Este abuelo no puede ser más genial :D
Un abuelo coreano hace dibujos en Instagram para sus nietos que viven en otro país para acortar la distancia entre ellos
Chan Jae Lee es un inmigrante coreano en Brasil cuyos nietos viven en Nueva York y Corea del Sur. Su hijo lo animó a dibujar para los chicos y vender sus obras para poder visitar a la familia con frecuencia, pero, lo que comenzó como un proyecto familiar, se ha convertido en todo un fenómeno gracias a las redes sociales. Hoy, “Grandpachan”, como se le conoce en internet, publica libros, expone en galerías y hasta ganó un premio Webby junto con su esposa.
La idea
“Grandpachan”, un inmigrante retirado de 77 años, vivía en Brasil con su esposa y la familia de su hija. Su trabajo diario era llevar a sus dos nietos, Arthur y Allan, a la escuela. Un día, su hija decidió que se mudaría con su esposo y sus niños de vuelta a Corea del Sur, dejando al abuelo triste y sin una actividad que lo motivara.
Su otro hijo, quien vive en Nueva York, intentó convencerlo de que retomara su viejo talento del dibujo y publicara las imágenes en Instagram, pero el abuelo detestó la idea. No fue sino hasta que nació su nieto menor, Astro, que entendió que dibujar podía ser el mejor medio de comunicación entre él y los tres pequeños, así como una forma de dejarles el legado de su cultura y su historia familiar. Así nació Drawings For My Grandchildren (Dibujos para mis nietos).
1. Cada dibujo está acompañado por una historia del abuelo, la cual es redactada por su esposa en coreano y luego traducida al inglés y portugués por sus hijos. De esta forma, toda la familia se mantiene en contacto permanente.
“Hay muchas mariposas volando, ¿verdad? Recuerdo cuando corría e intentaba atraparlas durante mis vacaciones de verano. Era una tarea de la escuela. En Corea, había muchas mariposas amarillas y blancas. Cuando veía una de colores, mi corazón latía más rápido. Me impresionó mucho ver mariposas azules cuando llegamos a Brasil”.
2. Compartir las memorias familiares con los más jóvenes es parte esencial de ser un abuelo y la distancia no iba a impedírselo a “Grandpachan”:
“Creo que era 1963. Me llamaron del grupo de literatura de la universidad diciendo que habría una exhibición de poesía. Me preguntaron si podría hacer algunas ilustraciones para los poemas. Así que fui a la reunión. Ahí, una chica me mostró su poema y me pidió que le hiciera un dibujo. El título era ‘Apple’ (Manzana). Era un poema muy corto. No sé si me gustaba la chica o su poema, pero todo lo que sé es que hice un dibujo y ella parecía satisfecha. En el último día de la exhibición, celebramos comiendo palomitas de maíz. ¿Quién creen que era la chica? Niños, así fue cómo la historia empezó”.
3. “¿Cómo era mi mamá de niña?” es una pregunta que frecuentemente los abuelos deben responder, y “Grandpachan” lo hizo a través de un dibujo:
“Arthur y Allan, ¿saben de quién se acordó la abuela cuando supo que Barbie cumplía 60 años? De su madre. Antes de emigrar a Brasil, ella solía jugar con su Barbie todos los días, hablándole y cambiándole la ropa. La pequeña de seis años no se sintió sola cuando llegó a Brasil gracias a su muñeca Barbie. Se convirtió en la mejor amiga de una niña inmigrante, y siempre fue un motivo de agradecimiento para la madre que tenía que ir a trabajar”.
4. Por supuesto, el abuelo les recuerda a los padres que no sean tan duros con los niños, pues ellos también hicieron bastantes travesuras:
“Astro, no soy de los que se enoja fácilmente. No hay muchas razones para enfadarse. Sin embargo, hubo un episodio inolvidable en el que sentí la rabia más grande de toda mi vida. Creo que fue cuando tu padre tenía unos dos años. El niño estaba muy callado, así que fui a verlo. Había sacado y esparcido todos mis preciosos discos de vinilo, los cuales había estado coleccionando uno a uno por las canciones que amaba escuchar, y él estaba rayándolos todos. ¡Oh, no! Mi cabeza explotó con ira. Pero no había nada que pudiera hacer”.
5. También aprovecha para enseñarles a sus nietos sobre algunas tradiciones coreanas, como el baile Jang-Gu:
“Hubo un festival de inmigración en São Paulo el 11 y 12 de junio. Esta es la famosa bailarina coreana Lee Mun Hee presentando un baile tradicional de tambores: el ’Jang-Gu’”.
