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Encontrar un nuevo trabajo no es una tarea sencilla, y aún resulta más difícil sumarse a un nuevo equipo y obtener un punto de apoyo en él. Incluso existe la opinión de que, para las células nerviosas, el estrés de la adaptación a un nuevo grupo laboral es similar al de un divorcio.
Genial.guru te ofrece los principales errores que las personas cometen cuando llegan a un nuevo empleo. Léelos y protégete de ellos cuando cambie tu situación laboral.
Cuando una persona es contratada para un puesto con el que siempre ha soñado, suele pasar que, al principio, se queda en la oficina hasta muy tarde porque, o bien el trabajo le gusta mucho, o quiere impresionar a sus superiores. Pero, pasando mucho tiempo en el lugar de trabajo, dedicándose por completo a tu profesión, puede quemar a cualquiera y muy rápidamente, y ese trabajo favorito acabará convirtiéndose en un tormento diario. Además, puede dar la impresión de que no puedes hacer frente al trabajo. Y es muy probable que nadie apreciará tu esfuerzo tanto como tú esperas.
Nunca tengas miedo de pedir ayuda si realmente la necesitas y no sabes qué hacer. Todo el mundo se sentirá incómodo en esta situación, pero será mucho mejor si se consulta a una persona con más experiencia que cometer un error, un error que luego tendrá que ser corregido. Además, pedir ayuda no es una señal de debilidad, sino todo lo contrario. Es mejor hacer una pregunta y evitar un error, que lidiar con las consecuencias.
Al mismo tiempo, no debes preguntar al jefe y al resto del equipo por cualquier nimiedad, debes aprender a resolver problemas pequeños y ser autosuficiente en este sentido. Así, aumentarás las posibilidades de pasar con éxito el período de prueba y demostrar que eres un buen especialista en la materia.
El nuevo equipo no se merece que el novato comience su andadura contando penas sobre su vida tan compleja, una vida en la que le falta tiempo para todo, dinero, salud y así sucesivamente. Muchas veces, estas historias no generan para nada simpatía en los demás, por el contrario, se percibe a esta persona como alguien poco fiable que no es capaz de hacer frente a sus problemas y resolverlos.
Siempre es importante recordar que, si alguien te critica, esto no significa que quiera culparte de todos los problemas. Las críticas incluso pueden ayudarte a fortalecerte y crecer profesionalmente. Si te indicaron algunos errores, no debes tomarlo personal, sino recordarlos para no repetirlos en el futuro.
Al comunicarte con el nuevo equipo, es mejor no emplear frases del tipo "¿Y cómo lo hacen ustedes?" o "¿Y para qué lo hace su oficina?", porque esa división entre el "yo" y "ustedes" creará una barrera psicológica entre el novato y el resto del equipo.
Si un lugar nuevo parece completamente diferente, y algunas veces incluso más complicado, una persona puede compararlo constantemente con su empleo anterior, el cual parecería mejor. Si tus compañeros no te preguntan sobre cuáles fueron las condiciones y obligaciones en tu último lugar de trabajo, entonces mejor no comparar si no hay necesidad. De lo contrario, será difícil evitar que te miren de reojo.
No importa en absoluto qué puesto ocupa el nuevo empleado, incluso si este es el puesto más alto, uno siempre debe ser flexible y tener la mente abierta. Un verdadero profesional está dispuesto a realizar cualquier tarea, incluso si a veces no forma parte de sus obligaciones, por supuesto, siempre con sentido común. Así es más fácil convertirse en parte de este nuevo equipo y no ganarse enemigos innecesarios al llegar.
Es mejor no obsesionarse con tus ideas, que pueden parecer muy importantes e incluso ideales si funcionaban perfectamente en tu empleo anterior. Antes de tratar de mejorar el proceso de producción, primero debes conocerlo con detalle.
Si en tu nuevo lugar de trabajo el equipo suele comunicarse vía chat, vale la pena unirte a ellos. Esto te ayudará a establecer una relación con el nuevo equipo, sobre todo al principio. Así, te será más fácil asegurar tu propio crecimiento, aumentar tu rendimiento, conocer mejor a tus compañeros y aportar algunas ideas compartiendo tus impresiones.
Si cuando te contratan estás satisfecho con todo y al pasar un par de días quieres respirar aliviado, eso no es exactamente lo que deberías hacer. No vale la pena relajarse y esperar a que aquí todo se haga muy fácilmente: uno necesita desarrollarse más, obtener nuevos conocimientos, leer y actualizar todo lo que sabe, interesarse por las innovaciones relacionadas con su empleo, asistir a seminarios y cursos, así como talleres con profesionales de un mayor nivel. Si tienes la sensación de que tus conocimientos están por debajo del nivel de exigencia del puesto, entonces no debes irte inmediatamente y renunciar, porque todo acaba llegando con la experiencia. Tal vez solo necesites un poco más de tiempo.