15 Citas que tomaron un rumbo inesperado (y no siempre para bien)

hace 1 día

Las citas pueden ser impredecibles y, a veces, incluso las mejores intenciones conducen a momentos incómodos, inesperados o francamente extraños. Ya sea por falta de comunicación, un mal momento o un giro del destino, muchos de nosotros hemos tenido citas que no han salido como habíamos planeado. En este artículo, compartimos 15 historias de personas cuyas citas dieron giros sorprendentes, desde incómodos pasos en falso hasta embarazosas revelaciones.

En una segunda cita con una chica, perdí mi último transporte, y me dijo que podía quedarme a dormir. Charlamos hasta dormirnos. Medio dormido, sentí una mano en mi hombro.
Al principio pensé que era una pesadilla, pero al abrir los ojos, vi que estaba de pie, mirándome fijamente. Me dijo: “No puedo dormir. Estás roncando muy fuerte”.
Luego, sin decir nada más, agarró una almohada y una manta y se montó en el sofá. “Voy a dormir aquí fuera”, dijo, sonriendo torpemente. Esa fue la última vez que salimos.

Conocí a una chica atractiva en una aplicación de citas para una cena tardía. Parecía simpática en su foto de perfil, pero cuando quedamos, las cosas se pusieron raras. Apareció con un par de amigas y todas parecían muy unidas.
Resulta que todas van a las primeras citas de las demás y deciden colectivamente si es una buena pareja o no. Me quedé un poco desconcertado cuando me explicaron esta tradición, pero me quedé por curiosidad. La noche se convirtió rápidamente en una entrevista en grupo. Me sentí más como un concursante que como una cita.
Después de un rato, noté que me evaluaban con miradas y gestos sutiles, lo que me pareció bastante inquietante. Así que decidí que era hora de retirarme. Finalicé mi comida, me excusé educadamente y me fui. Después de aquella noche, la bloqueé.

[editado] Esto me da mucha vergüenza ahora que lo recuerdo. En mi segundo año de universidad, pasé la noche en vela con una chica linda de la que era amigo. Estuvimos chateando toda la noche y, cuando terminamos nuestros trabajos al amanecer, ella me invitó a desayunar para celebrar. Yo llegué pareciendo un zombi, mientras que ella se veía radiante y claramente había puesto más empeño que yo.
El sol llenaba el restaurante con una luz cálida cuando, de manera coqueta, me preguntó si ya había superado a mi ex. Asentí, sintiéndome bien con el momento, y le dije que incluso ya pensaba en la próxima persona a la que quería invitar a salir. Su sonrisa se amplió, me tomó la mano y preguntó si ella conocía a esa persona.
Sin pensarlo, respondí: “Rebecca, la de mi clase de historia”. Su rostro se descompuso y yo no entendí por qué... hasta mucho después, cuando me di cuenta de que esa había sido mi primera cita con la mujer que más tarde se convertiría en mi esposa. © ConneryFTW / Reddit

Ella me gustaba desde hacía meses, así que cuando por fin aceptó salir conmigo, me entusiasmé. Pero cada cita me parecía rara. Siempre estaba con el móvil, sacando fotos para las redes sociales, insistiendo en que las publicáramos juntos. Yo no estaba preparado para eso, pero le seguí la corriente, pensando que no era para tanto.
Pero algo no me cuadraba. Entonces descubrí la verdad: seguía viendo a su ex y me utilizaba para darle celos. Yo era joven y tenía el corazón roto, pero al final me sentí aliviado de poder seguir adelante.
Cuatro meses después, conocí al amor de mi vida. Me casé con ella el mes pasado y nunca he sido tan feliz.