6. “Grandpachan” no puede ocultar la felicidad al ver que su cultura vive en sus descendientes:
“Wow, ¡¡¡Astro es un niño Taekwondo!!! Astro, la abuela conoce la academia de Taekwondo a la que vas cerca de tu casa. Una mañana, ella miró su interior por una ventana grande. Vio a los niños usando un dobok con cinturones amarillos y rojos gritando ’¡Ayah! ¡Ayah!’ y se preguntó: ’¿Cuándo podrá Astro sentarse ahí también?’. ¿Quién hubiera podido pensar que el Taekwondo de Corea resonaría en Nueva York para nuestro Astro? ¿Y que, además, él se porte tan bien?”.
7. Ver cómo crecen los nietos desde la distancia puede convertir a cualquiera en un sentimental:
“Arthur y Allan, esto es de cuando estaban en 4to y 5to grados en la escuela Jardim São Paulo, cuando el abuelo los llevaba al colegio. Se puede ver la relación entre dos hermanos en esta imagen de ustedes caminando uno al lado del otro desde atrás. Siento alegría de solo verla. Arthur, aunque solo tienes un año y medio más que Allan, siempre cuidabas a tu hermano menor, y Allan, ¡debes haberte sentido muy confiado de tener un hermano mayor! Además de siempre cargar la mochila de Allan, Arthur estaba constantemente cuidando a su hermano: ’Allan necesita orinar. Tiene sed’. A veces lo traducías en coreano en caso de que el abuelo no entendiera. Dos hermanos que se han adaptado bien en la nueva sociedad coreana. Dos hermanos que parecen uno. ¡Bravo! ¡Bravo!”.
8. Su vida en Brasil también ha estado llena de felicidad y aprovecha cada oportunidad para contarles anécdotas a sus nietos:
“Desperté porque hacía frío. Afuera de la ventana todo se veía gris. La televisión dice que estamos a 13 grados Celsius a las 8 de la mañana. Dicen que usemos ropa cálida porque habrá lloviznas. En días como este, había un amigo que me llamaba para que comiéramos feijoada en el almuerzo. Sí, el plato más tradicional de Brasil, la feijoada, es lo mejor. Ustedes también aman la feijoada. ¡La mejor del mundo, su feijoada favorita! Lo recuerdan, ¿verdad?”.
9. Un abuelo nunca está demasiado lejos para enorgullecerse de los más jóvenes:
“Arthur, cuando vi tu foto afeitándote por primera vez a los 14 años, tu abuela me dijo que se sintió muy orgullosa de ti. ¿Sabes por qué? Quizás porque ya no eres un niño, sino un hombre. No puedo recordar para nada cuándo comencé a afeitarme. Lucías un poco desaliñado últimamente. ¿Fue tu mamá quien sugirió que lo hicieras? ¿Te sentiste fresco? ¿Te fue bien? Mi muchacho, no fue tan fácil, ¿verdad? Ahora que comenzaste a afeitarte, debes hacerlo diligentemente”.
10. También está muy dispuesto a regresar a la niñez y jugar a lo que le pidan
“Astro, ¿sabías que un director de cine nació en nuestra familia? En octubre del año pasado, Allan le dijo a la abuela que quería un traje como regalo de cumpleaños y hasta envió la foto del traje, llamado ’Traje Ghillie’. La abuela se impresionó. ’Oh, por Dios, ¿qué es esto?’. En realidad era el traje de camuflaje usado por los francotiradores del juego ’Battleground’. En fin, llegó después de algunos días y Allan salió a la calle con él. Y esta vez tuvo la idea de grabar al abuelo usándolo y bailando. Título de la película: Sin título, director: Allan, fotografía: Allan, cámara: Allan, disfraz: Allan, iluminación: Allan, coreografía: Allan, producción: Allan, actor principal: el abuelo”.
11. La mayor ilusión es que sus nietos jueguen todos juntos, así sea en un mundo fantástico
“¡Miren! ¡Astro ama los dinosaurios y finalmente se hizo amigo de uno! Entonces llamaste a tus primos mayores para jugar juntos, ¿cierto? ¡Quieres deslizarte y jugar! Astro quiere deslizarse por el lado más empinado. Y los primos grandes lo detienen y le dicen ’¡No! ¡Por aquí!’. El dinosaurio quiere que los chicos estén seguros y simplemente se queda quieto”.
