13 Historias de suegras que demuestran que la realidad supera a la ficción

Quienes siempre han querido casarse, seguramente han imaginado cómo será su propuesta de matrimonio. Desde algo simple en casa, rodeados de sus amigos y familiares más cercanos, hasta una propuesta excéntrica que deje a más de uno con la boca abierta, cualquiera es válida. Pero, ¿qué pasa cuando una sorpresa se transforma en algo casi peligroso? A esta usuaria de la red le tocó enfrentarse a esta situación bastante peculiar, y esta fue su experiencia.
Mi mejor amiga, Emily, ha estado saliendo con Chris por casi cuatro años. Yo la amo muchísimo y siempre he apoyado su relación a pesar de que Chris me parece algo excéntrico. A él le encantan las sorpresas y ese tipo de cosas. Como flash mobs y búsquedas del tesoro que nadie quiere hacer.
Bueno, pues estaba visitando a Emily. Estábamos hablando, poniéndonos al día, cuando una camioneta blanca sin placas se detuvo al lado de nosotras. Dos hombres enmascarados salieron del vehículo y tomaron a mi amiga. Ella empezó a gritar. Yo estaba en pánico.
Así que hice lo que cualquier persona normal y asustada haría: tomé mi gas pimienta (que es legal en donde vivo), y comencé a gritar barbaridades y me volví loca. Le rocié gas pimienta a uno de los tipos, al otro lo golpeé en la pantorrilla, y literalmente jalé a Emily de su abrigo mientras gritaba que llamaran a la policía.
Resulta que eran Chris y dos de sus amigos. Estaban intentando hacer esta broma rara de “asalto que en realidad es una propuesta de matrimonio” porque Emily había dicho que quería una “propuesta como las de las películas”.
Chris estaba gritando y llorando por culpa del gas pimienta. Emily estaba asustada mientras llegaban los policías. Fue caótico.
Ahora Chris está enojado. Me dijo que arruiné el momento más significativo de su vida y que lo avergoncé enfrente de todos. Emily me dijo que entiende por qué me asusté, pero que ojalá yo hubiera leído la sala.
Pero, ¿cómo se supone que yo iba a saber? Todo parecía tan real. Ella estaba llorando, ellos traían pasamontañas, y ¡literalmente había una camioneta! Todos actúan como si yo hubiera exagerado, pero realmente pensé que la podían estar secuestrando. ¿Estoy mal por haber arruinado su propuesta de matrimonio?
Seguro a esta usuaria ya le quedó bien claro que el humor es subjetivo y algo que para su amiga y su pareja es normal, o hasta romántico, para muchos otros es una completa locura. ¿Crees que esta chica hizo lo correcto al reaccionar como lo hizo?