14 Cosas cotidianas del pasado que podrían hacer que las personas del presente salten del susto
A pesar de que muchas personas consideran que, en el pasado, todo era mejor, existen muchas razones para pensar lo contrario. Solo por dar unos ejemplos, antes se usaba radiación en productos de belleza y se ponía a los niños en jaulas en las ventanas para que tomaran aire fresco. Y al igual que estas, hay muchas otras cosas que la gente hacía en el pasado que podrían volarte la cabeza. Aquí te mostraremos algunas.
¿Qué cosas hacías en tu infancia con normalidad, pero que ahora pensarías dos veces antes de hacerlas?
1. Jaulas para bebés
Las jaulas para bebés se volvieron muy populares a inicios de 1900 debido a la extendida creencia de que mantenerlos expuestos al aire libre por prolongados períodos era beneficioso para su salud.
Fue Eleanor Roosevelt quien impuso la moda de las jaulas para bebés al llevar esta creencia al extremo, colocando una jaula de gallina en su ventana para que su hija pudiera sentir mejor el aire fresco. Sin embargo, la idea fue patentada por Emma Read en 1922 y, a partir de ahí, el invento comenzó a ser bastante utilizado entre las familias de Londres en los 1930.
Finalmente, por razones de seguridad y por la contaminación del aire, su uso se hizo cada vez menos frecuente a mediados del siglo XX.
2. Discos de vinilo dentro de autos
Este invento, ideado por Peter Goldmark, salió a la venta en 1955 bajo el nombre de Highway Hi-Fi, con el objetivo de brindar al menos 45 minutos de música a sus usuarios en cualquier lugar en el que se encontraran. En los casos más extremos, los discos podían medir hasta 57 mm. Sin embargo, debido a que era un dispositivo altamente propenso a fallar, fue un fracaso en ventas. Eventualmente, dejó de venderse.
3. Enviar bebés por correo
En 1913, después de que la oficina postal de Estados Unidos anunciara que se podrían enviar paquetes de hasta 4 libras, debido a las vagas especificaciones en las regulaciones sobre lo que se podía o no mandar a través del servicio de correo, la gente empezó a enviar a seres humanos.
Este fenómeno se dio hasta 1915 y, en los dos años que le llevó a la institución publicar mejores regulaciones en su servicio, las personas del correo no solo tuvieron que lidiar con bebés, sino también con todo tipo de cosas como huevos, ladrillos y serpientes, entre otros tipos de paquetes inusuales.
4. Dejar que los bebés duerman boca abajo
Está comprobado que los bebés deberían dormir sobre sus espaldas y no sobre su estómago ni de costado, ya que esto puede aumentar el riesgo de experimentar complicaciones respiratorias durante la noche y tener consecuencias fatales. Lo mismo podría ocurrir si se dejaran objetos como peluches cerca del bebé mientras duerme. Por eso, lo mejor que se puede hacer es garantizar que el pequeño duerma en una superficie plana sin absolutamente nada a su alrededor.
5. Árboles de Navidad iluminados con velas
- “Mi papá encontró un portavelas para árbol de Navidad de más de 100 años en la vieja caja de adornos de mi abuela”. © professor_tappensac / Reddit
Se cree que la costumbre de ponerles luces a los árboles de Navidad surgió gracias a que cristianos del siglo XVI combinaron las tradiciones paganas de la fiesta de Yule con el árbol navideño.
En Yule, se trataba de simbolizar el encuentro entre la vida y la muerte con el fuego (la luz) y la vegetación marchita. Cuando los alemanes combinaron esto con el árbol de Navidad, las personas empezaron a poner velas en sus ramas, creando así una nueva tradición.
El primer árbol iluminado data de 1660. En años posteriores, se trató de colgar las velas con hilos, e incluso con cera, para adherirlas a las ramas, pero ninguno de estos métodos funcionó. Hasta que, en 1878, Frederick Artz inventó un clip para sostener las velas en el árbol. Sin embargo, este método permitía iluminar las ramas tan solo por 30 minutos para prevenir incendios.
No fue sino hasta 1882 que Edward Johnson inventó las primeras luces eléctricas para los árboles navideños.
6. Máquinas con radiación para medir el calzado
A estos aparatos se los llamaba fluoroscopios para calzar zapatos y se los podía encontrar en las tiendas para determinar la medida del calzado. Estuvieron en auge desde 1930 hasta la década de 1970 en países como Canadá, Reino Unido, Australia, Estados Unidos, entre otros. Sin embargo, tras descubrirse los peligros de la radiación, su uso fue gradualmente disminuyendo hasta que se abandonó por completo.
7. Sillas de copiloto para bebés
Originalmente, los asientos para niños no contemplaban ofrecerles mayor seguridad. Por ejemplo, en la década de 1930, Bunny Bear Complany hizo uno de los primeros asientos para infantes, cuya principal función era que el niño tuviera mejor visibilidad hacia la carretera.
