Hay días en los que nada parece salir bien: quedarse dormido, perder el autobús, llegar tarde y, para colmo, pisar excremento de perro. En algún punto nos preguntamos: “¿Acaso esto puede empeorar?”. Pero incluso el peor de los días llega a su fin y muchas veces podemos mirar al pasado para reírnos un poco de esas desventuras y de nosotros mismos.
1. “Todos mis plátanos se pelaron solos mientras dormía anoche. Nunca había visto que esto sucediera”
2. “Le dije a mi compañero de cuarto que era su turno de comprar papel higiénico y compró dos rollos de una sola capa”
3. “¿Cuántos años de mala suerte son? Lo he tenido durante 3 días y me despierto con él derribando el espejo”
4. “Mi cereal Lucky Charms vino sin malvaviscos”
5. “Solo quería limpiar la ventana”
6. “Acabo de pedir una pizza de pepperoni”
7. “Solo quiero sentarme y llorar. Bueno, ya lo estoy haciendo”
8. “Mi hijo ’ventilando’ sus emociones esta mañana”
9. “Alguien tomó mi equipaje pensando que era suyo. Lo abrió, rompió las cerraduras y lo regresó así al día siguiente”
10. “Todos mis calcetines de los que perdí el segundo par”
11. “Llevé a mis hijos a nadar y volví a casa con un total de 65 picaduras de mosquitos. Mis hijos tenían 2 entre los tres”
12. “En el trabajo, preguntándome por qué sentí una corriente de aire. Mis jeans favoritos han muerto”
13. “Pasé días tratando de adquirir esta silla y no cabe en la habitación”
14. “Ahora solo una pizca de pimienta”
15. “Para ser justos, pudo haber sido peor”
16. “Me uní a una liga de softbol. En el primer juego fui golpeado en la frente por la pelota”
17. “Siento que soy demasiado viejo para seguir aprendiendo lecciones de la vida, pero aquí estamos”
18. “Su pedido se ha retrasado”
¿Cómo sueles reaccionar ante los eventos desafortunados? ¿Qué mal día recuerdas que ahora te dé ganas de reír?