10 Objetos con funciones especiales que sus diseñadores olvidaron incluir en el manual

Pensamos que sabemos cómo funcionan las numerosas cosas que utilizamos en el día a día y a las cuales estamos acostumbrados. De muchos de estos objetos, desconocemos sus orígenes; y de otros, solo los mitos nos cuentan su historia. Sin embargo, hasta en los detalles más simples y banales podemos encontrar sorpresas.

En Genial.guru te mostramos el origen o la función oculta de muchos elementos que usamos diariamente.

1. Los dibujos del papel higiénico

El papel higiénico moderno fue inventado en 1857. Se suele creer que los diseños que trae impresos en diferentes formas y tamaños no son más que una decoración o una cuestión de mercadotecnia. Sin embargo, su propósito es el de aumentar la efectividad al momento de limpiar, ya que mejora su adherencia en cualquier superficie lisa.

2. El lado “borratinta” de la goma bicolor

Un mito escolar afirma que la típica goma bicolor nos puede sacar de un apuro si tenemos que borrar la tinta de un bolígrafo; lo cierto es que muchos de los que lo han intentado han terminado agujereando la hoja y con la triste necesidad de repetir la tarea.

Era tanto el revuelo que causaba esta duda que finalmente la marca terminó por aclarar el asunto: la parte azul era también para borrar lápiz, pero en superficies o materiales rugosos; ahora entendemos por qué tantas hojas terminaban estropeadas.

3. Los remaches en la ropa de mezclilla

¿Has notado los pequeños círculos metálicos que hay en las uniones de las prendas de mezclilla? En su momento eran de vital importancia para que las costuras de la tela pudieran soportar la presión al estirarla.

El avance en los procesos de fabricación de esta tela ha hecho que los remaches ya no cumplan esta función; ahora son principalmente un accesorio estético.

4. El orificio superior del lavamanos

Probablemente has visto los orificios que se encuentran cerca del borde superior del lavamanos. Quizá notamos su existencia, pero pocas veces lo hemos necesitado.

Se trata de un rebosadero, y su principal función es la de evitar un desbordamiento de los líquidos; también complementa el tapón del drenaje para que haya una mayor fluidez. Se puede encontrar también en lavavajillas y duchas.

5. La abertura que hay en el palito de las paletas

En la niñez más de alguno pensó que los palitos de nuestras paletas venían con una especie de “flauta” que no sonaba muy bien. La verdad es que el porqué de estos orificios siempre estuvo alejado de la música, y solo cumplen una función de seguridad.

El tubo hueco, más la pequeña salida que tiene en el borde donde se monta la paleta, tiene la función de mejorar la adherencia al palito, para que no se suelte al comerla. Con toda seguridad, esto ha evitado una gran cantidad de lágrimas y pucheros.

6. Las barras de colores en los tubos de dentífrico

El hecho de que internet se masificara tanto durante las últimas décadas dio paso a que muchas historias o leyendas se esparcieran por el mundo virtual. Uno de estos mitos afirma que la barra al final del empaque de los dentífricos indica la composición, el tipo de protección que brinda y el grado de toxicidad.
La verdad es que las máquinas de esta industria utilizan este código para reconocer cuándo cortar y sellar los envases. Y no para nombrar los componentes ni informarnos acerca de cuán nocivo para la salud es el producto.

7. Origen de los lentes de sol

Los lentes de sol cumplen funciones muy claras: no solo mejoran nuestra visión en lugares muy iluminados, sino que también protegen nuestra vista. Sin embargo, su origen está muy alejado de las playas tropicales donde la gente los suele usar.

Los primeros diseños aparecieron en dos lugares diferentes. En el norte de Canadá, a inicios del siglo XIII, los antiguos habitantes de la provincia de Nunavut diseñaron con hueso tallado algo similar a los lentes de sol para protegerse de la nieve. Por su parte, en la China del siglo XII, se utilizaban lentes con cristales ahumados para disimular las expresiones faciales durante los juicios.

8. Los márgenes de las hojas de los cuadernos

En la actualidad, los famosos márgenes de los cuadernos son impresos por una máquina, pero en otros tiempos se hacían a mano. ¿Siempre tuvieron solo la función de ayudar a escribir prolijo y de permitir que se tomen pequeños apuntes? La verdad es que no. Su finalidad inicial era evitar que los roedores se comieran la parte de la hoja que tenía información relevante, y esto continuó siendo así durante buena parte del siglo XX.

9. Los surcos de las monedas

Durante el siglo XVI, las monedas no tenían grabados en sus bordes, lo que permitía cortarles pequeños fragmentos de metal y venderlos; este trabajo ilegal se hacía de tal manera que la moneda aún pudiera utilizarse. Por supuesto, en mayor o menor medida, esta actividad terminaba por causar un daño en la economía local.
La solución fue añadir surcos en el canto que permitieran detectar si una moneda había sido adulterada. Además, esta textura ayuda a que las reconozcamos cuando están en el bolsillo.

10. La lata de refresco y su portapopote

En Better Call Saul aprendimos que si damos vuelta sobre la base una lata de gaseosa que se nos ha caído, la presión interna disminuirá y cuando la abramos, el contenido no saldrá de la lata. Por otra parte, ¿sabías que la anilla que utilizamos para abrir el envase tiene además otra función?

Si giramos la anilla sobre el orificio de la lata, podemos introducir un popote. Esta práctica, además de facilitarnos la tarea de beber, es higiénica, ya que nos permite entrar en contacto con el metal lo menos posible.

¿Conoces algún objeto de uso cotidiano que cuente con alguna función especial o no tan conocida? ¡Compártelo con la comunidad Genial!