11 Tips que pueden ayudarte a conjuntar prendas “vintage” con tu vestuario

La moda vintage se impuso con fuerza hace algunos años y, en muchos casos, también ha invadido el guardarropa de algunas. ¿Cuántas veces nos ha pasado que no sabemos cómo combinar esa camisa lencera o esos zapatos que compramos en un mercado de segunda mano? Probablemente, la clave de esta encrucijada se encuentre en saber conjuntar prendas vanguardistas con aquellas que parecen sacadas de los grandes clásicos de Hollywood.

Genial.guru ha hecho una lista de recomendaciones para jugar con prendas old-fashioned y actuales para no lucir cómo de otra época.

1. Combinar mom jeans con tops

Se trata de un tipo de pantalón que suele favorecer a casi todas las figuras, puesto que marca la cintura y se ensancha en la parte de las piernas. Tuvo su auge en la década de los 80, pero volvió a aparecer hace 10 años. Para potenciar esa silueta de reloj de arena, podemos combinarlo con tops ajustados que dejen o no al descubierto parte de nuestro abdomen, ya sean largos o de tirantes.

2. Añadir tenis a los conjuntos de traje

Atrás quedaron los vestuarios formales de oficina que requerían llevar sí o sí zapatos de salón o mocasines para no desentonar. Actualmente, nuestro mejor aliado si queremos ir cómodas y elegantes son los sneakers, que lejos de solo usarse cuando vamos al gimnasio, se han convertido en una válvula de escape para llevar trajes e ir a la última.

3. Utilizar faldas largas de pliegues con suéteres

Probablemente, al escuchar el nombre de esta prenda, se nos venga a la cabeza la película de Vaselina y su encantadora protagonista, pero una buena forma de conjuntar esta falda y no parecer desfasadas de época es hacerlo con suéteres de todos los tamaños e incluso sudaderas de otros estilos o estampados.

4. Lucir chaquetas y prendas XL en un solo conjunto

Contra todo pronóstico, la moda oversize se ha vuelto una de las más estilosas y veneradas por muchas modelos. Sabemos que cuesta despegarse de los pantalones ceñidos, pero una vez probemos una chaqueta y la parte de abajo con un acabado XL, probablemente nos enamoremos de este atuendo. Es una gran apuesta si buscamos confort y elegancia.

5. Combinar pañuelos con ropa llamativa

Seguramente, Grace Kelly fue la musa que inspiró a algunas de nuestras abuelas a llevar este complemento. Aunque pueda parecer que han pasado siglos, este accesorio ha regresado para añadir color y carácter a cualquier look. Para adaptarlo a estos tiempos, podemos llevarlo atado en el pelo con una cola o tipo turbante, con ropa roquera o de un estilo más moderno.

6. Lucir bolsos mini con ropa de deporte

Es una de las opciones más atrevidas, pero le da un toque sofisticado a esa ropa deportiva cómoda, pero fashion, que usamos para salir a la calle. Podemos rescatar alguna cartera vintage que conservemos o adquirirla en un negocio de segunda mano. Un buen punto a tener en cuenta es pensar qué tonos son los que destacan en nuestro armario para combinarlos con bolsos mini que resalten sobre estos.

7. Vestir ropa satinada con accesorios informales

Esta tendencia probablemente nos recuerde el icónico vestido veraniego de satén de los 90, aunque en esta década podemos romper con la norma clásica del vestido-tacón y jugar con los accesorios. Por ejemplo, tenemos la opción de vestirnos con faldas, camisas o vestidos satinados y añadir una chaqueta de cuero con hebillas o unas chanclas de playa para darle un toque de frescura.

8. Ponerse abrigos clásicos con tenis

Los abrigos largos, clásicos y ostentosos posiblemente sean las prendas que nunca pasarán de moda por el estilo y elegancia que desprenden al emparejarlos con casi cualquier atuendo. No hace falta colocarse un vestido o unos tacones debajo, sino que incluso con unas deportivas brillará más por la modernidad que estas le otorgan.

9. Superponer capas con chalecos y camisas

El layering, el arte de poner prenda tras prenda y no excederse, está a la orden del día y puede tener un resultado exitoso. Se pueden hacer muchos tipos de combinaciones con tejidos y tonalidades. Por ejemplo, si no sabemos cómo conjuntar un chaleco de lana vintage, podemos colocarlo encima de una camisa blanca o de pana, o superponer largos de dos blusas diferentes.

10. Usar ropa cómoda con tacones

Combinar esos dos elementos es otra de las apuestas más arriesgadas, pero puede convertir nuestro aspecto desaliñado en uno muy estiloso. Podemos conjuntar esos pantalones de pata ancha de cuando nuestra madre era joven o ropa deportiva con unas botas o sandalias de tacón de aguja. Seguramente conseguiremos un aire chic a la vez que vestimos relajadas.

11. Lucir boinas con vestimenta de cuero

Los sombreros siempre gustaron, ya sea por el toque interesante que dan o porque visten y completan un look. Si no sabemos cómo unir este accesorio a nuestro ropero sin parecer un vaquero, podemos lucir una chaqueta o pantalones de cuero y agregar una boina o un gorro para suavizar nuestra apariencia y hacerla más bohemia.

¿Sabes de alguna prenda clásica que podamos agregar a nuestro vestuario de forma sencilla?