12. Gracias a la tecnología, toda la familia puede estar un poco más cerca que antes:
“En realidad es un mundo asombroso. Ahora que podemos hablar mirándonos los unos a los otros, no se siente como que están lejos. Cuando Arthur vio la foto del abuelo en Messenger y dijo ’¿por qué tu panza está tan grande?’, me puse un poco nervioso. Cuidaré más lo que como y también haré más ejercicio. Además, nuestro inteligente Astro, quien me ve en las videollamadas, tendrá a su abuelo en su mente y corazón, ¿cierto? Me hace feliz saber que cuando nos veamos de nuevo la próxima vez, no se preguntará ’¿Quién es este viejito?’. Todas las familias deben haber hablado así entre ellas durante el año nuevo”.
13. A medida que pasa el tiempo, también va adquiriendo experiencia en su cuenta en Instagram y los dibujos se vuelven multisensoriales:
“Astro, ¿fuiste a la playa? Los pájaros vienen volando y los cangrejos son tan rápidos que es realmente difícil atraparlos, ¿cierto? Todos están tratando de sobrevivir. En la arena verás muchas cosas que te gustarán. ¿Hay un parque mejor para que un niño juegue que la playa?”.
14. El movimiento del dibujo inspira las lecciones inolvidables de “Grandpachan”:
“La abuela ama las nubes. Tanto como Hermann Hesse. Ella quiere volar en el cielo con ustedes, cabalgar las nubes, igual que Sinbad. Hoy el cielo se abrió, azul y despejado, para que uno pueda ver las montañas a lo lejos. Así que dibujé unas nubes con ustedes sobre ellas. ¡Miren! Astro se está deslizando en las nubes. Allan encuentra el mundo de abajo fascinante. Mientras Arthur, como el mayor de todos, los está guiando. Pero no lo olviden. No deben confiar en las nubes. Las nubes desaparecerán pronto. Sin dejar rastro. Así que, ¿qué deben hacer? La alegría es momentánea. El abuelo y la abuela lo saben. Espero que sus días sean como este cielo despejado, como el cielo de Seúl sin el polvo”.
15. Este abuelito trascendió las redes y sus dibujos ahora se exponen en galerías también:
“Chicos, hoy fue un día increíble que me hizo olvidar el calor. Ir al @eyelevel_traumwelt de Daekyo en Paju y ver la exhibición interactiva ’Carta para ustedes’ con los tres, me hizo regresar a cuando era niño al ver mis dibujos renacer de una manera nueva. ¿También les gustó? ¿Cuál fue el más grandioso? ¿Los dibujos que se convertían en un video gigante? ¿O los rompecabezas? ¿O escuchar las canciones detrás de mis dibujos? ¿O la parte de escribir una carta? Me gustó mucho cuando Arthur recreó sus gafas gigantes de sol igual que en mi viejo dibujo, y la sala de Galápagos donde uno podía apretar varios botones. Visión, audición, tacto... la creatividad es cuando hacemos que nuestros pensamientos se muevan. La exhibición estará hasta el 12 de septiembre, ¿quieren ir de nuevo? ¡Démosles las gracias a la amable gente de Daekyo que trabajó tan duro para hacer posible este maravilloso evento!”.
16. Y no podemos olvidar que todo comenzó con la historia de amor de una poeta y un dibujante:
“Chicos, al fin nuestro libro se publicó. Sí, nuestro libro ’Mirando hacia atrás, la vida fue hermosa’, una colección de los dibujos del abuelo y los escritos de la abuela para Instagram está en las librerías de Corea. Arthur, Allan, en 2015 cuando estaban en 5to y 4to grados, se mudaron de Brasil. Cómo los extrañamos. Luego nació Astro ese mismo año. ¡Qué alegría! Este libro se hizo con todos esos sentimientos. ¿No es linda la portada? Agradecemos a todos nuestros seguidores de Instagram que siempre nos han apoyado tanto y también al personal de Suo Books, quienes trabajaron muy duro por este libro. El libro solo está en coreano por el momento, pero esperamos que la versión en inglés salga muy pronto para que Astro también pueda disfrutarlo algún día”.
“Grandpachan” continúa creando un legado para que sus queridos nietos puedan sentir que crecieron junto a él, pues se encuentra lejos, pero jamás ausente de sus vidas.
¿Qué te parece el amor de este abuelo por su familia? ¿Te impresionaron sus dibujos? Cuéntanos en los comentarios si te gustó esta conmovedora historia.
Comentarios
Preciosas sus obras
Un gran artista con un gran corazón :)
Qué bueno transmitir sus vivencias a través del dibujo
Yo ya le sigo en Instagram. Me encantó la historia