27 Criaturas marinas con talentos ocultos
El cangrejo Heikegani vive frente a la costa de Japón y tiene un patrón distintivo en su caparazón que parece un rostro humano. Más específicamente, la cara de un samurái enojado, de ahí el apodo: el cangrejo samurái. El camarón limpiador de rayas escarlata es un autoestopista natural: se para en el fondo del mar y agita sus largas antenas para que los peces y los animales marinos bajen y lo recojan. Luego paga el viaje limpiando al transportador de bacterias y plancton. Las salpas marinas a menudo se confunden con las medusas, aunque están más cerca de las carabelas portuguesas. ¡Son tan rápidas que luego de nacer, llegan a adultas en menos de 48 horas!
Las islas Galápagos son legendarias. ¡Tienen tortugas gigantes, piqueros patiazules, cangrejos rojos y peces murciélago de labios rojos! Pero si alguna vez has nadado por allí, es posible que hayas visto algo realmente inesperado en el agua: ¡iguanas! ¡En todas partes! Estos grandes reptiles marinos comen las algas que crecen en las rocas submarinas... ¡son vegetarianos estrictos! ¡Apuesto a que los peces están felices por eso! Una cola larga y plana adaptada para nadar les ayuda a moverse, y sus garras afiladas las mantienen en las rocas para tomar el sol todos los días. ¡Pero obsérvalas de cerca, estornudan mucho! No tienen gripe ni nada; ¡estornudan sal! Una glándula especial mantiene la sal fuera de su nariz, ya que tienen que deshacerse de ella de alguna manera. Suena doloroso. ¡Lo bueno es que no les importa que estemos en el agua con ellas! ¡Debido a que las islas han estado tan aisladas, las criaturas aquí no tienen miedo de los humanos!
¡Los peces también pueden volar! Gracias a sus aletas en forma de alas, los peces voladores pueden volar a unos 180 m, una distancia casi igual a dos campos de fútbol. Necesitan volar para escapar de los depredadores. El camarón esqueleto podría ser objeto de pesadillas si no fuera tan pequeño. Tal como está, parece un insecto palo, pero casi completamente transparente. ¡Esta criatura se parece más a un pez de una película de terror que a un animal marino! El rape de mar profundo se encuentra a una profundidad de 975 m y no carece de características extrañas: dientes afilados como navajas, un cuerpo deforme y una mirada inquietante. Pero quizás lo más espeluznante del rape es la forma en que atrapa a su presa. Tiene un apéndice tipo caña de pescar en la frente en cuyo extremo hay una luz brillante que atrae a las presas. Una vez que los animales se acercan lo suficiente a la luz, ¡BAM! Son capturados por las enormes mandíbulas del rape. Estos chicos son capaces de comer presas incluso más grandes que ellos. Así que sus ojos no son más grandes que su estómago...
Las estrellas de mar pueden cubrir a sus presas con su estómago y comerlas fuera de su cuerpo. Luego, simplemente vuelven a traer su estómago adentro. Bueno, eso es útil. Sus parientes, los pepinos de mar, pueden hacer el mismo truco. ¡Excepto que dejan parte de sus entrañas para asustar a su atacante! Está bien, ¡las partes que les faltan vuelven a crecer rápidamente! El calamar cacatúa o calamar de cristal es un género grande cuyos miembros pueden alcanzar un tamaño bastante impresionante. Algo que tienen en común es que sus cuerpos son transparentes y los órganos internos brillan en la oscuridad. A pesar de que parece que el pulpo peludo se ha olvidado de peinarse por la mañana, en realidad es su piel la que se dispersa en todas direcciones. Las criaturas que anden cerca tendrán dificultades para darse cuenta de dónde está el pulpo, supongo.
La langosta peluda vive en los arrecifes, escondiéndose de sus enemigos entre las grietas. Si tienes la suerte de verla, notarás al instante la drástica diferencia entre sus pelos blanquecinos y sus vibrantes garras rosa y violeta. Si pisas un erizo de mar, ¡lo sabrás de inmediato! ¡Mira esas espinas! Si bien no son agresivos, ¡tienen una gran defensa contra cualquier criatura que quiera comérselos! ¡Púas y una mordedura venenosas! Elige de dónde quieres tu veneno, literalmente. Viven en todos los océanos del mundo, por lo que evitarlos está fuera de discusión. En su mayoría pasan el rato en aguas poco profundas, escondiéndose en estanques de rocas y arrecifes. Entonces, ¡la gente inconsciente los pisa mucho! Las largas púas venenosas del erizo parecen agujas y pueden entrar bastante profundo, además de que liberan una fuerte toxina. Entonces, ¿cuál es la cura? Retira las púas rápidamente y lava la herida con agua salada.
