6 Ejercicios que puedes hacer sin levantarte de la cama

Hay muchos entrenamientos de gimnasia que pueden ayudarte a deshacerte del exceso de peso o a conseguir músculos más pronunciados. Sin embargo, existe una serie de ejercicios que pueden hacer mucho más que esto: te prepararán para el día, normalizarán los procesos de tu cuerpo, mejorarán tu estado de ánimo, armonizarán el funcionamiento de tus órganos internos y enderezarán tu columna vertebral.

En Genial.guru hemos seleccionado unos ejercicios para los que no tendrás ni siquiera la necesidad de levantarte de tu cama, ¿no es esto genial? ¡Ahora tendrás una razón de peso para pasar unos minutos más en la cama!

6. Ejercicio de relajación “helado derritiéndose bajo el sol”

No salgas de tu cama inmediatamente te despiertas. Estira un poco. Retira tu almohada de debajo de tu cabeza y enrolla una toalla en forma de cojín de aproximadamente 8 cm de diámetro; sería mucho mejor que lo dejaras listo desde la noche anterior.

Coloca el cojín debajo de la espalda de modo que quede justo debajo de los omóplatos y coloca tus brazos justo detrás de la cabeza. La tarea ahora es relajarse y estirarse sobre el cojín, como cuando un helado se derrite al sol. Sonríe, suelta tu cuerpo, piensa en cosas positivas por un momento, suelta todos tus músculos mientras aún estás acostado de espaldas sobre el cojín.

Todos los otros ejercicios vas a realizarlos con el cojín por debajo de tu cuello.

5. Estiramiento con los brazos como “lavando el rostro”

Coloca el cojín debajo de tu cuello. Frota tus palmas para calentarlas y haz el movimiento como si estuvieras “lavándote” el rostro, la frente y en la parte posterior de la cabeza, con las palmas de tu mano, y luego pásalas alrededor de las orejas. Haz lo mismo con tu cuello, pecho y estómago.

4. Estiramiento similar a “escurrir algo de tu cuerpo”

Aún recostado sobre tu espalda con el cojín debajo de tu cuello, lleva la mano derecha a la izquierda y, aplicando algo de fuerza, frótala desde el dedo meñique hasta el codo, y luego bájala hasta la cintura, un movimiento similar a como si estuvieras “escurriendo todo lo malo del brazo”. Repite lo mismo con el otro brazo.

Haz lo mismo con tus piernas, como escurriendo todo lo malo de ellas, primero agarrando los dedos de los pies y subiendo por el tobillo hasta la entrepierna.

3. Estiramiento de la “raíz del pie”

Recostado sobre tu espalda con las rodillas dobladas, toma el talón izquierdo y frótalo con fuerza. Luego, empuja la planta del pie hasta donde toca el suelo cuando camina: estas son tus “raíces”. Puedes encontrarlas debajo de cada uno de los dedos de tus pies y en la planta y el talón.

2. Estiramiento total del cuerpo

Estira tu cuerpo con las manos detrás de la cabeza y los dedos entrelazados. Tira de los dedos de los pies hacia arriba y hacia abajo los talones. Luego baja lentamente los brazos y los dedos de los pies como una bailarina. Repite un par de veces.

Ahora debes hacer un estiramiento lateral extendiendo el brazo y la pierna opuestos. Dobla la pierna de soporte en la rodilla e inclínala hacia un lado mientras giras la cabeza hacia el brazo estirado. Luego cambia el brazo y la pierna y repite.

1. Flexiones para abdominales inferiores

Tira de las rodillas flexionadas hacia tu abdomen y pon los brazos extendidos hacia los lados, al mismo tiempo que colocas las piernas flexionadas hacia la izquierda y giras la cabeza hacia la derecha. Luego repite lo mismo con el otro lado. Haz esto tantas veces como quieras.

Para lograr mejores resultados, levántate en la cama y colócate en posición de gateo, practicando la respiración diafragmática.

¡Ahora estás listo para todo lo que el día pueda tener para ti! ¡Déjanos tu opinión al respecto en la sección de comentarios!