¡Jajaja! ¡Es padrísimo ser mexicana!
10 Inusuales palabras que solo los mexicanos reconocen
No cabe duda de que el folclor mexicano se inserta, incluso, en el idioma. Actualmente y, desde la década de 1950, en México existen palabras que se usan como sinónimo de otras y que, incluso, han logrado el reconocimiento de la Real Academia Española. Estas expresiones o frases se escuchan todos los días, en cualquier parte del país, ciudad, barrio o pueblo, y son parte de la identidad cultural divertida, amable y sobre todo muy ingeniosa de los mexicanos.
Y tú, ¿qué onda? ¿Conoces el origen de otras palabras? Compártelo con nosotros.
1. Ahorita


En una dimensión paralela al “ahora” y el “en un momento”, en México existe el “ahorita”. Motivo de confusión para muchos extranjeros, esta sencilla palabra puede guardar muchas variantes que dependen del tiempo y el espacio. Por ejemplo: “¿Cuándo tendrás listo el papeleo?”. “Ahorita que me desocupe”. Y eso puede tardar diez minutos, media hora o hasta un día. Lo cierto es que el mexicano no sabe bien cómo definir el “ahorita” en cálculo termporal preciso. Lo único seguro es que sucederá, en algún momento.
2. Carnal


El “carnal” es sinónimo de hermano, tanto biológico como solo un amigo. Por ejemplo: “Juan es mi carnal de toda la vida”. En México los lazos de amistad o compañerismo son muy importantes, por ello el lazo fraterno puede considerarse así, aun cuando no se comparte un vínculo de sangre. Esta palabra se popularizó a mediados de la década de 1950, gracias al actor y cómico mexicano Tin Tán, que solía acompañarse de otro cómico llamado Marcelo Chávez, a quien llamaba “mi carnal”. También, esta palabra tiene su variante como “cuate”.
3. Chamaco


En casi todas las familias mexicanas hay “chamacos”. Esta palabra es sinónimo de “niños”. Ejemplo: “¡Ahí viene el chamaco!”. Tiene su origen en el náhuatl chamahuac que significa rollizo o de complexión robusta. Esta es una de las palabras que se quedaron en el lenguaje cotidiano. Sin embargo, en otras regiones de México puede tener variantes como: escuincle, morro, pilcate, plebe o chilpayate.
4. Chido


Palabra que se refiere a que algo, material o inmaterial, es lindo, bueno, adecuado, certero. Por ejemplo: “¡Tu auto está muy chido!”. En México corren muchas versiones sobre su creación, pero una de las que más sentido tiene es que la palabra se deriva de una jerga asturiana: xidu, que significa bueno o agradable. El “chido” actualmente se utiliza en casi todo México y ha sido una palabra que ha trascendido generaciones.
5. Cantinflear


El “cantinfleo” es algo así como la mezcla inusual de palabras o frases que no tienen que ver ninguna con la otra, o que tienen que ver mucho, pero que realmente no aportan nada de información. Es lo más parecido al pleonasmo. Por ejemplo: “Hay momentos en la vida que son verdaderamente momentáneos”. De hecho, la Real Academia Española ha reconocido “cantinflear” como verbo.
6. Neta


Esta palabra se utiliza en expresiones populares como “la neta es que no le dije nada”. Su sinónimo es: verdad. Curiosamente, esta palabra era usada en el lenguaje vulgar-popular de los obreros o las clases medias trabajadoras; sin embargo, ahora es una palabra de uso común en cualquier clase social, aunque no pierde su sentido coloquial.
7. Órale


Esta expresión manifiesta sorpresa, asombro, maravilla o desconcierto, por ejemplo: “¡Órale! No sabía que tocabas la guitarra”; aunque también puede ser sinónimo de aceptación: “Órale, ¿vamos al cine o no?”. Su uso coloquial nació en la Ciudad de México, la gran capital del país, y se extendió a las regiones más próximas del centro.
8. Pachanga


9. Pancho


Aunque en México así se les llama cariñosamente a los hombres que llevan el nombre de “Francisco”, también esta palabra se usa como sinónimo de problema o complicación. Por ejemplo: “Ya no llegué a tiempo y mi jefe me armó un pancho”. Realmente nadie sabe de dónde viene la expresión, pero se usa popularmente en todo el país.
10. ¿Qué onda?


Para decir “hola”, “¿cómo estás?”, “¿qué me cuentas?”, se utiliza “¿qué onda?”. Esta expresión tiene como referencia una corriente literaria mexicana, llamada “La onda”, nacida entre los años 60 y 70, con la cual algunos jóvenes pretendían cambiar los modos tradicionales del lenguaje para hacer los propios y así provocar una literatura cercana a ellos. Los adolescentes de clase media usaban mucho la frase, pues “estar en la onda” se convirtió en un sinónimo de vanguardia. Con el paso del tiempo, la frase también ha cobrado otros sinónimos y puede usarse para otras cuestiones como: “¿qué hay de nuevo con...?” o “¿qué pasa con....?”.
En todo México existen más palabras o frases de origen náhuatl, mestizo o popular que son únicas. Lo más interesante es cómo se han modificado con el tiempo, la historia y las transformaciones en el país.
Comentarios
No sólo los mexicanos usan esas palabras
Acá en Colombia también se escuchan bastante!

Lecturas relacionadas
25 Historias que nos hacen sentir que no todo está perdido con la humanidad

20 Personas que experimentaron el efecto bumerán

15+ Veces que la suerte llegó sin previo aviso

15 Casos en los que la vida sorprendió con su particular sentido de la ironía

16 Relatos fascinantes sobre cómo la fortuna llegó cuando nadie la esperaba

13 Historias de personas que se enfrentaron a la traición de un ser querido, pero sobrevivieron

18 Historias escandalosas que hicieron que la gente decidiera renunciar a su trabajo dando un portazo al irse

15 Internautas cuentan cuál ha sido la peor boda a la que les ha tocado asistir (algunas son dignas de una película)

16 Peculiaridades que algunas parejas no pudieron seguir ocultando al mudarse juntos

10+ Familias con historias tan impactantes que podrían volverse virales

16 Personas cuya avaricia supera incluso su necesidad de respirar

14 Personas que sufrieron una decepción desagradable por el comportamiento de sus seres queridos