Las tortugas marinas lloran constantemente. No están tristes ni nada, el llanto es solo porque excretan el exceso de sales de su cuerpo a través de sus lágrimas. ¡Los tentáculos de las cubomedusas crecen hasta 3 m de largo! ¡Y cada tentáculo tiene 5000 células urticantes! No está mal para una criatura que es principalmente agua. Su veneno es lo suficientemente fuerte como para paralizar cualquier cosa que quiera comer. Ahora, si te pica, te va a doler, ¡mucho! ¡Sus toxinas contienen proteínas que afectan el corazón, las células de la piel e incluso nuestro sistema nervioso! ¡No es de extrañar que se considere una de las criaturas más peligrosas del planeta! No recomendaría usar protector solar, refrescos, café u otros métodos más antiguos. ¡No funcionan! Tu mejor opción es un poco de agua de mar. ¡Parece que son las medusas las gobernantes del océano, no los tiburones!
La Glaucilla marginata es una especie de babosa de mar que habita cerca de la superficie del agua. Nada boca abajo y da saltos mortales para conseguir comida, y admitámoslo, se ve muy linda. Cuando algún objeto extraño entra en el caparazón de una ostra, ya sea un grano de arena, un parásito o una basura, las paredes internas del molusco se irritan. Como el animal no puede escupir el objeto, lo envuelve en finas capas que se separan del cuerpo. Estas capas nacaradas se acumulan hasta formar una perla redonda. En el pasado, la gente creía que las perlas eran lágrimas de sirenas. ¡Ahora sabemos que son solo desechos decorados!
Los delfines tienen una comunicación muy desarrollada. Se llaman unos a otros por su nombre. Cada delfín responde a un sonido específico. En su mayoría dicen: “Deja de llamarme, Flipper”. La orca es la especie de delfín más grande. ¡Y en realidad tienen culturas diferentes! ¡Dos orcas de diferentes grupos sociales ni siquiera entenderán el idioma de la otra! Son el único animal conocido que hace esto. Me pregunto si habrán desarrollado algún traductor de Google para delfines. El camarón boxeador bandeado recibió un nombre muy acertado: tiene bandas de color en todo el cuerpo y siempre se para en una pose similar a la de un boxeador, listo para atacar. El caracol burbuja es otra babosa de mar, y definitivamente se parece a una. Sin embargo, tiene una habilidad especial: puede cavar agujeros rápidamente en el fondo del mar y esconderse de los enemigos dentro de ellos.
El pez serpiente, como su nombre lo indica, se parece mucho a una serpiente, pero tiene una característica muy distintiva: puede caminar sobre sus aletas. Gracias a esta peculiaridad, se arrastra fácilmente de un lecho de agua a otro, eligiendo los hábitats más a su gusto. En el camino, un pez serpiente puede tener hambre, por supuesto, por lo que a menudo come pequeños pájaros y roedores. Sin embargo, puede crecer bastante y cazar animales aún más grandes. ¿Puede haber algo más extraño que caminar por el bosque y de repente ver un pez enorme y dentudo acechando a un conejo?
¡La tortuga caimán atrapa a su presa yendo a pescar! Su lengua parece un gusano, y la tortuga espera con la boca bien abierta en el fondo de un arroyo, lago o estanque hasta que algún pez desprevenido muerde el anzuelo. Entonces... ¡snap! Las mandíbulas se juntan en un abrir y cerrar de ojos, ¡y la cena está servida! La medusa de fuegos artificiales normalmente es invisible en el abismo oscuro donde habita, pero cuando se expone a la luz, refleja y brilla maravillosamente. El engullidor negro puede ser pequeño, pero no te equivoques: ¡podría tragarse fácilmente a tu cachorro! Puede abrir mucho la boca, lo que le permite tragar presas del doble de su tamaño. El pez tigre come todo lo que encuentra, y dado su propio tamaño y el de sus monstruosos dientes, puedes imaginar que encuentra mucha comida. Se alimenta principalmente de otros peces, pero cuando el alimento es escaso, puede saltar fuera del agua y atrapar insectos o pájaros pequeños en pleno vuelo. No es tan grande como para comerse a un humano, por supuesto, pero el nombre debe advertirte que fácilmente puede morderte el brazo o la pierna.
Tu cerebro controla tus brazos y tus piernas, pero en el caso del pulpo, cada brazo es algo independiente, ya que posee su propio cerebro especial, que se mantiene unido al cerebro central. El cerebro central es como un director de orquesta que envía señales a cada brazo, por ejemplo: “muévete a la izquierda, hay un cangrejo detrás de la esquina”, o “toca el pie de este tonto humano, vamos a jugar con él un poco, jejeje...”. No importa lo inteligentes que puedan ser sus brazos, un pulpo igual necesita cuidarlos todo el tiempo.