Conocí a una chica a través de unos amigos comunes, y durante unos años fuimos entrando y saliendo de nuestras vidas. Al final la invité a salir y, después de unas cuantas citas, tuvimos una encantadora en un café al aire libre en una preciosa tarde de finales de verano.
Volvimos a mi casa por primera vez y empezamos a besarnos en la cama... y fue entonces cuando sentí que algo caliente empezaba a gotear de mi nariz. Empezó a sangrar y goteó sobre su labio superior antes de que pudiera pararlo. Me horroricé y traté de limpiármelo (lo que no hizo más que mancharlo), luego corrí al baño para meterme un pañuelo en la fosa nasal y traerle una toallita.
Fue todo lo educada que pudo ser, pero enseguida me informó de que se iba y no me dejó acompañarla hasta su coche. Mientras salía por la puerta principal, se giró y me dijo: “Es una pena, porque esta noche estaba de muy buen humor”. Y se fue.
De alguna manera, llevamos juntos casi 10 años y casados seis. Te quiero, cariño. © T412E / Reddit

Tenía 13 años y era mi primera cita. Ella quería que quedáramos en un sitio y luego fuéramos a otro, pero yo era bastante malo conociendo sitios, así que tuve que preguntarle a mi madre dónde era. Me llevó y pensé que se iría, pero al parecer salió a ver qué pasaba.
Sin saber que me estaban vigilando, me reuní con ella y empezamos a caminar, cuando de repente mi madre gritó desde detrás de nosotros que íbamos en la dirección equivocada. Estaba tan avergonzado que no fui capaz de hablar con la chica con normalidad después y me fui a casa muy rápido porque pensé que todo el asunto ya estaba arruinado. © _Norman_Bates / Reddit

[editado] La conocí en una liga de fútbol para adultos y la invité a desayunar. Aceptó y la llevé a un pequeño restaurante. Durante la comida, compartió algunos intereses muy personales. Fue más de lo que esperaba.
Después me di cuenta de que me había olvidado la cartera, así que ella tuvo la amabilidad de pagarnos a los dos. Me invitó a su casa y fui, como si se lo debiera. La cosa fue a más y, una hora más tarde, recibió un mensaje de texto y se asustó: “¡Tienes que irte, mi novio llega pronto a casa!”.
Era la primera vez que oía hablar de un novio, y de repente me di cuenta de que acababa de pasar un rato en la cama de su novio después de que ella hubiera pagado nuestra comida con dinero que él le había dado. Con las prisas por irme, me subí al coche, derribé un buzón y me rompí el parachoques. Ahora, no para de mandarme mensajes. © BEST_NARCISSIST / Reddit

Pensé que sería bonito probar el patinaje sobre hielo como primera cita, a pesar de no saber patinar. No sabía que era una patinadora artística de competición y literalmente patinó en círculos a mi alrededor. Supe que la cosa no iba a ninguna parte cuando me preguntó si podía dar un par de vueltas sin mí, ya que mi ritmo de principiante era demasiado lento. © critical_fail1 / Reddit

[editado] Tuvimos una cita mediocre, luego caminamos a su departamento. En el camino, ella contestó a una llamada telefónica acerca de un sofá que estaba comprando. Esta llamada continúa durante las siguientes horas de la cita. Para entretenerme, montó un espectáculo sobre un acosador, lo cual no es un buen material para una primera cita.
Al final, dijo resignada: “No va a haber una segunda cita, ¿verdad?”. Y yo estuve de acuerdo en que no la habría. © Love-that-dog / Reddit

Una mujer me pidió una cita en un bar de un parque para perros. Le dije que mis perros no viajaban bien, así que solo iría yo, a lo que ella dijo que estaba bien. Llegué allí y ella tampoco había traído a su perro.
Entonces me dijo que no quería que la atendieran. Así que estamos en un bar de un parque para perros sin perros, sentados. La cita duró otros veinte minutos más o menos antes de que ella empezara a llorar por cómo lo había estropeado todo y corriera hacia su coche.
De repente, yo era un hombre en un bar de un parque para perros sin perros, sin distracciones, que acababa de hacer a una mujer llorar y salir corriendo. © SaddestClown / Reddit

