Se me da fatal cuidar de las plantas
15+ Maneras de salvar una planta que está secándose, incluso si no tienes un pulgar verde
Algunas personas tienen vínculos especiales con sus plantas de interior, al igual que Léon y Mathilda de la película de Luc Besson. Es por eso por lo que es tan decepcionante encontrar a nuestras amigas verdes tomando su último aliento, con sus hojas marchitas y secas. Pero la buena noticia aquí es que no debes apresurarte a llorar por tu planta fallecida, ya que hay algunas maneras de impulsar a esa pobre cosita para que florezca en todo su esplendor nuevamente.
En Genial.guru nos encanta buscar consejos que ayuden a nuestros lectores a solucionar incluso las situaciones más desesperadas, y esta vez te invitamos a ver cómo resucitar tus tesoros en maceta.
1. Cambia las macetas decorativas o de metal por otras “más saludables”
Si tu planta apenas respira puede ser porque se eligió la belleza sobre la practicidad y se la colocó en la maceta equivocada. A tu planta realmente no le importa si su “atuendo” coincide con el patrón de tus nuevas cortinas. En última instancia, necesita un ambiente saludable para crecer y florecer. Por lo tanto, si esta se encuentra en una maceta de metal o en una bonita decoración sin agujeros de drenaje, realmente necesitas liberarla de ese cautiverio. Las macetas de metal mantienen el calor adentro, por lo que las raíces de tu pobre planta estarán literalmente “cocinándose” en esa “sartén”. Por otro lado, las macetas de cerámica con un solo orificio de drenaje o sin orificios para este propósito harán que el agua permanezca adentro, acumulando humedad poco saludable alrededor de las raíces.
2. Tratar las raíces hacinadas de forma manual, aflojándolas y separándolas suavemente
Cuando una planta se parece a la de la imagen de la izquierda, es hora de trasplantarla para darle más espacio. Antes de realizar este procedimiento, asegúrate de limpiar las raíces y desenroscarlas para que puedan absorber el agua y los nutrientes de manera más eficiente. Hazlo con cuidado, como si estuvieras desenrollando una cuerda frágil, para no romper las raíces y darles más espacio. De esta manera, estas podrán respirar.
3. Usa solo agua filtrada en tus plantas
A pesar de la opinión de que el agua de grifo se filtra, todavía tiene algunos niveles de cloro y otros productos químicos que pueden ser el tiro de gracia para tu planta. Deja reposar el agua durante 24 horas antes de regar tus cultivos. Según los expertos, el agua destilada o el agua de lluvia también son buenas para tu planta, ya que ambas son ligeramente ácidas y eliminan naturalmente todos los químicos y sales que ya se han acumulado en el suelo debido al uso previo de agua del grifo. Puedes recoger agua de lluvia en un depósito o poner las plantas afuera para que absorban un poco de humedad mientras llueve.
4. Considera las macetas orgánicas para crear un ambiente más natural y ayudar al crecimiento de tus plantas
Puedes intentar mover tus plantas a macetas hechas de cáscaras de coco. Estas no solo pueden convertirse en excelentes macetas orgánicas que pueden permitir un buen drenaje y evitar que las raíces se pudran, sino que también proporcionarán a tu planta zinc, cobre, así como hierro de forma natural. Si bien es demasiado débil para los fertilizantes químicos, la “alimentación” natural la mantendrá literalmente en este mundo.
5. Recorta todas las partes “muertas”, pero deja aproximadamente 5 centímetros de tallo sobre la superficie
Retira todas las partes muertas o poco atractivas que queden en la planta. Esto incluye hojas marchitas amarillas o marrones que no pueden salvarse o tallos sin hojas. Sin embargo, no olvides cortar el tallo sin vida en un ángulo de 45 grados, dejando la mayor cantidad de follaje posible.
6. Ocupa solamente fertilizantes solubles en agua y riega la planta con una pequeña cantidad de la mezcla
Aunque parezca que el fertilizante puede hacer maravillas, esto es solo parcialmente cierto. Sin embargo, lo que realmente importa es la cantidad y la aplicación adecuada, especialmente para tus plantas débiles y sin vida. El enfoque de “más es mejor” matará absolutamente todo. Para fertilizar tu cultivo deberás preparar una mezcla de 1 cucharadita de fertilizante por 3,78 litros de agua. Esta es una proporción universal que no es dañina para las plantas de interior.
7. Agrega drenaje de color claro alrededor de la planta
8. Revisa la maceta en busca de jaulas ocultas y retíralas
Si tu planta todavía está en la maceta original en la que la compraste, se recomienda revisarla para ver si hay jaulas de plástico en la parte inferior, ya que son dañinas para las raíces y probablemente sean la razón principal por la cual tu planta está muriendo. Tendrás que quitar las jaulas de la maceta o cambiar esta por completo.
