Esos padres, como educadores, son un fiasco.
-
-
Responder
Es común ver a algún niño hacer berrinche cuando no se sale con la suya, y en la mayoría de los casos lo entendemos y tratamos de ser empáticos. Pero cuando los desconsiderados son los papás, pueden agotarnos la paciencia y hasta arruinarnos el día. Los padres que conocerás a continuación, sin duda, sobrepasaron los límites y necesitaban que alguien los pusiera en su lugar.
Las personas entrometidas y maleducadas pueden aparecer en muchas situaciones, ya sea con consejos que nadie les pidió, en forma de vecinos importunos o familiares que no miden sus comentarios. Lo mejor en estos casos es no darles demasiada importancia y regresarles una cucharada de su propia medicina de vez en cuando.
Esos padres, como educadores, son un fiasco.