20+ Viajeros que solo querían llegar a su destino, pero terminaron con una historia para contar de por vida

Para la mayoría de las personas, los aeropuertos y estaciones de tren se asocian con largas filas, caos y prisas constantes. Pero algunos afortunados logran meterse en situaciones tan inesperadas que terminan recordando más la aventura en el aeropuerto que el propio viaje.

• Estaba sentado en la estación de tren cuando escuché un anuncio por altavoz: “En la estación contamos con una sala VIP donde puedes esperar tu tren en un ambiente acogedor y amigable.” O sea, ¿eso significa que en la sala de espera común el ambiente es sucio y hostil? © sar13 / Pikabu
• Un amigo me contó una historia curiosa. En la estación de tren, una chica estaba comprando un boleto. El cajero le preguntó: —¿Quiere viajar en coche cama o en clase turista? A lo que ella respondió, muy convencida: —¿El coche cama llega más rápido? © lolwut22 / Pikabu
• Tenía que recoger a mi mejor amiga en la estación, así que fui con mi hija de cuatro años en la noche. Llevábamos globos y su pastel favorito para recibirla. Mientras esperábamos en la entrada, se nos acercó una señora mayor. En ese momento, tuve que agarrar a mi hija y apartarla, pero no por miedo, sino porque la señora sonrió y mi hija, emocionada, empezó a gritar que quería unos dientes dorados tan geniales como los de la abuela. © Mamdarinka / VK
• La noche antes de mi vuelo dormí fatal. Llegué al control de seguridad medio zombie y con una maleta tan llena que en la radiografía no se distinguía nada. El agente tomó mi equipaje para abrirlo y, sin pensarlo, solté:
  —Tengan cuidado, no vaya a explotar.
  Solo después me di cuenta del horror de mis palabras. Por suerte, el oficial tenía buen sentido común y me miró con calma antes de decir:
  —¿Quiere decir que sus cosas están muy apretadas?
  Asentí desesperado y revisaron mi maleta sin problema. Sí, definitivamente debí haber tomado un café antes de pasar por seguridad. © mokomull / Reddit

• Regresábamos en familia de unas vacaciones en la playa, pero no habíamos comprado los boletos de regreso con anticipación. Al llegar a la estación, nos llevamos una sorpresa: no nos alcanzaba el dinero para comprarlos. Mi mamá empezó a llamar a familiares para pedir ayuda, mientras mi hermana y yo deambulábamos por los alrededores. De repente, encontramos dinero en el suelo, ¡justo lo necesario para los boletos! Días después, ya en casa, mi mamá notó que exactamente la misma cantidad de dinero había desaparecido de su cartera. Al parecer, el universo solo nos hizo un préstamo y luego cobró su deuda. © Habitación № 6 / VK
• Tengo muy mala memoria. Dejé mi maleta en la consigna de la estación y me olvidé de ella durante casi un mes. Cuando volví, el casillero estaba vacío, pero habían trasladado mi maleta al almacén de objetos perdidos. Para mi sorpresa, todo seguía intacto. Lo único molesto fue que tuve que pasar una hora enumerando cada cosa con un empleado: “Un par de calcetines, una tetera, etc...” © pzzzzv / Pikabu
• Estaba en una cafetería del aeropuerto cuando, de repente, un grupo de chicas pasó corriendo, gritando y agitando carteles con la foto de algún cantante famoso. Justo detrás de ellas, caminando tranquilamente con su equipo de seguridad, iba Eminem. Lo mejor de todo: ¡las fans ni siquiera lo notaron! No pude evitar preguntarle: —¿No estaban esperándolo a usted? Eminem se estremeció y murmuró: —Dios mío, espero que no. © Fifth_Wall0*** / Reddit
• Conocí a un tipo en el aeropuerto y nos pusimos a platicar mientras esperábamos el vuelo. Cuando anunciaron el abordaje, nos dimos cuenta de que no solo íbamos en el mismo avión, sino que también teníamos asientos en la misma fila. Al aterrizar, nos despedimos; yo aún tenía que viajar dos horas en auto hasta otra ciudad. Llego al hotel y, a la mañana siguiente, en el desayuno ¡me lo encuentro otra vez! Para rematar, descubrimos que habíamos estudiado juntos en la misma clase años atrás. © riphitter / Reddit
• Pasé 18 horas atrapado en el aeropuerto porque mi vuelo se retrasaba una y otra vez. Olvidé mi cargador, el celular se quedó sin batería y, para colmo, perdí mi tarjeta, así que no tenía cómo comprar nada. ¡Fue una auténtica prueba de supervivencia! © FeeFiFoF*** / Reddit