9. Libérate de las plagas con un lavado delicado
Usa una esponja o un bastoncillo de algodón humedecido en agua jabonosa o alcohol para eliminar delicadamente las plagas de la planta. Si usas un jabón especial para insectos y plagas, deberás repetir el procedimiento un par de veces, ya que estos surten efecto recién cuando se secan.
10. Toma medidas para no atraer a bichos malos
Para mantener alejados a los insectos hambrientos de tus preciosos amigos verdes debes decirle “no” al uso de tierra para exteriores. Compra una mezcla especial en el supermercado, ya que es estéril y no se contaminará con invasores no deseados. Trasplanta inmediatamente tu planta al terreno sano.
Dado que tu planta es demasiado débil, también debes garantizarle un buen drenaje, ya que esto evitará que las raíces se pudran y garantizará una mejor resistencia contra la invasión de insectos.
11. Trata las manchas de hongos e insectos usando un aerosol de aceite o remedios antimosquitos
Al igual que sucede con los humanos, los hongos pueden ser perjudiciales para la salud de las plantas. Si ves que la tuya tiene manchas podridas sobre su pulgar o más cerca de sus raíces, es hora de declarar la guerra contra este “invitado” inoportuno. Puedes usar gránulos antifúngicos profesionales o aplicar un aceite hortícola especial que no contaminará a tu planta con químicos mortales, sino que sofocará a los insectos y hongos hasta hacerlos desaparecer.
12. Organiza baños de tallo y raíces para tus plantas
Después de pasar mucho tiempo en el interior, tus plantas merecen un verdadero día de relajación. El aire seco y la ventilación no natural en tu departamento pueden agotarlas. Para revivirlas deberás ponerlas en otras condiciones y darles una buena limpieza y remojo. Coloca las plantas en una bañera y lávalas bien debajo de un cabezal de ducha, prestando mucha atención a ambos lados de las hojas. De esta manera, lavarás las plagas restantes y permitirás que el agua elimine las sustancias nocivas que podrían haberse acumulado en el suelo.
13. Usa relleno de pañales para el drenaje del suelo
Si las raíces de tu planta son propensas a pudrirse, la mejor manera de mantener el equilibrio de humedad es usando hidrogel (que puede comprarse en tiendas de jardinería). También puedes usar un pañal para bebés que se haya desgarrado; simplemente mezcla el contenido con agua hasta obtener una textura gelatinosa. Debes agregar el preparado en proporciones iguales y así estará listo el suelo perfecto de drenaje automático para tus plantas. Con este método ya no tendrás que preocuparte por la podredumbre.
14. Usa yogur como fertilizante no agresivo
Las bacterias del ácido láctico pueden proporcionar una buena nutrición para tus plantas. Son un asesino natural de enfermedades y también ayudan a mantener el suelo en condiciones óptimas para que tu planta se sienta a gusto. Puedes “alimentarla” con un par de cucharaditas de yogur, agregándolas al suelo para enriquecer la base de la planta con ácidos orgánicos, ayudando así a tu amiga verde a recuperar su vigor.
15. Si tienes un acuario, usa su agua para regar tus plantas
Probablemente hayas notado lo rápido que crecen las plantas acuáticas en tu acuario. Esto se debe a que son constantemente “alimentadas” por productos orgánicos y naturales que llegan al agua como resultado de la actividad vital de tus peces. Mientras tu tanque no esté lleno de agua salada, puedes usar su agua para regar tus plantas y enriquecer su suelo. Así podrás restaurar naturalmente su vitalidad. Sin embargo, esto no funcionará si el agua en el tanque es salada, así que asegúrate de tener eso en cuenta cuando practiques este tipo de terapia.
16. Usa una bolsa de plástico para crear un invernadero para tu planta
Puedes crear un invernadero en miniatura para tu planta poniéndola junto con la maceta en una bolsa de plástico limpia y colocándola en una luz indirecta suave o artificial. Asegúrate de regar la planta antes de esto y deja que el agua drene bien. El plástico permitirá que esta absorba el agua que se evaporará, y puedes estar seguro de que no importa cuán ocupado estés en ciertos días del mes, tu planta no se secará nuevamente. Este método también la ayudará a sobrevivir en condiciones de aire seco, como cuando tu calentador está encendido. La humedad es tan esencial en esta época del año para tu planta como lo es para ti y tu salud.
¿Qué consejos tienes para darle una segunda oportunidad a una planta seca y podrida? Nos encantaría que compartieras tus experiencias de reanimación con nosotros.
Comentarios
Muy buenos consejos, los tendré en cuenta
Desconocía lo del agua filtrada
Me gustan mucho las macetas orgánicas
Creo que la 12 ya es demasiado…