Se trataba tan solo de un asiento elevado con un marco metálico que se posaba sobre las butacas normales. Después, en los años 40, los fabricantes añadieron un seguro para que el asiento estuviera sujeto al vehículo, lo recubrieron con lona y le agregaron un pequeño volante para que los niños jugaran durante los viajes.
De hecho, no fue sino hasta inicios de la década de los 60 que la seguridad de las sillas para niños se empezó a tomar en cuenta para su fabricación, lo que llevó a que se inventaran los asientos con cinturones de seguridad de tres puntos (regazo y hombros).
8. Listas de compras predeterminadas
Este tablero vintage de compras de víveres luce como el invento perfecto para aquellos a los que no les gusta que se les escape nada. Un usuario de Reddit compartió una fotografía del suyo y, a pesar de lo útil y práctico que parece, hoy lo vemos como algo novedoso, ya que, en algún punto, las familias dejaron de utilizarlo.
En la imagen se puede observar que su funcionamiento es muy sencillo. El tablero cuenta con una serie de artículos esenciales para el hogar. Para comenzar una lista, lo único que se debe hacer es cambiar las flechas que hay al lado de cada elemento hacia la dirección contraria y listo.
9. Antes, el mercurio de los termómetros se manipulaba
Si alguna vez viste o tuviste uno de estos termómetros, no eres el único. De hecho, estos son tan comunes en las casas que se han reportado varios casos de personas que han llegado a ingerir de manera oral el mercurio que se encuentra dentro de ellos.
No obstante, según la revista de medicina Balkal, el mercurio presente en los termómetros caseros no llega a ser peligroso para los seres humanos, ya que se trata de una cantidad muy pequeña.
Y puede que así sea, pero para muchas personas, el solo hecho de que el ser humano esté tan cerca de sustancias como estas es algo que debería quedar en el pasado.
10. Maquillaje radiactivo
En 1933, poco después del descubrimiento de la radiación, el mercado interpretó de manera fatalmente incorrecta sus “bondades” para el ser humano. En ese entonces, su investigación se había limitado a descubrir cuánta energía podía producir. Debido a eso, se supuso que si se lo añadía a diversos productos cotidianos, sus beneficios serían incomparables.
Así, una nueva línea de productos de belleza “científica” nació. Se trataba de Thor-Radia, la cual prometía mejorar la circulación, reafirmar los músculos faciales, reducir la grasa y suavizar las arrugas. Gracias al gran éxito que esta tuvo con los consumidores, a pesar de no cumplir sus promesas, las personas comenzaron a vender toda clase de productos que contenían radiación, como cremas, lápices labiales, polvos faciales, jabones, rasuradoras, bebidas energéticas y más.
Más tarde, aun después de conocerse los efectos dañinos de la radiación directa en el ser humano, muchas marcas y productos de este tipo seguían siendo populares. No fue hasta 1938 cuando la Ley Federal de Alimentos, Medicamentos y Cosméticos prohibió que las marcas hicieran promesas falsas en sus empaques, algo que finalmente dejó atrás el uso de esta sustancia en diversos productos cotidianos.
11. Ponerse aceite para tomar largos baños de sol
¿Quién no ha escuchado el típico consejo para obtener un mejor bronceado con aceite de coco? Si eres de las personas a quienes les gusta ese tipo de look, lamentamos traerte malas noticias.
En realidad, el solo hecho de broncearse puede provocar efectos secundarios poco deseables como el incremento de riesgo de sufrir cáncer de piel, el aceleramiento del proceso de envejecimiento, entre otros. Si a esto le sumamos el uso de cualquier clase de aceite para broncear, los riesgos se ven exponencialmente aumentados, dado que estos se utilizan para atraer los rayos ultravioleta.
12. Conducir sin cinturón de seguridad
Ya en 1930, los cinturones de seguridad estaban disponibles para los conductores y pasajeros. No obstante, su uso aún era bastante secundario para los viajeros. De hecho, las personas prestaban tan poca atención a este artículo que no fue hasta la década de 1960 que su implementación se volvió obligatoria. Hasta entonces, muchos modelos de automóviles venían sin cinturones de seguridad. Si una persona los quería, debía comprarlos por separado.
13. Usar pasas como premios para perros
A pesar de que hoy se conoce que tanto las uvas como las pasas son tóxicas para las mascotas, en el pasado, muchas personas acostumbraban emplearlas como “premios” para sus mascotas en sus sesiones de entrenamiento. Esto sería impensable en la actualidad, porque se sabe que pueden causar severos episodios de diarrea y convulsiones en los animales.
14. Fórmulas para bebés con melamina
En 2008 se descubrió que algunas fórmulas de leche para bebé chinas tenían melamina entre sus ingredientes. En ese año se supo que este componente se usaba para que en el control de calidad, el nitrógeno diluido tuviera la apariencia química de más proteínas. Como resultado, estas fórmulas causaron daños en los riñones y cálculos renales en al menos 300 000 bebés.