En la universidad, me invitaron a una pista de patinaje sobre hielo con una chica que me gustaba y algunas de sus amigas. Yo no sabía patinar sobre hielo, y no lo aprendí muy rápido, pero quería intentar impresionarla de alguna manera. Pues bien, estuve todo el rato abrazado a la pared e hice el ridículo.
Lo mejor fue cuando vi un destello de luz al caer delante de un grupo de gente. Resulta que me había caído justo en el momento en que alguien hacía una foto, así que mi fracaso quedó inmortalizado para siempre. Me llevó a mi departamento y puso fin a la relación antes de que empezara.
En una nota más ligera, la mujer que ahora es mi esposa estaba en esa pista de hielo aquella noche. No nos dimos cuenta de que estábamos allí al mismo tiempo hasta que llevábamos uno o dos años de relación, y ella exclamó: “¡Eras aquel chico que no sabía patinar sobre hielo! Sí, no parecía que le gustaras mucho”. © Krell47 / Reddit

No voy a decir que fue una cita, pero esta compañera de trabajo y yo eventualmente sí salimos juntos. Solíamos caminar después del trabajo en un parque grande, y luego pasábamos por una tienda a comprar agua embotellada.
Una noche había sorteo de lotería y el estacionamiento estaba lleno, así que tuve que dejar el coche como a diez lugares de la entrada. Era una noche fresca de otoño, así que bajé con las ventanas cerradas. Compré el agua y al salir noté que ella había bajado las dos ventanas hasta la mitad.
Subí al coche y olía bastante mal, como si se le hubiera escapado un gas. Ella se disculpó, pero yo me reí con ganas, y luego ella también empezó a reír. Habíamos salido muchas veces como compañeros, pero ese momento fue el que me hizo hablar con ella para empezar a salir en serio. Y así fue. © r***31264 / Reddit

Finalmente invité a salir a una compañera de trabajo guapísima, y me dijo que sí. Fuimos juntos a una fiesta, en el coche de unos amigos. Ya en la fiesta, ella se puso muy borracha, y pasó la noche hablando y coqueteando con otro hombre que yo ni conocía.
Al final, volvimos en el coche de unos amigos al lugar donde habíamos dejado nuestros coches. El hombre también vino con nosotros... y en el camino, ellos empezaron a besarse justo al lado mío, en el asiento trasero.
Mi única venganza fue contarle a todo el mundo en el trabajo cómo fue nuestra “cita”. © polyesterbrown / Reddit

[editado] Salí en una primera cita con una chica que conocí en el teatro comunitario. Fuimos a ver Lluvia de hamburguesas, pero pronto nos dimos cuenta de que teníamos demasiados intereses opuestos, lo que llevó a conversaciones incómodas sobre temas tensos. Le escribí a un amigo para desahogarme sobre lo mal que iba la cita.
Justo después de darle a “enviar”, sonó el móvil de ella. Lo sacó, leyó el mensaje y me preguntó: “¿De verdad querías mandarme esto a mí?”. Me di cuenta de que, por error, le había escrito a ella en vez de a mi amigo. Se molestó, pero terminamos la cita como amigos... con bastante incomodidad.
Esa misma noche, volví a escribirle a mi amigo sobre el desastre, y mi móvil volvió a sonar: “Me lo volviste a mandar a mí”. © Rocktopus_PhD / Reddit

[editado] Salí en una primera cita con una chica que parecía genial: guapa, divertida, con intereses similares a los míos. Estábamos charlando en un bar y, como es típico, empezamos con las preguntas clásicas de las primeras citas. Le pregunté: “Trabajas en una oficina, ¿pero eso es lo que realmente quieres hacer?”.
Entonces, mete la mano en su bolso, saca una nariz de payaso roja y se la pone. “En realidad, estoy yendo a una escuela de payasos”, dice. Me quedé en shock —¡era nuestra primera cita!
Tratando de seguirle el juego, bromeé: “¿Entonces estás en la universidad de payasos o en el colegio de payasos?”. Se ofendió... y para ser payasa, tenía un sentido del humor terrible. © AlfieTorp*** / Reddit

No todas las citas están destinadas a ser un cuento de hadas. Pero estas historias nos recuerdan que, a veces, las experiencias más memorables son las que no salen según lo previsto. Tanto si te ríes de los contratiempos como si te avergüenzas de la incomodidad, siempre hay algo que aprender de estos momentos inolvidables. En este artículo encontrarás más historias de citas que no salieron como se esperaba.