimulando la agilidad mental.
Haz con cartón piezas de dominó y decóralas con las cosas que más les gusten a tus niños (por ejemplo, brillantina, su color preferido, animales, stickers). Este juego les enseñará a asociar números, y, si es personalizado, puede llegar a ser muy entretenido. También los ayudarás no solo a asociar las cifras, sino también a contar.
Las pastas con formas pueden llegar a ser de mucha a ayuda para los niños fanáticos de este platillo. La idea es usar la de números como herramienta para sumar, restar o para aprender números compuestos por varias cifras.
En este caso, no solo ayudarás al niño con las operaciones matemáticas, sino también a entender la importancia del reciclaje. Al usar vasos y cucharas recicladas, puedes hacer un juego matemático.
En los vasos debes dibujar los resultados, y en los palitos las operaciones. El niño tendrá que colocar los palitos con las operaciones en el vaso con el resultado correspondiente.
¿Conoces otro juego de aprendizaje para niños pequeños? ¿Cómo te divides las explicaciones de las tareas de tus hijos con tu pareja?