• Una vez vi a un hombre que, justo antes de su vuelo, se comió seis huevos cocidos, uno tras otro. Lo curioso es que no parecía alguien desaliñado, sino un caballero impecablemente vestido con un traje de primera. Luego, se levantó y se fue, dejando todas sus pertenencias atrás. En la puerta de embarque ya no lo vi. En cualquier caso, me tranquilizó saber que ese personaje no estaría sentado a mi lado. © TheDogWhistle / Reddit
• Pasé por el control de seguridad y, justo cuando mi bandeja atravesaba el escáner, mis audífonos se cayeron. El cable se enredó en los rodillos de la cinta transportadora y, como resultado, todo el mecanismo se detuvo. Mientras los empleados discutían y la fila se impacientaba, yo discretamente agarré mi mochila y desaparecí. © geeksquadwho / Reddit
• Estaba sentada en el aeropuerto y escuchaba un gruñido furioso a mi lado, pero no lograba identificar de dónde venía. Finalmente, me di cuenta: una señora tenía un transportín en el regazo y dentro había un gato completamente enfurecido. © 2gecko1983 / Reddit
• Nuestro vuelo se retrasó porque un pasajero no se presentó en la puerta de embarque, aunque su maleta ya estaba en el avión. Tuvieron que localizarla y retirarla por razones de seguridad. Al aterrizar, fui a recoger mi equipaje. Esperé casi una hora, todos recogieron sus maletas y solo quedó una que claramente no era la mía. Así que, al final, parece que no sacaron la maleta del pasajero desaparecido, sino la mía. © 7evenstar / Reddit

• Cuando tenía unos cinco o seis años, viajaba con mis abuelos a otra ciudad y teníamos que hacer una escala. Mientras esperábamos el tren, mi abuela decidió salir a recorrer la ciudad, dejando a mi abuelo a cargo del equipaje. Me quedé con él, hasta que se distrajo y fue a comprar algo en un puesto. Como me aburrí, decidí seguir a mi abuela. La encontré y le dije que el abuelo me había dado permiso para acompañarla. Cuando regresamos dos horas después, mi abuelo estaba al borde del colapso, por la angustia después de haberme buscado por toda la estación. © Oído por ahí / VK
• Perdí mi cartera y mi pasaporte en la estación. Mantuve la esperanza de que alguien honesto los encontraría. No llevaba mucho dinero, pero sí muchas tarjetas, descuentos y, lo más valioso para mí, un boleto de cine de Barcelona donde había estado con mi novio. Horas después, mi teléfono comenzó a recibir mensajes de los bancos con códigos de confirmación para pagos. Alguien había encontrado mi cartera y estaba intentando vaciar mis cuentas. Fue una experiencia realmente frustrante. © Oído por ahí / VK
• Viajaba de regreso a casa y, al hacer el check-in, me informaron que el vuelo estaba sobrevendido y que tendría que esperar otro, en cinco días. Tenía 16 años, ni un centavo en la cartera y ningún lugar donde quedarme. Me puse a llorar, hasta que, de repente, una empleada me dijo que el piloto había ofrecido llevarme en la cabina. Corrí emocionada hacia el avión, pero en ese momento me enteré de que una pasajera canceló su vuelo en el último minuto, así que terminé con un asiento en primera clase. Fue un día de emociones extremas. © happyskittles / Reddit
• Una vez vi a un hombre en el aeropuerto que, al notar una puerta de embarque vacía, decidió aprovechar el tiempo, haciendo ejercicio. Se puso a hacer sentadillas, flexiones y toda una rutina de entrenamiento como si estuviera en el gimnasio. © thepatman / Reddit

• Estaba esperando mi vuelo, que se había retrasado un poco. De repente, una azafata se acercó, se sentó a mi lado y, con un tono amable, me preguntó: —Cariño, ¿dónde está tu acompañante? Me quedé completamente en shock. Al notar mi expresión, la azafata me miró con más atención y, sorprendida, exclamó: —¡Pero si no eres una niña! Resulta que algún pasajero había informado a la tripulación que parecía haber un menor viajando solo. Para que quede claro, tenía 22 años. © Fieryirishplease / Reddit
• Fui testigo de una escena surrealista en el aeropuerto. Un hombre discutió a gritos con el personal de seguridad durante media hora porque no le permitían llevar una motosierra en la cabina del avión. Porque, claro ¿qué podría salir mal? © F*****Unicorn / Reddit
• Una vez pasé más de tres horas atrapado en el control de seguridad del aeropuerto. Me revisaron el equipaje de arriba abajo, inspeccionaron cada objeto con lupa y me hicieron las mismas preguntas una y otra vez. Como si eso no fuera suficiente, mi mochila pasó por la máquina de rayos X durante otra hora. Al final, descubrieron que llevaba dentro una estructura desmontable y no lograban entender qué era. © FrenchAffair / Reddit
• Nos quedamos varados en el aeropuerto después de un vuelo nocturno y tuvimos que esperar a que comenzaran a salir los autobuses. Pasamos dos horas en una sala completamente vacía: sin cafeterías, sin tiendas y para colmo, el Wi-Fi gratuito dejó de funcionar. Mi esposo empezaba a impacientarse, así que decidí salir a explorar y averiguar el horario de los autobuses. Apenas crucé la puerta, me llevé una gran sorpresa: un enorme pasillo lleno de tiendas, restaurantes y cientos de personas caminando de un lado a otro. ¡El aeropuerto estaba en plena actividad! Al parecer, por pura torpeza, habíamos terminado en una sala de tránsito completamente aislada. Para colmo, las paredes de vidrio que nos separaban del pasillo estaban cubiertas con pintura opaca, así que ni siquiera nos dimos cuenta de lo que había al otro lado.

Por cierto, el vuelo en sí también puede ser una experiencia inolvidable. A algunos les toca la suerte de viajar con compañeros de asiento peculiares, y a otros con miembros de la tripulación.