Cómo viven los vagabundos de diferentes países del mundo
Aunque esto suene raro, en algunas ocasiones, ser vagabundo es un estilo de vida. En algunos países, las personas que se quedan sin un techo para cubrirse reciben apartamentos gratuitos, ropa nueva y hasta pueden darse el lujo de ser vegetarianos.
Genial.guru te contará cómo viven las personas sin un lugar específico de residencia en diferentes países, cuáles son sus derechos y prioridades.
1. Japón
En Japón, ser un vagabundo es un estilo de vida. Los vagabundos tienen su propio credo: ellos no se dedican al robo, no discuten con la policía y generalmente tratan a los demás con respeto. Además, es raro encontrar vagabundos que se dediquen a pedir limosna, esto va en contra de su honor.
Muchos vagabundos trabajan y ganan dinero, y pasan la noche en cajas de carton. También hay quien eligió este "estilo de vida libre" para purgar sus pecados del pasado. Estas personas se difieren de sus "colegas" los cuales cuentan con departamentos o casas alquiladas.
2. Alemania
En Alemania, cada ciudadano sin hogar tiene su propia identificación, la cual le permite viajar gratuitamente en el transporte, alimentarse en comedores comunitarios y dormir en los parques y el metro. Pero, incluso si no tienen la identificación para vagabundos, cuentan con cafeterías especiales y refugios que les brindan sus servicios por unos pocos centavos.
Los vagabundos alemanes se dedican a pedir limosna, pero discretamente. Son pocas las personas que los miran con desprecio. Frecuentemente se puede ver como las personas les llevan comida, ropa o los invitan a cubrirse de la lluvia en sus casas.
3. Israel
En Israel, el gobierno se encarga principalmente de los vagabundos. Los trabajadores sociales constantemente buscan vivienda gratuita o económica, hoteles, hostales y recámaras para ellos. Sin embargo, este proceso es muy lento. La principal dificultad está en que 2 de cada 3 vagabundos son emigrantes, quienes hablan muy poco hebreo o en general no saben nada del idioma.
El principal ingreso de los vagabundos locales proviene de los turistas, quienes llegan para descansar y ver la ciudad.
4. Francia
En París, a las personas sin hogar las llaman clochard y la cantidad de ellos simplemente está por las nubes. En los últimos años, emigrantes de países pobres se han sumado a los clochards locales.
Los vagabundos franceses viven por todas partes: en los parques, metro, callejones. En la sociedad es los clochards existe una jerarquía: los novatos se instalan en las áreas más remotas a las afueras, y los "experimentados" ocupan los mejores lugares con muy buenas ganancias. Cuanto más alto sea el estatus del clochard, tiene un lugar más rentable.
En general, el gobierno francés hace todo lo posible por las personas sin hogar: les proporciona comida gratis y un techo en donde se puedan cubrir cuando hace frío. Pero garantizar esto a una cantidad tan grande de personas es una tarea difícil.
5. China
En China como en Japón, se cree que todos deben trabajar. El gobierno hace todo lo posible para ayudar a los vagabundos a encontrar trabajo, les dan comida y a veces un techo que los pueda proteger. Además, hay muchos baños gratuitos y cafeterías con increíbles precios bajos.
6. EE.UU.
En Estados Unidos es inapropiado mirar a las personas sin hogar con desprecio, preferentemente, deben dirigirse a ellas con respeto y cuidado. Por ejemplo, en California, frecuentemente se puede observar cómo un transeúnte se sienta al lado de un "habitante callejero" y entablan una charla.
Existen campamentos de tiendas especiales. En ellos se puede encontrar un televisor, computadoras y alguna otra tecnología no barata. A muchas personas sin hogar se les proporciona trabajo y pueden alquilar departamentos, pero eligen refugios en donde puedan lavarse, descansar y comer gratis.
Además, los vagabundos estadounidenses reciben subsidios por desempleo cuyo beneficio es de 1200 a 1500 USD al mes; por eso, muchos pueden darse el lujo de ser vegetarianos.
7. Gran Bretaña
A diferencia de los EE.UU., donde los vagabundos viven principalmente del presupuesto federal, en Gran Bretaña, una gran parte de la ayuda esté en manos de organizaciones benéficas, las cuales les otorgan a las personas sin hogar una vivienda, comida y ropa.
El gobierno también ayuda. Por ejemplo, si una familia completa se declara como personas sin hogar, entonces por ley se les tiene que proporcionar alojamiento gratuito, el cual necesariamente tiene que estar ubicado en el mismo barrio donde estudien los niños, en caso de haber. Por lo tanto, como norma, dichas familias se instalan en hoteles caros y casas alquiladas.
Sin embargo, un sistema tan generoso no estimula a las personas sin hogar a trabajar y aprender. Una gran cantidad de personas sin hogar no tienen educación y nunca han trabajado en ningún lado.
8. Australia
En Australia no existe ninguna palabra como vagabundo o indigente. Ahí se les llama "habitantes que pasan la noche en las calles". A diferencia de otros países, el porcentaje de vagabundos no supera el uno por ciento. Y una gran cantidad de ellos está conformada por personas jóvenes en edades de hasta 19 años.
Para las personas sin hogar, hay una red completamente gratuita que incluye peluquerías, lavanderías, cafeterías y refugios.
9. Marruecos
La vida de vagabundo en Marruecos no es tan buena como en los países europeos. La mayoría de los vagabundos son niños que se van a vivir a la calle y pasan allí el resto de su vida. A veces, las familias mandan a los niños a la calle a propósito porque no tienen dinero para mantenerlos a todos.
El gobierno prácticamente no les ayuda, sin embargo, hay una multitud de organizaciones de beneficencia que intentan ayudar a los vagabundos y remediar la situación. Por ejemplo, existe un centro diurno para los niños vagabundos, donde tratan de darles de comer y hacerles participar en la vida de la sociedad.
10. Rusia
En Rusia, el 75 por ciento de vagabundos son personas en edad laboral entre 20 y 50 años. No obstante, la situación de apoyo a los vagabundos es mala. El gobierno no les da ni prestaciones, ni viviendas subsidiadas.
Todo el apoyo viene de organizaciones de beneficencia y religiosas que consiguen empleo para los vagabundos. Sin embargo, tales organizaciones son pocas y existen normalmente en las ciudades grandes. Por ejemplo, en Moscú, hay tan solo 5 organizaciones.