16 Historias de la vida de embarazadas que podrían pasar de generación en generación

El embarazo es un estado natural y a la vez extraordinario. Posiblemente, todas las mamás conservan muchos recuerdos del período más valioso: traer al mundo una nueva vida.

Nosotros, en Genial.guru, nos emocionamos mucho al leer estas historias y ver estas tomas. Esperamos que las protagonistas de nuestra recopilación también te conmuevan.

1. “Son inseparables desde que mi esposa se embarazó. Hoy se llevará a cabo el parto. Pienso que nuestra gata lo sabe”

2. Cuando se te antoja mucho algo salado

• Un antojo tremendo de algo salado llegó en el momento en que todos los frascos con verduras conservadas del año pasado se habían terminado por completo. Mi suegro aceptaba con gusto las invitaciones de visita con la condición de que me trajera pepinillos o pepinos salados y me los llevaba escondiéndolos en un bolsillo. Y luego los comía con otros dulces. © Renée Sukis / Facebook

3. “Le conté a una repartidora de pizza que estaba embarazada. Nos regaló una pizza ’infantil’. Le hice una pequeña versión de pizza de lana, ¡y le gustó!”

“La repartidora me dio un buen consejo de maternidad, ya que mi mamá había fallecido”.

4. “Cuando tu esposa embarazada se da cuenta de que finalmente puede comer ostras”

5. El embarazo puede dar un impulso para adquirir nuevas destrezas

• En el quinto mes decidí que necesitaba urgentemente aprender el arte de la peluquería. Estudié hasta que podía extender mis brazos para no empujar al cliente con mi barriga. Por cierto, tengo una altura de 154 cm. Cuando no pude continuar mis estudios por tener una barriga lo suficientemente grande, me puse muy triste. © Alina CashYou / Facebook

6. “Le preparé un sándwich a mi esposa embarazada”

“Hecho con huevo, tocino, cebolla caramelizada en jarabe de arce, rebanadas de manzana, queso cheddar, pan de una panadería cercana y mucho amor”.

7. Las embarazadas tienen sus delicias

• Me encantaban los quesos baratos. En aquel entonces nadie los compraba, y yo me llevaba ese quesito, le quitaba la envoltura, luego los bordes secos, y me lo comía mientras cruzaba la calle. Ahora me pregunto por qué no compraba varias piezas de queso, si al final ¡compraba trozos todos los días! © Olena Enich / Facebook

8. “Cuando tu esposa en la semana 41 de embarazo te pide hacerle un banco para el excusado... simplemente hazlo”

9. “Yo, en la semana 24, tengo mucha hambre, pero no quiero hacer de comer. Como broma me escribieron ’embarazada’ en mi sándwich. Este mensaje lindo hizo mi día”

“Felicidades, embarazada”.

10. El embarazo evoca el amor hacia los materiales de construcción

• Mi amiga maestra me traía tiza de la escuela, pero no era lo que quería. Se me antojaba el estuco de la pared, pero no había, porque los muros tenían papel tapiz. © Olga Zarnitsina / Facebook

11. “Bueno, mi esposa está embarazada. Vinagre, papas con kétchup y esto”

12. “Voy por la semana 29 de embarazo de mellizos y tuve un día pesado. Mi niño saltó al escritorio, puso su pata y cara en mi barriga”

“Se quedó todo el tiempo así y estuvo escuchando cómo mis niños pateaban”.

13. Qué obstáculos puede haber entre una chica embarazada y un antojo

• Fui al supermercado con mi esposo. Simplemente se me antojó un arenque ahumado. Tomé dos piezas y seguimos adelante. La gente nos estaba mirando y sonriendo. Nos acercamos a la caja, estábamos dando los productos para pagar y la cajera estaba riendo a carcajadas. Mi esposo estaba guardando las cosas en una bolsa y en un momento quedó perplejo: “Querida, ¿dónde está el arenque?”. Y entonces me di cuenta de por qué todos los presentes habían tenido tal reacción. En mi boca tenía la cola del arenque, y estaba masticándola de forma deliciosa, mientras sostenía una bolsa vacía en mi mano. © Ιρινα Μουζη / Facebook

14. “Soy una amenaza para la sociedad. Mi cerebro de embarazada le pidió a mi esposo ordenar un burrito sin tortilla”

15. “Mi esposa embarazada me reemplazó”

16. Los esposos están dispuestos a aguantar todo por su pareja embarazada

• Con mi primer hijo tenía calor todo el tiempo y me faltaba el aire. Abría la ventana pequeña y dormía felizmente, mientras que mi esposo tenía demasiado frío incluso después de cubrirse con dos edredones, dado que era la temporada fría. © Irina Vyshegorodtsova / Facebook

¿Qué momentos extraordinarios del embarazo son familiares para ti?